El actor, director y productor de cine ha recogido de manos del ministro de Cultura el Premio Nacional de Cinematografía.
El actor, director y productor de cine Antonio Banderas ha dicho en la mañana del sábado al recoger el Premio Nacional de Cinematografía que la palabra «nacional» que define al galardón es «la clave de que el premio suene serio, contundente e institucional».
«Espero que, tras 37 años de carrera, mi trabajo le haya sido útil a alguien, a algún actor, a alguien a quien arranqué una sonrisa, útil a quienes se rieron conmigo, y útil a mi tierra», ha dicho.
Banderas se desplazó desde Sudáfrica, donde estaba trabajando, hasta Donostia para recoger el premio que, tradicionalmente entrega el ministro de Cultura en el marco del Festival de Cine de San Sebastián.
Íñigo Méndez de Vigo ha valorado a un artista, ha dicho, «que dejará a los jóvenes el mensaje de un luchador agradecido que jamás dejó de amar a su país», un «patriota» al estilo de Cela, que nunca olvidó que «el lugar en el que nació se merece todo el amor del mundo».
SOBRE CATALUÑA
Banderas quiso mojarse sobre el referéndum de autodeterminación en Cataluña, actualmente prohibido por la justicia, al afirmar que el derecho al voto es importante, pero que también lo son la ley y el estado de derecho.
«Votar lógicamente es unos de los grandes preceptos de la democracia, pero el respeto a la ley y el Estado de Derecho son muy importantes también, no solo votar, porque alguien puede plantear votos ridículos, como eliminar a los que no son de nuestra raza», aseguró Banderas.
Las declaraciones del actor se producen en momentos de tensión en Cataluña, donde se han generado numerosas protestas tras la realización de operaciones policiales para frenar el referéndum de autodeterminación del 1 de octubre.
«La democracia está formada por otras muchas ramas de ese árbol y tenemos que hacerlo entender porque si no vamos a terminar cazando moscas», dijo el actor y director malagueño de 57 años.
Banderas dijo que le tocó vivir «los últimos rescoldos del autoritarismo y los primeros de libertad» tras la dictadura franquista, y pese a que han pasado «muchas cosas» desde entonces, sigue creyendo en «ese proyecto común».
ElHuffPost
