Entre quejas y propuestas las amas de casa de Nueva Esparta hablan sobre lo difícil que se ha convertido hacer un mercado completo para su familia. Algunas apoyan la idea de que mantengan un control de ventas por número de cédula, mientras otras consideran que la solución está en que el Gobierno nacional cambie de políticas de distribución y producción.
Damelis Serra, residente de Villa Rosa en el municipio García, al igual que muchas madres asegura que deben «saltar» de un supermercado a otro para conseguir los alimentos. «Yo diariamente recibo mensajes de mis amigas, de dónde hay tal o cual producto, pero en un día no logro comprar todo», describe Serra, quien aseguró que entre colas y colas se va el día sin comprar todo lo necesario.
Esta ama de casa de Villa Rosa considera que puede ser cierto que el Gobierno nacional y regional envíen las toneladas de alimentos que siempre anuncian, pero a su juicio mientras existan los revendedores no se van a terminar las colas, por lo que ella apoya la idea de que todo comercio rija sus ventas por un control de número de cédula.
El problema que observa Serra es que por los revendedores la población se ve sumergida en un mar de colas por doquier; aunque para Gladis Acosta, residente de Apostadero, en Maneiro, la solución de todos los problemas está en manos del Ejecutivo nacional y la posibilidad de que trabajen de la mano con la empresa privada para que se incremente la producción y así abastecer, como en años anteriores, todas las estanterías.
Con los cambios que pueda hacer el Gobierno, a juicio de Acosta, se podría erradicar de por vida las colas para comprar harina de maíz, papel higiénico y hasta mayonesa. Las amas de casa desean una solución, pues son ellas, en la mayoría de los casos, quienes deben asumir hacer interminables colas para comprar algún producto.
Queja
María Rodríguez, residente de Porlamar, relató que durante las colas que le ha tocado hacer en busca de algún alimento ha visto a personas peleando con botellas, puñaladas, disparos y un desorden total. Para esta ciudadana es vital que se normalicen las ventas para que no exista violencia.
Karla Marval Esteves
SOL DE MARGARITA
