No son mágicos ni basta con tomarlos para aumentar los placeres sexuales.
Pero sí ayudan a que el cuerpo esté en mejores condiciones para disfrutar de una sexualidad mucho más satisfactoria. El alto contenido de vitamina C y betacaroteno de las naranjas y otros cítricos, junto con las frutas tropicales, como el kiwi, el mango y la papaya, aumentan la progesterona y esto hace que la vagina esté más lubricada.
Por su parte, los mariscos, en especial gambas y langostinos, junto con las legumbres poseen mucho zinc, un mineral que mejora el funcionamiento de las glándulas sexuales.
Los cereales integrales tienen selenio, otro mineral que acelera el tiroides yaumenta el deseo sexual.
Las nueces contienen una serie de nutrientes que actúan sobre la dopamina, un neurotransmisor que nos vuelve más sensibles a la estimulación sexual.
Las verduras de hoja verde también poseen este tipo de nutrientes y los alimentos con formas fálicas, como plátanos y espárragos parece que “animan” a hacer el amor…
Cosmo Hispano