Un importante grupo de músicos y cantantes, todos venezolanos, bajo la dirección del maestro Alfredo Naranjo, lograron con total sonoridad y prestancia, rendir un sentido homenaje a la Fania All-Stars, la agrupación de salsa y música caribeña que se creó en Nueva York hace 60 años.
El evento se llevó a cabo el pasado domingo 15 de diciembre en la Concha Acústica de Bello Monte, en Caracas, lugar donde quedó demostrado que en Venezuela hay un talento artístico incalculable que quizás aún no logramos apreciar en su justa dimensión.
Experimentados cantantes como Carlitos Hurtado, Edgar “Dolor” Quijada, Wladimir Lozano, Hildemaro, Rodrigo Mendoza, Marcial Isturiz, Trina Medina y Joseph Amado se dieron cita no para imitar a Willy Colon, Héctor Lavoe, Celia Cruz o Cheo Feliciano sino para mostrar todo su talento y para que los arreglos sonaran lo más parecido posible a aquella música que puso a bailar a propios y extraños.
Otros más jóvenes, pero no menos talentosos como Jambene, Frank Rojas y Mark Meléndez se sumaron a este tributo venezolano y sus preciadas voces dejaron atrás las diferencias generacionales.
Melodías como “La Cartera”, “Anacaona”, “Emborráchame de Amor”, “Amor Verdadero” y “Periódico de ayer”, entre otras, sonaron magistralmente bajo la dirección, entrega y pasión del maestro Alfredo Naranjo.
Uno de los momentos más emocionantes fue cuando el músico y compositor venezolano Huáscar Barradas interpretó su flauta para homenajear al dominicano Johnny Pacheco, director y productor de la Fania All-Stars.
Trina Medina, al igual que Celia Cruz, fue la única mujer (además de las tres chicas del coro en “Amor Verdadero”) que se presentó en el escenario. Su potente voz no dejó la menor duda de que sigue siendo una de las mejores intérpretes de la música caribeña.
Joseph Amado, trajeado elegantemente de blanco y negro, interpretó dos canciones del recordado Héctor Lavoe, entre ellas, “Periódico de ayer”.
Todos los cantantes terminaban sus interpretaciones y se iban incorporando al coro. Fue una demostración de majestad, profesionalismo y amistad sincera.
Para cerrar todos los artistas, al unísono, interpretaron un clásico de la música bailable “Quítate tú, pa’ ponerme yo”. El público, ya suficientemente entusiasmado, echo el resto y se desbordó en alegría y entusiasmo.
Cabe destacar que el periodista Eduardo Rodríguez Giolitti y el ex jugador de la MLB y Salón de la Fama LVBP, Luis Sojo se encargaron de animar el tan esperado evento. Ambos derrocharon simpatía e hicieron la velada muy agradable con sus cuentos y testimonios.
Se trató de un evento de Aventura Producciones (@venturaproducciones), reconocida empresa de espectáculos que promete hacer del 2025 un año repleto de buena música y sana diversión.
Recuento histórico
Antes de comenzar el concierto el público presente pudo disfrutar de un video realizado hace ya más de tres décadas en el cual Cheo Feliciano, Ismael Miranda, Yomo Toro, Larry Harlow, Bobby Valentín, Adalberto Santiago, Johnny Pacheco y Jerry Masucci explican detalladamente cómo nació el sello Fania Records en 1964, una disquera que logró concentrar a un experimentado grupo de músicos y cantantes para hacer la música bailable que la audiencia de Nueva York y toda América Latina esperaba con gran expectativa.
Para entonces existían experiencias de música bailable e intérpretes importantes como Tito Rodríguez y Joe Cuba, con su Sexteto, pero al consolidarse el sello Fania y comenzar en 1969 los primeros conciertos de carácter experimental la música latina no volvió a ser la misma.
En 1972 se llevó a cabo un concierto, bajo la dirección de Fania Records, en la Discoteca Cheetah de Manhattan, en Nueva York, Estados Unidos y de este evento surgió la película “Nuestra Cosa Latina” (Our Latin Thing) un film que marcó el nacimiento de un movimiento denominado Salsa que impactó al mundo entero hasta el día de hoy.
La Fania All-Stars le abrió las puertas artísticas a todas esas genialidades musicales como Héctor Lavoe, Willy Colon, Celia Cruz, Larry Harlow y Cheo Feliciano, entre otros.
Sin duda alguna se trata de un género musical que llegó para quedarse y ser parte de nuestras vidas tal como lo relata César Miguel Rondón en su libro titulado “Salsa, Crónica de la música del Caribe urbano (1978)”.
Al ser consultado sobre la vigencia de la Salsa y sobre la posibilidad de que ésta desaparezca del mercado mundial, el maestro Alfredo Naranjo respondió que ese es un “terreno” que no puede ser posible.
“El sonido, el movimiento de la salsa, forma parte de la idiosincrasia del caribeño, desde México hasta la Patagonia escuchamos y bailamos salsa. La salsa es la manera musical y poética en la que nosotros hemos aprendido a entender la vida”, dijo.
Naranjo anunció que en el año 2025 seguirá en esa “naturaleza creativa” de hacer buena música y ofreciendo importantes conciertos para el público bailador.
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