En Baruta la Juventud Prolongada cuenta con sus propios espacios para el adiestramiento digital. Más de 700 abuelos cibernéticos han egresado de los diversos talleres que ofrece la Alcaldía, a través de la dirección de Desarrollo Social, y que buscan introducir a este grupo de ciudadanos en el amplio mundo del internet.
El Cyber Club de Los Abuelos de Colinas de Bello Monte –inaugurado en agosto de 2013 por el alcalde Gerardo Blyde–, la Casa de la Cultura de Baruta, en pleno casco histórico, y la Asociación Civil Buena Voluntad son los espacios habilitados por la Alcaldía para impartir las clases. “En diciembre logramos graduar a 40 abuelos en Bello Monte”, aseguró la directora de Desarrollo Social, Maeca López.
López indicó que esta iniciativa nació en el 2009, con el fin de brindar a los miembros de la Juventud Prolongada las herramientas necesarias para que se sientan más “útiles y dignos”. Agregó que la aceptación ha sido “muy buena; pues muchos de ellos tienen familiares en otros países y su comunicación ha mejorado gracias a sus conocimientos en el uso del internet”, precisó.
El programa de enseñanza, que incluye desde el encendido de la computadora hasta el uso de las redes sociales, tiene una duración de mes y medio. “Como estamos trabajando con una población etaria, que en muchos casos le teme a la tecnología, empezamos desde cero para que vayan adquiriendo la confianza necesaria”, detalló López, quien recordó que los talleres son “totalmente gratuitos”.
Con 73 años, Dennis De Jesús, de Colinas de Bello Monte, aseguró que nunca es tarde para aprovechar las bondades de la tecnología. “Gracias a este curso de la Alcaldía ahora puedo considerarme un nativo digital. En Baruta la Juventud Prolongada está bien atendida”, precisó.
Uno de los aspectos que más resaltan los beneficiados es la posibilidad de usar las redes sociales para comunicarse con los familiares que residen en otros países. “El hecho de poder utilizar la tecnología para acercarme a mis seres queridos es muy gratificante”, dijo la señora Nelly Rodríguez, de 57 años.
Freddy Máñez, instructor del programa Abuelos Cibernéticos, contó las ocurrencias de una pareja de alumnos de 80 años que empleó las técnicas digitales aprendidas para expresarse el amor que se sienten. “Se hicieron una carta en Paint, fue un momento bastante conmovedor”.
Nota de prensa