El contratista estadounidense, Alan Gross, ya se encuentra en suelo norteamericano. Tras estar cinco años en prisión, el régimen de los hermanos Castro lo dejó en libertad a cambio de tres espías cubanos que estaban presos en territorio estadounidense.
Gross llegó en compañía de su esposa y dos congresistas. Las autoridades cubanas lo liberaron ante un pedido de carácter humanitario formulado por Estados Unidos, afirmó un funcionario de la Casa Blanca, en Washington.
El estadounidense cumplió cinco años de una pena de 15 por «amenazas a la seguridad del Estado». Poco antes, la cadena de TV ABC News había informado que Gross ya se encontraba camino a su país.
«Hace cinco años fue arrestado por sus esfuerzos para ayudar a los cubanos a tener mayor acceso a internet», había afirmado el vocero del presidente Barack Obama el pasado 4 de diciembre, fecha en la que el contratista cumplía cinco años de prisión.
La liberación de Gross «eliminaría un obstáculo hacia unas relaciones más constructivas entre Estados Unidos y Cuba», concluyó el portavoz de Obama ese mismo día.
Gross fue arrestado y encarcelado el 4 de diciembre de 2009 cuando trabajaba en la isla como contratista de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID). Catorce meses después fue juzgado y condenado a 15 años de prisión, acusado por el gobierno cubano de «acciones contra la integridad territorial del Estado».
EEUU mantiene que Gross trataba simplemente de proporcionar acceso «sin censura» a internet para «una pequeña comunidad religiosa» judía en la isla y esperaba que «no pasara otra navidad sin estar con su familia», según indicó una alta funcionaria del Departamento de Estado.
Fuente: Infobae