La Guardia Costera italiana ha coordinado a lo largo de este miércoles doce operaciones simultáneas frente a las costas libias
Naufragio a unas 30 millas de la costa de Libia. CHRIS CATRAMBONE MOAS
Otro día negro en el Mediterráneo. Autoridades, ONG y algunos buques mercantiles han amanecido este miércoles con 12 operaciones de rescate simultáneas a aproximadamente 30 millas (unos 50 kilómetros) de las costas libias, todos ellos coordinados por el Centro de Rescate de Roma. En ellas han sido rescatados al menos 1.800 migrantes que se subieron en Libia —previo pago de miles de euros a las mafias— a barcos de madera y de goma de dudosa resistencia. Al menos 34 han fallecido, entre los cuales se encuentran una decena de niños, según ha informado la Guardia Costera italiana. Los rescates se han prolongado durante todo el miércoles con la ayuda de 14 embarcaciones, entre las cuales se encuentran dos embarcaciones y tres patrulladores de la Guardia Costera italiana y la embarcación de Moas, una ONG desplegada en la zona de rescate SAR (búsqueda y rescate en inglés).
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— Chris Catrambone (@cpcatrambone) 24 de mayo de 2017
Ver imagen en Twitter Chris Catrambone ✔@cpcatrambone No words… 04:50 – 24 May 2017 1.2681.268 Retweets 443443 me gusta Información de Twiitter Ads y Privacidad Chris Catrambone, fundador de Moas, ha criticado en Twitter lo ocurrido: «Esto no es una película de terror, es una tragedia real que sucede hoy [miércoles] en las puertas de Europa», ha escrito mientras publicaba las fotos de uno de los rescates donde aseguraba que había más de 700 personas en «al menos» una barca de madera. «Al ser tantas personas, no teníamos salvavidas suficientes y un avión español nos ha tirado refuerzos desde el aire», ha añadido la portavoz de la organización. Roma rebaja, sin embargo, esa cifra a 500 migrantes, de los cuales unos 200 se habrían caído al agua y habrían sido rescatados sin dejar desaparecidos. Las autoridades italianas han aclarado que uno de los cadáveres ha sido trasladado al buque italiano Fiorillo, mientras que los otros se encuentran a bordo de Phoenix, el buque de recreo convertido en barco de rescate con el que la ONG lleva más de tres años salvando vidas del medio del mar.
Las razones del naufragio todavía son desconocidas, según explica Cosimo Nicastro, comandante y portavoz de la Guardia Costera, al detallar que a bordo de Fiorillo se encuentran unos 700 migrantes rescatados en intervenciones anteriores. «Puede haber sido una ola o simplemente el hecho de que las personas [a bordo] se hayan desplazado a un lado de la embarcación al ver llegar los rescatadores», explica por teléfono. Ese es precisamente el momento más crítico del rescate, según los voluntarios, pues los migrantes se ponen nerviosos al divisar a sus salvadores y pueden caer al agua. Muchos no saben nadar. Así volcó una barcaza de madera hace un año en cuyo naufragio fallecieron ahogados y asfixiados decenas de personas.
Body Count now at 34…Most are toddlers pic.twitter.com/FlQ0V6PliA
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«Todavía desconocemos identidad y nacionalidad de los fallecidos. Nos hemos concentrando en salvar a los vivos», ha añadido el portavoz de la Guardia Costera italiana. A última hora de la tarde de este miércoles todavía no se habían concluido do operaciones y en las fotos del rescate se divisaban en las fotografías: son los barcos que arden a lo lejos para que los traficantes de personas no las vuelvan a utilizar.
El buque Aquarius, de Médicos Sin Fronteras, ha llevado a bordo este miércoles a 1.000 personas —rescatadas el martes— en su cubierta camino de Salerno (en la península italiana). Al menos otros 200 han sido interceptados por la Guardia Costera libia durante el mismo día, según informa France Presse. En lo que va de año, 1.340 personas han muerto en todo el Mediterráneo, la mayoría (1.252 en la ruta entre Libia e Italia), según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). En todo 2016, 5.068 personas murieron en el intento de alcanzar las costas de la Unión Europea, según la misma organización. Fue el año más mortífero en el Mediterráneo desde que se empezó a contabilizar en 2006. Más de 180.000 migrantes han llegado a las costas de Italia en 2016, con un incremento de más de un 17% sobre las llegadas del año anterior, según informó este marzo el Ministerio del Interior.
EL PAIS
DENISE ZANI
BELÉN DOMÍNGUEZ CEBRIÁNTwitter