Tiene 65 años y su voz permanece intacta. Pareciera que para Steven Tyler el tiempo no pasa, por lo menos en su voz. Esa noche la legión de seguidores de “Los chicos malos de Boston”, como se dieron a conocer en sus inicios, recibieron lo que fueron a buscar, esos grandes éxitos de los 80 y 90 que les dieron la fama mundial y que hoy día los han hecho ser una de las bandas de más respetables del rock.
Las características notas altas a las que llega Steven Tyler, tal cual como escucharon en sus discos de estudio, hicieron delirar a todos sus fanáticos en lo que fue su segunda visita al país. Muchos revivieron viejos tiempos, otros se deleitaron con sus nuevos temas, pero lo cierto es que Aerosmith, una de las bandas más legendarias, aún no ha perdido ni un ápice de su esencia.
A las 8:36 de la noche Steven Tyler apareció de una forma no inusual. Casi como de la nada emergió del escenario que estaba dispuesto en forma de pasarela y con él, los otros cuatro integrantes de la banda.
Inmediatamente comenzó con su recital y fue “Let the Music Do the Talking” la encargada de abrir el repertorio de temas. Los gritos ensordecedores de la audiencia no se hicieron esperar y el quinteto estaba allí dispuesto a ofrecer una noche llena de rock.
“Love in an Elevator”, “Jaded”, “Oh Yeah”, “Same Old Song and Dance”, siguieron inmediatamente en la lista de canciones que tenían preparadas para el público. Tyler no reparó en bailar y jugar con movimientos sensuales sobre el escenario lo que hizo delirar más aun a todos.
Con su micrófono de pedestal que siempre lo llevaba consigo cual Jesucristo con su cruz, Tyler continuaba sin parar entonando sus más grandes éxitos. “Crying” y “Amazing” fuero unas de las piezas más coreadas de la noche.
El momento más emotivo estuvo a cargo de “I Dont Want to Miss a Thing”, una de sus baladas comerciales más exitosas y que formó parte de la banda sonora del film Armagedon.
Vestido con un sobretodo plateado, pantalones blancos y camisa morada brillante, el también ex jurado del programa American Idol, interactuó con la audiencia en varias oportunidades, unas veces en inglés, otras en “spanglish”.
La lista de canciones incluyo temas como “Last Child”, “Toys in the Attic”, “Living on the Edge”, “What it Takes”, “No More, No More”, “Janies Got A Gun”. La versión de “Come Together” de los Beatles también figuró.
Ya pasada la 10:30 de la noche realizaron la acostumbrada falsa despedida para luego regresar con uno de los momentos más cumbres de la noche. Se trataba de Tyler tocando un piano de cola blanca e interpretando el tema “Sing For The Moment”, mientras Joe Perry tocaba la guitarra de forma nunca antes vista para muchos de los presentes.
Con “Sweet Emotion” se despidió, mientras la euforia de la audiencia dejó por sentado haber quedado satisfecha por haber sido parte de uno de los recitales más destacados en lo que va del año en nuestro país.
Fuente:el-carabobeno.com