El hijo del primer presidente de la democracia española dijo que la prioridad en Venezuela es que se realicen elecciones transparentes
Adolfo Suárez Illana, hijo del primer presidente de la democracia española, dijo este jueves que Nicolás Maduro ha buscado dividir a la oposición venezolana para triunfar. Sin embargo, consideró que no por ello tiene la victoria asegurada.
“Maduro les ha llevado a un punto de confrontación, pero no tiene por qué triunfar. Estos partidos podrán volver a acordar estrategias conjuntas y compartir el éxito de la devolución de la soberanía al pueblo. En España, en la época de la transición, que me digan si estaban de acuerdo en todo la oposición y el gobierno, incluso la oposición en todo. No es verdad y construimos un gran país”, dijo al diario ABC.
Suarez Illana, que vivió tres años en Caracas, sostuvo reuniones con políticos opositores la semana pasada y resaltó que los dirigentes de oposición han enfrentado diferencias personales e ideológicas, pero aseguró que tienen en común que todos quieren recuperar la soberanía de Venezuela.
“Lo único sobre lo que es indispensable estar de acuerdo es sobre la profunda voluntad de vivir en paz y en libertad. Soportan situaciones personales complicadas, la persecución a la que les ha sometido el régimen de Maduro es inmensa”, comentó.
El político español indicó que la prioridad en la política de Venezuela es lograr acuerdos para tener elecciones presidenciales transparentes.
“Lo primero ahora es conseguir que haya una elección libre, democrática, universal, secreta, garantizada por la comunidad internacional y que nos dé la posibilidad de tener un presidente emanado de la voluntad del pueblo. Es el verdadero objetivo. Y para conseguirlo hay que presionar desde la comunidad internacional y desde los partidos de la oposición”, expresó.
Afirmó que Maduro ha cometido el pecado capital de un político: quebrar la convivencia democrática y pacífica. Además, considera que llama «constantemente» al odio.
“Lo que ha hecho Maduro es quebrar la convivencia democrática y pacífica. Es el pecado capital de un político, elegido para gestionar las cuestiones comunes. Y es el caso contrario al de mi padre en España. No era un presidente democrático cuando fue elegido y quiso dirigir a todo un pueblo, y lo consiguió, hacia la democracia”.
También se refirió sobre la situación de la estatal petrolera (Pdvsa). Puntualizó que las decisiones que ha tomado el régimen en la administración de la empresa son un reflejo de que no existe capacidad para manejar la situación.
“Es una muestra más de la falta de capacidad para manejar la situación. Pdvsa era una empresa modélica y se la han cargado. En Venezuela hay gente capaz, había gente sobresaliente en la gestión del petróleo. Los militares tendrán una formación magnífica para ejercer su profesión, pero no para defender un negocio tan complejo”, dijo.
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