Desde las seis de la mañana de ayer, 900 internos de la cárcel de El Rodeo III (distribuidos en tres pabellones de 300 internos cada uno) iniciaron una huelga de hambre para solicitar el restablecimiento de las visitas que fueron suspendidas la semana pasada.
Los reos anunciaron la medida vía telefónica y por mensajes de texto, indicando que «ya basta de tantos abusos con la visita y contra nosotros. Exigimos nuestros derechos».
Familiares indicaron que la decisión de dejar de consumir alimentos obedece a una medida de presión hacia las autoridades carcelarias, pues la semana pasada prohibieron las visitas de forma arbitraria. Además, denunciaron maltratos por parte de los efectivos de la Guardia Nacional.
Sin embrago, se conoció que las visitas fueron suspendidas, pues la semana pasada los reclusos protagonizaron una balacera cuando había familiares dentro del recinto penitenciario.
La tarde de ayer, un grupo de familiares y voceros del penal se reunió con las autoridades para llegar a un acuerdo. Hasta las 5 de la tarde no había decisiones. Los reclusos solicitan la destitución de los funcionarios penitenciarios.
Fuente: EU