María Adelaide Da Silva e Inés Figueroa, presidente y vicepresidente de la Cámara de Comercio e Industria del Municipio Tucupita, señalaron que el 80% de los comercios de Tucupita no se ha adaptado al Impuesto de las Grandes Transacciones Financieras (IGTF).
Explicaron que hay muchos contribuyentes especiales que, son pequeños comercios, y todavía no han podido adquirir las máquinas fiscales, porque prácticamente perdieron toda su capacidad de inventario y es muy difícil disponer de miles de dólares para comprar estos dispositivos.
Por otra parte, Da Silva apuntó que regresaron las restricciones de combustible al municipio. Durante los últimos meses la bomba internacional de Tucupita estaba surtiendo todos los números de placa, todos los días, pero en las últimas semanas nuevamente la restringieron el servicio.
Con respecto a Corpoelec, las tarifas han aumentado de manera exorbitante. “Prácticamente no hubo ninguna actividad durante la pandemia y Corpoelec no tomó en cuenta nada de eso y no cobran la luz de acuerdo al consumo, sino de acuerdo a un contrato”.
Fuente: El Universal
