Un elemento básico, pero que le proporciona variedad y placer al encuentro íntimo es, sin lugar a dudas, las posturas sexuales. Las cuales, más allá de las posiciones ofrecen a la pareja roces, contactos, sensaciones y, sobre todo, movimientos eróticos que pueden llevarlos a ambos a alcanzar el clímax.
Para el sexólogo, Ricardo Eguiguren, es importante que entre cada placer, a punto de llegar al orgasmo, la pareja haga una pausa, ya que ésta le permitirá no sólo prolongar las sensaciones sino descubrir qué es lo que los estimula más a ambos. Es aquí donde los movimientos sexuales dentro del coito se vuelven una herramienta de erotismo, deseo y éxtasis.
1. Prueba y error. Durante el coito, tu compañero deberá hacer siete introducciones poco profundas –sólo con el glande– y dos profundas. Después seis superficiales y tres profundas y así sucesivamente hasta que haga nueve profundas. Estos movimientos resultan muy excitante para ambos y ayudan a que él retrasar el orgasmo.
2. Ondulatorio. Mueve la pelvis de derecha a izquierda mientras tu pareja penetra lentamente y de manera ondulatoria. Debes acercarte y retirarte constantemente.
3. Giros. Este se trata de un movimiento que requiere de mucha práctica, ya que la mujer debe girar repetidamente sobre el pene de su compañero.
4. Carrete. Se basa en contraer y distender durante el acto sexual los músculos vaginales, como si se practicara una masturbación en la zona, (succión y expulsión). Esta técnica intensifica los orgasmos del varón y ayuda a la mujer a sentir varios seguidos.
5. Vertical. El movimiento de ella es desde arriba hacia abajo
6. Columpio. Tu pareja debe levantarte, mientras tú pasa tus piernas por encima de los brazos de él, a continuación trata de hacer movimientos como si simularas mecerte.
Existe una gran diversidad de posturas que pueden favorecer y facilitar estos movimientos sexuales. ¡Inténtalo! Recuerda, para que tu vida sexual sea placentera siempre debe existir respeto y confianza.
Fuente: http://sexualidad.salud180.com