Tener una buena comunicación con tu pareja es fundamental, pero eso no significa que debas guardarte algunas cosas sobre su «amiguito».
Así como la comunicación, es igual de importante no dañar el autoestima de tu chico, por eso aquí te damos una pequeña guía de lo que no debes decirle.
1. Mi ex lo tenía…
Jamás compares a tu chico con un ex, aunque el miembro de tu antigua pareja sea el mejor pene que hayas visto en tu vida, ¿no crees que para ti también resultaría molesto que te hablase sobre el pecho o el trasero de su ex-pareja?
2. Aunque sea pequeño, a mí me gusta.
A ellos sí les importa el tamaño. Así que mejor ni pronuncies algo al respecto, aunque le digas que disfrutas en las relaciones, posiblemente pensará que tus orgasmos son fingidos y se deprimirá, lo cual puede ocasionar muchos más problemas en la relación. Si estás disfrutando, mejor no lo menciones, aunque si no estás satisfecha piensa bien si quieres sentirte así toda la vida.
3. Tu pene tiene un color raro, ¿no?
A menos que la tonalidad de su miembro te resulte preocupante y creas que debe visitar al médico de inmediato, debes decirle. Pero en la mayoría de los casos es mejor guardar silencio, recuerda que ahí se encuentran muchas terminaciones nerviosas, así como venas u otros factores que pueden hacer que el pene se vea de otra tonalidad (claro, sutilmente)
4. Es tan… bonito.
Puede ser grande, ponerte caliente, ser perfecto para ti pero nunca, NUNCA, un pene será «bonito». Su virilidad estará por los suelos si se te ocurre calificar con un adjetivo dulce su miembro… Así que, ahórrate tu exaltación de ternura.
5. ¿Crees que cuando seas viejo, encogerá tu pene?
Es una preocupación innecesaria para ambos, así que quédate con la duda si no quieres que salga corriendo. Si siguen juntos para entonces, ya tendrás la oportunidad de comprobarlo sin acabar con su seguridad.
6. ¿Puedo jugar con tu pene?
Sí, puede ser que él se emocione cuando te escuche pronunciar esta frase pero lo que no sabe es que tu curiosidad va más allá de los juegos eróticos… Recuerda que lo que tienes entre manos ¡es un pene, no un juguete!
Mide bien tus palabras y no se te vaya a salir ninguna de estas frases.
Fuente: Veintitantos