Probablemente los productos light estén de plena moda. De hecho, saber que podemos comer ciertos caprichos engordando menos es una gran tentación. Pero no todo son ventajas, y en este caso, te damos algunas razones para no consumir este tipo de productos.
Menos grasas, menos grasas buenas
Los productos light tienen menos grasas. Pero en esa reducción de las grasas no se tienen en cuenta las que son buenas y las que son malas, y quizás por eso no son tan recomendables como podrían parecerlo a primera vista.
Más aditivos químicos
Para conseguir en ocasiones que los productos light tengan un sabor similar a los productos normales, hay que añadir ciertos químicos que no están bien para nuestra salud, ya que no son naturales y pueden tener efectos adversos.
Sustitución de elementos esenciales
En muchos productos se sustituyen los elementos esenciales, como puede ser la grasa animal, por otros componentes que no resultan ni tan sanos, ni tan necesarios.
No siempre engordan menos
Light significa bajo en grasas. Concretamente, tienen un 33% menos de grasas que los productos habituales. Pero la grasa no es siempre la principal fuente de calorías.
Elementos no propios de lo que estamos comprando
Cuando compramos productos light podemos llevarnos la sorpresa de que al leer los ingredientes, existen una serie de sustancias que en el producto en el formato habitual, es decir, sin ser light no se le han añadido ni las tiene de forma natural.
Como ves, también hay cosas negativas en los productos light de las que nadie parece querer hablar. Lo mejor es siempre elegir productos naturales, y siempre que se pueda, que estos sean orgánicos. Al fin y al cabo, todos los nutrientes los necesitamos.
Fuente: iMujer