Se trata de ser creativa, espontánea y extrovertida para que él se anime a participar en el foreplay. Checa estas divertidas ideas para que el aburrimiento no siga quebrantando su relación.
¡Manos a la obra!
Los alimentos afrodisíacos siempre son un hit, aunque no se pasen de la ingesta de comida, o terminarán dormidos antes de que comience la acción. Unos bocadillos apetecibles serán suficientes que su libido se vaya a las nubes. Chocolates con menta, un smooothie de fresa, un postre que contenga canela… hay una gran variedad de opciones que pueden implementar en el juego preliminar.
Los preservativos no deben faltar, no importa que no los vayan utilizar, pueden usarse como parte del juego. Para ello deben apostar por los condones de diferentes colores, sabores, texturas y hasta los térmicos, para potenciar sus orgasmos.
El roleplay es otro acierto para darle un twist a sus encuentros íntimos. La lencería, los disfraces, los aditamentos (velas, inciensos, música estimulante) poco convencionales en su recámara, los inspirará para realizar acciones novedosas.
Salgan de la cama y atrévanse a salir de su zona de confort. Pueden comenzar el intercambio de caricias en un lugar público, y finalizar en un cuarto de hotel, donde podrán saciar sus fantasías con toda confianza de que no serán interrumpidos.
Para que nada pueda interrumpir su momento de pasión, ¡llevan su kit de lubricantes! Son básicos, además de que sus sensaciones se incrementarán porque facilitarán las penetraciones, los pueden encontrar en una gran variedad de sabores ¡para probarlos!
Fuente: Veintitantos
