Beber mucha agua
¡Nada más económico que el agua! Este es sin duda el hábito más importante al momento de tener una piel sana, ya que es uno de los elementos vitales que requiere nuestro organismo para funcionar. La hidratación es de suma importancia en procesos como el tránsito intestinal, el buen funcionamiento del metabolismo, eliminación de toxinas, aumento de elasticidad, entre otros.
Ten en cuenta que aproximadamente el 70% del cuerpo está compuesto por agua, por lo que mantener el cuerpo hidratado puede generar más energía y vitalidad para que el cuerpo trabaje correctamente de manera natural.
El hielo se transforma en un cosmético ideal para cuidar y rejuvenecer la piel, ¿por qué? Porque refresca, tonifica y estimula la delicada piel del rostro. Este contacto frío y directo en la piel permite que la circulación sanguínea ayude a rejuvenecerla, además ayuda a cerrar los poros y combatir manchas. Por otro lado, ¿sufres de ojeras? ¡También es una gran solución! Ya que este ejercicio desinflama los ojos hinchados.
La técnica consiste en colocar los cubos de hielo en una toalla limpia, luego frotarlos en el rostro en intervalos de 30 segundos por unos 10 minutos. Puede emplearse en las mañanas y noches.
Es un compuesto sólido soluble en agua, aporta innumerables beneficios para la salud de la piel, además es bastante económico y accesible. Puede utilizarse como exfoliante mezclado con agua o jugo de limón y con esto eliminar las células muertas. También es efectivo para la eliminación de las manchas y el tratamiento del acné.
Otros usos del bicarbonato son combatir el mal aliento, tratamiento contra las manchas de los dientes, eliminador de residuos en el cabello, desodorante natural, antiácido, entre otros.
Cuando investigamos sobre tratamientos faciales naturales, siempre el limón figura entre los primeros en la lista. Tiene múltiples beneficios, que van desde ayudar a bajar de peso, hasta aclarar las manchas de la piel. Se puede utilizar directamente en la piel o mezclarse con casi cualquier cosa.
Es importante tener en cuenta que para aplicarse en el rostro, es recomendable diluirlo con agua (u otro componente), además de ser utilizado en las noches porque su exposición al sol tiende a manchar la piel.
Una mascarilla de jugo de limón, yogurt natural y pepino es perfecta para hidratar el rostro dos veces por semana.
El aloe vera puede regular la grasa de la piel, limpiar los poros, rejuvenecer y combatir las afecciones de la piel. Simplemente es necesaria una hoja de sábila para extraer el gel, cuyo aspecto transparente y baboso (además del olor) no son tan agradables como la sensación que deja luego de ser aplicado, pero créelo ¡vale la pena!
Sus componentes pueden ayudar contra las inflaciones y molestias de la piel, ya que aportan elementos para su hidratación y reparación, además de su efecto calmante. Puede utilizarse directamente en la piel por las noches, luego de haberla limpiado muy bien. Es económica y sencilla de conseguir en tiendas naturistas.
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