Un total de 43 reclusos lograron evadirse en dos acciones simultáneas ocurridas en las comisarías de Simón Rodríguez y Propatria, sede del Eje Oeste de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc).
De acuerdo con informaciones extraoficiales, las fugas habrían ocurrido en horas de la madrugada de este domingo, cuando los detenidos lograron abrir sendos boquetes en las paredes de los calabozos y escaparse sin que sus celadores se dieran cuenta de la evasión hasta entrada la mañana.
La información señala que 35 lo hicieron de las celdas del Eje de Homicidios de la comisaría de Propatria y ocho detenidos lograron escapar de la sede de Simón Rodríguez.
Al enterarse de la noticia madres, esposas y padres de los presos de la comisaría de Propatria acudieron al centro policial a ver qué información obtenían sobre la situación sus familiares, sin embargo el hermetismo fue total.
Sin embargo el intenso movimiento policial era inusual en ambos centros. Funcionarios salían para tratar de dar con el paradero de los evadidos.
De acuerdo al testimonio de familiares el hacinamiento es una de las constantes del centro de Propatria, ubicado en el oeste de Caracas. “La celda donde se encuentran los detenidos sería del tamaño de media cancha de basquetbol que fue adaptada para albergar a la población penitenciaria, allí hay como 90 presos que duermen en colchonetas que ponen en el piso”.
En el otro calabozo hay un número parecido de presos, pero en un espacio más pequeño.
Denunciaron los maltratos que han recibido: “ni siquiera nos dejaron llevar comida como todos los días, no nos dicen nada, no sabemos qué pasó con ellos y estamos en esta angustia”, dijo Mildres Pérez.
Por su parte Carmen González denunció que fue maltratada y detenida arbitrariamente en horas de la madrugada por comisiones policiales que acudieron a su casa en busca de su hijo, uno de los fugitivos.
“Me esposaron, se metieron en mi casa y rompieron todo, lanzaron las cosas al piso y cuando les dije que yo sufría del corazón, me respondieron que no era problema de ellos, que les dijera dónde se había metido mi hijo, porque si no se los decía me iban a encerrar, pero yo no sé nada, así que al final tuvieron que soltarme y me vine acá a la comisaría a ver qué podía averiguar sobre esta fuga”.
En la comisaría de Simón Rodríguez, la situación era distinta, a los familiares no les informaron de la fuga, pero sí notaron una actitud extraña por parte de los custodios, quienes las trataron de “mala manera, nos dijeron que no habría visitas y que no se les entregaría comida hoy, pero no nos dijeron más nada”.
De acuerdo a informaciones extraoficiales unos 10 de los 43 fugados habrían sido recapturados en los operativos que se implementaron en la ciudad.
Fuente:EU