21 cosas que nunca debes de regalar en navidad

21 cosas que nunca debes de regalar en navidad

Ha llegado esa hermosa época del año en que te reunirás junto a tus familiares, alrededor de un arbolito, para celebrar el nacimiento de un judío que murió hace siglos. Traerán regalos, como en cualquier cumpleaños; pero los regalos serán para los invitados, como en ningún cumpleaños. Los intercambiarán entre ustedes, tal como lo dicta una antigua costumbre pagana. Algunos, incluso, serán traídos por un anciano que vive en el Polo Norte. La mejor parte del agasajo será cuando tú rompas las coloridas envolturas que cubren a los obsequios y tengas que disimular la cara de desilusión.

 

¿No se supone que tu familia debería conocerte? ¿Tendrán alguna idea de tus gustos y necesidades? Tantas veces que han repetido contigo la rutina decembrina y lo único que parecen reafirmar cada Navidad es que ignoran quien eres. Un perfume con olor a pizza es tu recuerdo más emblemático de una serie de chucherías que te tocó agradecer con una enorme sonrisa, y que al poco rato fueron condenadas a albergar polvo en el cuarto de San Alejo.

 

¿Y tú ya conseguiste los regalos con los que sorprenderás a tus familiares? ¿Volverás a producir sinceras sonrisas gracias a tu agudo talento para encontrar lo adecuado, pese a que invariablemente haces las compras a última hora? A Santa Claus puede que lo insulten por no respetar el listado que le enviaron con mucha anterioridad, pero tú serás la estrella de la noche, en la noche del cumpleaños del difunto Jesús.

 

Envidio tu ingenuidad. Por algún extraño motivo tu ego te ha convencido de que ninguno de tus pasados obsequios han terminado en el cuarto de San Alejo. Supones también que ninguno de tus familiares se han burlado de ti a espaldas tuyas; ni siquiera cuando le diste una calculadora con forma de barra chocolate a tu tía que es alérgica al chocolate y a las matemáticas.

 

La solución que remediaría las decepciones navideñas de un tajo, sería prescindir del intercambio de regalos. Pero dado que los comerciantes no permitirán que se esfume la mejor temporada del año en ventas, te traigo veintiún cosas que debes eludir si quieres reducir el promedio de sonrisas fingidas en tu familia, te traigo veintiún cosas que NUNCA debes regalar en Navidad:

 

1) Medias: Siempre quedas como un zapato.

 

2) Velas: Un adorno que no debe usarse para que no se gaste… ¿Sabías que desde hace más de un siglo existe la bombilla eléctrica?

 

3) Un libro cuyo título sea una indirecta: ‘Es hora de sentar cabeza’, ‘La felicidad está en el matrimonio’, ‘Si tus amigos se casaron, ¿por qué tú no?’, ‘El adulto inmaduro’, ‘El compromiso para Dummies’.

 

4) Ropa con una talla de más: Tu pareja supondrá que está gorda.

 

5) Ropa con una talla de menos: Tu pareja supondrá que debe bajar de peso.

 

6) Ropa interior para tu esposa escogida por tu mamá: ¿Te excitan los calzones tipo abuelita?

 

7) Un sexy disfraz navideño: Fantasear con un policía o una enfermera es comprensible… ¿pero con Papá y Mamá Noel? ¿Sueñas con decir que tienes un ‘regalito’ en tu entrepierna?

 

8) Un bono para comprar lo que quieras, en una tienda donde lo más barato cuesta el valor del bono y una suma adicional.

 

9) Un mug que diga “La vida empieza a los 21”, para un niño de 7 años; o uno que diga “La vida se acaba a los 40”, para alguien en crisis de mediana edad.

 

10) Un lote en el cementerio para tu suegra: La intención es lo que cuenta, menos cuando tu intención es ver bajo tierra a la mamá de tu pareja.

 

11) La Luna o las estrellas: Es romántico si las obsequias en un noche cualquiera, es tacaño si las obsequias en la medianoche del 25 de diciembre.

 

12) Un portarretrato con una foto tuya.

 

13) Una camiseta empacada dentro de una caja de iPad.

 

14) Una tarjeta virtual: Para ti es un detalle perfecto, porque es gratis. Para quien lo recibe es una tortura, porque además de tus sinceros deseos escritos por alguien más, le envías una melodía chillona que se repite una y otra y otra y otra y otra y otra vez.

 

15) Un regalo para otro que en realidad sea un regalo para ti: “Así es, Conejita, ¡abonos dobles, en platea baja, para la temporada liguera de mi nuestro azul del alma! ¡Que los disfrutes conmigo, obviamente!”.

 

16) Cremas antiarrugas, masajes anticelulitis, bisoñés, tarros de Viagra o artículos similares que recuerden que todo tiempo pasado fue mejor.

 

17) Una protesta contra el consumismo: Es decir, nada.

 

18) El mismo obsequio que diste el año pasado: Al menos que a ella le vuelvas a regalar una joya con diamantes, dale algo diferente; al menos que a él le vuelvas a regalar un trío con otra de tus amigas, dale algo diferente.

 

19) El mismo obsequio para tu esposa y para tu amante: Entiendo que tengas sentido de equidad. Entiendo que no quieras mostrar favoritismo por ninguna. Pero corres el alto riego de quedarte sin el pan y sin el queso.

 

20) Cualquier cosa que provenga de un almacén que no acepta devoluciones.

 

Hay una última cosa que nunca debes regalar, si deseas continuar teniendo una familia. Seguirá siendo disfuncional, pero seguirás teniendo una familia. Solo debes cuidarte de NUNCA regalar lo siguiente en el cumpleaños de Jesús:

 

21) Una vida: Si tus papás te dieron una hace varios años y, hasta el día de hoy, no has hecho nada que valga la pena, ¿qué te hace pensar que un descendiente tuyo lo hará diferente? Además, al evitar dar este regalo, evitarás que una nueva generación se desilusione de tus regalos navideños.

 

 

 

Fuente: divinacomedia

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