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Tenemos paz en Medio Oriente”, afirmó el presidente de EE.UU. desde Egipto

Posted on: octubre 14th, 2025 by Super Confirmado

El mandatario republicano encabezó la firma de su plan de paz junto a Egipto, Qatar y Turquía. Ni Israel ni Hamas participaron del acto de presentación del acuerdo.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, proclamó este lunes “la paz en Medio Oriente” al firmar junto a los mandatarios de Egipto, Qatar y Turquía una declaración que formaliza el fin de la guerra en la Franja de Gaza, tras dos años de enfrentamientos entre Israel y Hamas.

“Tenemos paz en Medio Oriente”, afirmó Trump al presentar el texto rubricado por los cuatro países mediadores, Estados Unidos, Egipto, Qatar y Turquía, al que describió como un “acuerdo histórico” que abre “una nueva era de estabilidad y prosperidad” para la región. La ceremonia tuvo lugar en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, en el marco de una cumbre internacional sobre el futuro del territorio palestino, devastado desde la ofensiva israelí iniciada tras los ataques de Hamás en octubre de 2023.

El documento, publicado por la Casa Blanca tras la cumbre, compromete a los signatarios a “garantizar la implementación del acuerdo de manera que asegure la paz, la seguridad y las oportunidades tanto para palestinos como para israelíes”. El texto firmado establece también que futuras disputas deberán resolverse “a través de la diplomacia y la negociación, no de la fuerza”.

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Una jornada para la foto
Con una puesta en escena cuidadosamente diseñada, Trump monopolizó la jornada, marcada por su protagonismo exclusivo y por los elogios de sus anfitriones. El presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, calificó al republicano como “la única figura capaz de poner fin a esta guerra” y anunció que Egipto organizará junto a Estados Unidos una conferencia sobre la reconstrucción de Gaza el próximo mes de noviembre en El Cairo.

El mandatario estadounidense, que horas antes había visitado Jerusalén y Tel Aviv como parte de su “gira de victoria”, se presentó como “artífice” del plan de 20 puntos que permitió el alto el fuego, el intercambio de 20 rehenes israelíes por casi 2 mil prisioneros palestinos y la retirada progresiva del ejército israelí, que aún controla más de la mitad del enclave.

“Se acabó la larga y dolorosa pesadilla de Gaza”, dijo Trump ante el Parlamento israelí, donde recibió una ovación prolongada. El magnate republicano seguró que su acuerdo “no solo pone fin a una guerra, sino que inaugura el amanecer de un nuevo Medio Oriente”.

EE.UU. como garante 
A la reunión de Sharm el Sheij asistieron una veintena de líderes mundiales, entre ellos Emmanuel Macron, Pedro Sánchez, Keir Starmer y Giorgia Meloni, aunque no estuvieron presentes representantes de Israel ni Hamas. El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, sí participó y mantuvo un encuentro con Trump. Durante la cumbre, el mandatario estadounidense elogió el “papel crucial” de Egipto, Qatar y Turquía en la mediación del conflicto.

Según fuentes egipcias, Estados Unidos actuará como “garantía esencial” del acuerdo y supervisará el cumplimiento de sus puntos centrales, entre ellos el desarme de Hamas y la conformación de un “comité palestino tecnocrático” que administrará la Franja bajo tutela internacional. La gobernanza de Gaza sigue siendo uno de los puntos más delicados. El plan prevé una administración interina que excluya a Hamas, lo que el movimiento islamista rechaza.

 

 

Orlando Viera-Blanco:”Oh Dios mío, no tengo palabras”

Posted on: octubre 14th, 2025 by Super Confirmado

Sólo resta decir, ruego a Dios que la política no nos distancie sino afiance nuestro gentilicio. Que germine tierra de gracia. No importa caminar, decía Jane Austen, “porque la distancia no es larga si existe un motivo”

Fueron las primeras palabras de Maria Corina Machado al recibir la llamada de Kristian Berg Harpviken, director del Instituto Nobel Noruego, notificando que había sido elegida ganadora del prestigioso galardón.

Muy emocionada María Corina dio mérito al pueblo venezolano. Una difícil y desigual lucha que ha venido librando Venezuela por su libertad, su paz y su regreso a casa. Es la consolidación de un liderazgo honesto y valiente. La estocada final de una dura batalla por recuperar nuestro derecho a ser felices.

Maria Corina se ha convertido en un factor inequívoco de esperanza y desenlace. Un premio Nobel de la Paz recibido por personalidades como Martin Luther King [1964], Nelson Mandela [1.993], Lech Walesa [1983], reconocimientos a quién no sólo pide libertad, sino quién la encarna. Un galardón a la perseverancia ética y la paz como instrumento de emancipación. Pero aún falta camino por andar. Dónde estamos?

EEUU, Donald Trump, liderazgo interno y gobernabilidad.

La intervención estadounidense como factor crucial en la transición política venezolana estaría—en la práctica—condicionada a la existencia de un liderazgo opositor que reúna tres requisitos: i.-Legitimidad política interna; ii.-Capacidad de articular y sostener pactos con sectores militares disidentes; y iii.-Capacidad para incorporar o neutralizar los “pliegues” insurgentes sin fragmentar la transición. Estas capacidades resultaron inconclusas en numerosos intentos de cambio político, sobre todo, por la imposibilidad de intentar o alcanzar pactos con militares disidentes.

María Corina Machado puede ser una figura clave si logra consolidar su liderazgo político en una estructura capaz de obtener obediencia y lealtades efectivas dentro de las FFAA. Una posibilidad es real pero incierta […] La Casa Blanca ha mostrado ambigüedad estratégica y táctica porque lo sospecha. Hasta qué punto apostar por una opción militarizada, conduce a un cambio de régimen sostenible. Una ambigüedad comprensible. La escalada de fuerza luce incontenible [ya ha sido anunciada] pero la estabilidad transicional, es un desafío difuso. El Premio Nobel en gran medida, llena estos vacíos de autoridad.

El salto a un cambio en Venezuela no se agota en una acción militar de EE.UU. Para lograr sostenibilidad, la sociedad venezolana y el liderazgo político interno, tendrán un rol determinante. Es ilusorio pensar que la salida de Maduro o de figuras duras del régimen, garantizan que ‘se acabe la rabia’. Hemos visto personajes realmente dañinos y pérfidos a la causa democrática, que ladran cual perros de caza hambrientos, criticando el Nobel a Maria Corina. Lo del grupete que se prestó al secuestro de AD, es ladino y bellaco […] Personajes taimados que parasitan con un estamento militar cooptado de corrupción y fumeta cubana, no se neutralizan con tanquetas sino con un manto de moralidad. El Premio Nobel anticipa ese baño ético que procurará pliegue al momento de quiebre. Pero la respuesta no es revancha. Es un complejo proceso de reintegración ciudadana y reconstrucción del tejido social.

Marco externo: cómo actúa (y condiciona) EE.UU

EEUU ha declarado la “opción militar” en determinados episodios. Pero una intervención definitiva ha estado condicionada a negociaciones fachada y canjes atados al costo-beneficio-regional. Un estado tomado por carteles y mafias se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para avizorar un clima de estabilidad post-salida.

El diseño operativo que más atrae a responsables de política exterior es el de una transición “asistida”: un apoyo político/logístico/operacional que amplifique las fracturas castrenses ya existentes, más que una invasión convencional. Pero la gran pregunta que se hacen los venezolanos, la Casa Blanca y los aliados internacionales, es si existe en el liderazgo opositor, el respaldo suficiente para asegurar la defensa de un nuevo gobierno democrático. En el despeje de esta disyuntiva está la llave de “la asistencia”.

La intervención efectiva de EE.UU et al, demanda interlocutores domésticos creíbles. Lo son María Corina y Edmundo González? Son percibidos como genuinos arquitectos de una nuevo gobierno inclusivo y consensuado? Existe disposición real de la gente de volver a la calle a defender el cambio democrático al día siguiente de la caída del régimen? El momentum asoma credenciales favorables. Las hemos tenido antes. Pero qué ha fallado? No es solo falta de unidad. Es humildad, es amor, es inclusión, es hacernos más accesibles a todos, es atrapar los sentimientos de la gente con la verdad para hacernos más confiables y humanos.

María Corina lo entendió. Su narrativa no viene asistida de mercadeo político. Es redención, es empatía, es paz.

La condición militar: defectos, obediencia y “pliegues insurgentes”

La clave práctica no es sólo que algunos oficiales salgan del régimen, sino que lo hagan en volumen y con cadenas de mando coherentes: la deserción dispersa (oficiales aislados, filtraciones, desarticulados) no equivale a control territorial ni capacidad de tomar instalaciones críticas (aeropuertos, bases, control de fronteras, cuarteles, PDVSA/Citgo).

La capacidad real de garantizar un periodo de seguridad, gobernanza y estabilidad neutralizando las fuerzas de sabotaje del régimen fallido. No basta un desprendimiento de las FFAA. Es la reactivación ciudadana, social y popular de la mano de un liderazgo firme, plural y abierto, lo que podría asegurar la obediencia de las FFAA y policiales. EEUU no vino para quedarse y vigilar el proceso. No es Panamá, Haití o Libia. Es la Sudáfrica de Mandela, la Ucrania naranja de Víctor Yúshchenko, la Portugal de la revolución de los Claveles; la revolución de solidaridad en la Polonia de Walesa o la revolución de Terciopelo de la República Checa de Václav Havel. El reto no es solo acabar con el monopolio del poder y la violencia, sino del miedo y la apatía. El Nobel nos da una cascada de emoción y confianza.

Me gusta anticipar la revolución de las orquídeas venezolana. Pero el nuevo liderazgo político opositor no puede ser nuevamente sorprendido por la indisciplina, el desorden y la fractura. Fragmentar la transición es morir en el intento. En la exclusión y excesos de personalización quién cobra es Maduro. Maria Corina debe cuidarse mucho de la no-verticalidad del poder. Desde la óptica de cualquier gobierno interesado en “asistir”, la prioridad es un pacto ciudadano integral y amplio que eleve el costo político de la desobediencia armada. Fuera de eso la intervención estadounidense tendría un alto grado de riesgo estratégico.

María Corina Machado: fortalezas y límites como factor decisivo.

En el plano de las fortalezas, Maria Corina hoy exhibe un perfil claro de aceptación que puede traducirse en capacidad de removilización, autoridad en sectores de resistencia y credibilidad. Su prestigio la ha posicionado como líder con alta visibilidad y condición estadista. El Premio Nobel reconoce su talante y empeño democrático y abona el camino para afianzar la causa que representa.

Su discurso hacia las FFAA, cuestionando la “unidad” chavista y llamando a que definan su postura, busca crear grietas públicas en la legitimidad del régimen. Sin embargo existen límites y riesgos. Maria Corina tiene un liderazgo político sólido entre civiles opositores pero carece de autoridad institucional sobre las FF.AA. No es fácil lograrla en un cuerpo armado invadido de adoctrinamiento, amoralidad y corrupción. Por ello depende de dos factores concurrentes: La removilización interna aunada al miedo de una escalada externa con EE.UU, por lo que su persuasión es vital.

Lograr una relación orgánica o patronal con los mandos militares de alto rango en Venezuela pasa por un movimiento interno bien organizado, pliegues policiales y militares estratégicamente eficaces y la citada asistencia internacional. No ha sucedido en 25 años que la oposición logre armar esta triada de manera cohesionada: primavera interna+pliegue policial y militar+asistencia internacional. Hemos tenido lo primero, por cierto, también minado de tensiones y cabras que saltan pal’ monte. Lo segundo sigue cooptado entre cubanos y cooperantes y lo tercero [factor internacional] ha sido más diplomacia de café, puré y espárragos, que acción real.

Maria Corina ha ganado leverage [balance/ecuanimidad] y “palanca” de sostenibilidad y resistencia. Es lo que busca Washington para respaldar una transición liderada por Machado et al. La aproximación de María Corina con Trump ha sido inteligente, pragmática e instrumentalmente bien manejada. Los militares afectos al régimen no le temen tanto a Maria Corina, como a un pueblo desbordado y a quién [la] apadrina: Trump, Europa toda [salvo España] y una mayoría de vecinos en Latam. Igual Colombia y Brasil dicen una cosa, pero sus costuras otra. Y lo dejarán solo […] Si EE.UU decide engrosar, intensificar y materializar su “búsqueda, captura y recompensa”, parte de la historia habrá acabado.

Pero aún queda el otro tramo: asegurar el rescate republicano, institucional y democrático. María Corina hoy es una carta decisiva en ese reto de asegurar un salto sustentable a la democracia. Tiene sobre sus hombros la ecuación: ascendente moral, respaldo civil y ciudadano y aliado[s] internacional [es]. Un salto que cuenta con un plan organizativo y una narrativa política donde a nadie le sorprenda, incluso países vecinos demostrarán respeto. La “pata” que le falta a la mesa es la definición de un acompañamiento de fuerza, militar, policial y ciudadano. Esa mesa ya está servida.

La Casa Blanca y el “punto de inflexión”. El Premio Nobel como estocada final.

Otro factor que “presiona” la permanencia norteamericana en el Caribe”, es que este movimiento de fuerza significativo, por costoso y polémico, pueda convertirse en una histórica victoria política y no en una sensible y anti-histórica retirada. Sería pasar de lo sublime a lo ridículo. Un aguafiestas que la Casa Blanca no se puede dar el lujo de derramar. El Premio Nobel vino a engranar a todos los que son, incorporar los que todavía callaban y decantar a los que no hacen falta [España, Rusia China, Cuba]. Si se pierde esa cadencia, se perderá el punto de inflexión.

El Premio Nobel de la Paz a María Corina Machado representa un acontecimiento de trascendencia histórica para Venezuela y para la comunidad internacional. Unl prólogo de un reencuentro hermoso. Una luz que el tiempo se había encargado de nublar, pero que ahora viene cargada de alegría y orgullo. Es una huella imborrable en el camino del rescate identitario y grupal. Este reconocimiento es la validación moral de una lucha cívica, democrática y no violenta contra un régimen autoritario, un punto de inflexión político y diplomático que faltaba en la narrativa global. El mundo oficializa quién es la víctima y quién el victimario. Pero también los venezolanos reafirmamos quién mejor representa hoy nuestros anhelos, esperanzas y sentimientos de libertad.

En el plano internacional, el galardón consolida a Machado como una figura emblemática de la resistencia democrática en América Latina, comparable con líderes como Aung San Suu Kyi o Lech Wałęsa, líderes que significaron el toque decisivo para el apalancamiento popular de cambio y emancipación. [Y] también duele decirlo, este galardón es una bofetada y un alerta para organismos como La Corte Penal Internacional, que han dejado en la plana y muy mal parada, a la justicia penal internacional. Un sacudón a la anomia que es la nada, un chocante nihilismo cuyo veneno de impunidad, adormece, desmoraliza y aplaca a los pueblos.

El premio a Maria Corina también es una gran responsabilidad. Supone nobleza en el andar, actitudes incluyentes, redentoras y amables, propias del líder con talante conciliador y justiciero. Es un compromiso superior con el pueblo venezolano, cuya paz depende de comportamientos humildes, firmes pero gentiles[…] Es el preludio simbólico de cambio, la reivindicación de la voluntad popular expresada en las elecciones del 28/7/2024 que debe traducirse en el triunfo de la papeleta sobre la violencia.

En suma, el Premio Nobel de la Paz a María Corina Machado no sólo honra una trayectoria de coherencia, valentía y sacrificio, sino que marca un hito en la historia contemporánea de Venezuela. Es situar la lucha por la libertad en el corazón mismo de la conciencia universal. Un reconocimiento que trasciende a la persona, toca la fibra de una nación libertaria y consolida las bases de las alianzas internas y externas faltantes, para que funcione la ecuación: primavera interna+pliegue policial y militar+asistencia internacional.

Felicito de corazón a Maria Corina Machado. Honrado como venezolano de esta hermosa, agridulce [dixid Soledad Morillo Belloso] “un grito, un canto, un rugido de dignidad” de una noble lucha, tejida con “rabia y ternura”. Tu padre desde el cielo nos bendice. Tu corazón y tu temple nos engalanan. Sabes bien cuánta alegría y orgullo invade nuestro pecho.

Sólo resta decir, ruego a Dios que la política no nos distancie sino afiance nuestro gentilicio. Que germine tierra de gracia. No importa caminar, decía Jane Austen, “porque la distancia no es larga si existe un motivo”… Y callo ya para no envilecer el verbo [Camilo José Cela] siendo que… oh Dios mío, no tengo más palabras. ¡Dios bendiga a la Venezuela!

 

Orlando Viera-Blanco

@ovierablanco

 

María Corina, paz con libertad…

Posted on: octubre 14th, 2025 by Super Confirmado

Una Nobel en la clandestinidad

Está sola, muy sola. Sobre sus hombros pesa la última posibilidad de la nación de Bolívar, Venezuela, de ser libre. Vive el exilio en su propia tierra, habita una patria sin ventanas escondida de las hienas chavistas y de su furia babosa, clandestina junto a su belleza innata, sin los brazos de su madre, sin los mimos de sus hijos, sola, muy sola, con un país que la venera y un mundo que la premia por su nobilísima paz moral. Su clandestinidad tiene luz porque su alma es luminosa.

María Corina, la premiada histórica por la paz mundial no puede ver el sol en su país natal. Ni recibir un abrazo ni un beso, está sin tacto ni sonrisa, es mito viviente en la sombra de la opresión.

El laurel de la paz le fue ofrecido, sí, pero en un jardín sin flores, en una habitación blanquísima e inundada de ideales. En soledad.

Oh my God!

Sé que no fui el único que se desvaneció en esa llamada amanecida que la hizo reina histórica de la Paz. ¡Oh my God! (¡O Dios mío!), pero probablemente haya sido uno de los pocos que pensó en su mamá, Corina Parisca y en su papá, Henrique Machado, cuando el anunciante noruego lloraba henchido de admiración ante la novedad. Me hubiese gustado ver a Corina y a Henrique abrazar ese momento y saludar a esa efigie de lucidez que cultivaron como hija. No pudo ser así.

Y pensé: este estandarte no es sólo de María Corina, también es de sus padres, de sus hijos, de sus allegados, de su equipo de trabajo, de Venezuela. Tuyo que has luchado y resistido, que perseveras.

Ese estandarte lleva el nombre de un pueblo herido, pero digno, virtuoso, honorable, valiente y firme, como su líder, como ella.

La estirpe de la grandeza

Este Nobel de la Paz es diferente porque está vinculado a un concepto filosófico y político que reúne la paz con la libertad. Paz sin libertad es esclavitud y María Corina, de la misma estirpe de la nobleza y grandeza de Bertha von Suttner, Ellen Johnson, Shirin Ebadi, Rigoberta Menchú o la Madre Teresa de Calcuta, no sólo exige paz, reclama libertad. La verdadera paz sólo florece cuando se exalta la dignidad del ser humano y de los pueblos. Ellas lo saben.

He escrito que la mejor María Corina no es la política ni la ejecutiva, es la madre. Y es ella, la tierna con firmeza, la protectora con exigencia, la pedagógica con nobleza la que ganó el Nobel: la madre.

Hoy María Corina entra en el linaje espiritual de las Juana de Arco de la civilización, su virtuosismo y firmeza reinventan la historia.

Virtud de acero y luz en la penumbra venezolana

Honestidad inquebrantable. Coherencia que no claudica ante la mentira, la extorsión o la traición. Fortaleza para resistir cuando todo se derrumba. Empatía con el oprimido y firmeza ante la injusticia. Todas esas virtudes parecen imposibles en los ambientes de un poder mafioso, corrupo y criminal, pero no, no lo son, María Corina las encarna y su equipo lo ensancha. Lo he dicho, lo repito, es uno de los espíritus más brillantes que jamás conocí. Su lucidez no conoce retirada en el firmamento oscuro de nuestro tiempo.

Mención aparte la valentía que emerge de su hondo espíritu, valentía que en tiempo de crueldad es joya fina en el armario de la desvencijada política venezolana: tan mediocre, tan criminal.

Gloria a la brava María Corina que el yugo de la mediocridad lanzó, la ley respetando, la virtud y el honor.

Paz con libertad: no es contradicción, es destino

Me gustaría abrazarla, me gustaría sostenerla entre brazos y agradecerle en voz baja, tenue, casi imperceptible, con la humildad agrietada de años de frustración y dolor, su entrega, su desempeño, su talento. Sin gritos ni sobresaltos expresarle mi respeto reverencial, como venezolano, como ciudadano, asegurarle que soy coro en la voz de sus ideales y postulados y que la acompaño en todas, buenas o malas, sin condición, acaso una: vencer.

Vencer a la tiranía, a la mentira, a la corrupción y a la traición, vencer para que la familia venezolana se vuelva a encontrar, para que ella pueda salir al sol y abrazar al mundo, que la admira.

Vencer para que el “Oh, my God!” del amanecer sea el de cada venezolano que regresa al país y obra para su reinvención.

María Corina brilla, no anda sola, es antorcha de la nueva Venezuela.

Gustavo Tovar-Arroyo

Enrique Krauze: Heroica María Corina

Posted on: octubre 14th, 2025 by Super Confirmado

La vida y pasión de María Corina Machado nos devuelve la fe en una virtud antigua y olvidada de la humanidad: la del heroísmo. Por si fuera poco, su triunfo moral no es solo de Venezuela. El otorgamiento del Premio Nobel de la Paz nos acerca a la posibilidad de una América Latina plenamente democrática y libre.

Parece una utopía. Puede no serlo. La vida de los pueblos no se mide en años sino en décadas, y a veces en siglos. A golpes de experiencia, muchas veces terribles, finalmente aprenden de sus errores.

Es el caso de los venezolanos. En 1998 entregaron todo el poder a un falso salvador que usó la democracia para acabar con ella. Su sucesor ha llevado al país a la peor implosión de la historia latinoamericana. Pero como el populismo no mata a los pueblos, sino que lentamente los asfixia, el efecto fue sintiéndose paulatinamente hasta convertirse en la toma nacional de conciencia que ha ocurrido en estos años.

Para que nuestra América construya esa nueva realidad democrática, Venezuela debe retornar a la democracia con la investidura de Edmundo González, su presidente legítimo, y el triunfo histórico de María Corina Machado, líder de esta gesta liberadora. El mecanismo parece estar en marcha. La autocracia criminal que oprime al país podría verse obligada a abandonar el poder debido a la presión interna y externa. Cuando suceda, el impacto asombrará al mundo. Venezuela, un país rico en petróleo, es aún más rica en la valentía y la resistencia de su gente, decidida ya a librarse de los capos. Millones de expatriados regresarán a su país para reconstruirlo. Las familias se reunificarán. Los venezolanos valoran como nunca antes el significado de la libertad.

Una América libre de dictaduras sería una vuelta al origen. Ese fue el verdadero sueño de Simón Bolívar. Y el de José Martí. Con variaciones, todos nuestros países se constituyeron desde su nacimiento con los elementos esenciales de cualquier república (separación de poderes, Estado de derecho, libertades civiles, libertad de prensa, elecciones regulares). Esos ideales persistieron siempre. Hubo casos más exitosos y duraderos (Chile, Uruguay, Colombia, Costa Rica y, durante largos períodos, Argentina) pero la fragilidad e inestabilidad de las repúblicas no se debieron a la renuncia de los ideales sino a la influencia adversa de tres factores: los caudillos, dictadores y militares que en el siglo XX adquirieron un perfil fascista; la revolución marxista que en Cuba instauró la primera dictadura que nunca se avergonzó de serlo y reverberó en las guerrillas de toda la región; y Estados Unidos que, traicionando a los liberales del continente, prefirió apoyar a los dictadores, porque eran “sus dictadores”.

En este siglo, Ecuador, Bolivia, Perú, Colombia y México contrajeron el virus populista, que es una mezcla maligna de los dos primeros factores. Pero ahora, las redes sociales han evidenciado la realidad de Venezuela (no se diga la de Cuba y Nicaragua) y el mal ha comenzado a revertirse en Ecuador, Perú y Bolivia. Este repliegue -importa señalar- no implica un desprestigio de la izquierda democrática que gobierna legítimamente (y quizá seguirá gobernando) en Brasil y Chile, dos países cuyos regímenes no tienen un carácter populista porque sigue rigiendo en ellos el Estado de derecho y hay libertades políticas. Y con todas sus estridencias, lo mismo cabe decir, en el extremo ideológico opuesto, de Argentina.

¿Ha cambiado el factor externo? A Trump no le preocupa la democracia en nuestros países. De hecho, la está desmantelando en el propio y no oculta sus simpatías por los autócratas del planeta. Por otro lado, la simbiosis del régimen de Maduro con el narco, sumada a su historial asesino, está llevando a Estados Unidos a incidir en la liberación del pueblo venezolano, cuya voluntad soberana se expresó en las urnas, inequívocamente, en contra de Maduro. Es deseable que esta presión derive en una transición pacífica que desemboque en la tan anhelada etapa de reconstrucción.

La libertad debe volver a Venezuela. Su ejemplo alentará el eventual cambio en Nicaragua y Cuba, e impedirá que los regímenes de izquierda y derecha que han exhibido proclividades autoritarias sigan pisoteando el Estado de derecho, la división de poderes, las libertades y la transparencia electoral.

No es una utopía. Es la modesta visión de una sociedad trabajadora, pacífica y decente. La misma que soñaron los fundadores de nuestras repúblicas. La misma que representa la heroica María Corina.

Artículo publicado en el diario Reforma de México

María Corina Machado dice que podrá recoger el Nobel en Oslo si Maduro deja el poder

Posted on: octubre 14th, 2025 by Super Confirmado

Fotografía de archivo de la líder opositora venezolana María Corina Machado, en Caracas (Venezuela). EFE/ Miguel Gutiérrez

(EFE).- La líder opositora de Venezuela María Corina Machado dijo este lunes que sólo podrá viajar en diciembre a Oslo (Noruega), a recoger el Premio Nobel de la Paz que le fue otorgado el viernes, si el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, deja de estar en el poder.

Según aseguró la opositora en una entrevista con el diario noruego ‘Dagens Naeringsliv’, recogida este lunes por la agencia de noticias de Noruega ‘NTB’, para que ella pueda viajar a la capital del país nórdico «Venezuela debe ser libre».

«Mientras Maduro esté en el poder, no puedo dejar el lugar donde me escondo porque hay amenazas directas contra mi vida», respondió Machado al periódico noruego.

«He aprendido a vivir el día a día, y el pueblo venezolano está haciendo todo lo que está en su mano» por su futuro, añadió la dirigente política.

Nobel de Paz

El viernes, María Corina Machado obtuvo el Premio Nobel de la Paz 2025 «por su incansable labor en la promoción de los derechos democráticos del pueblo venezolano y por su lucha por lograr una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia», según anunció el Comité Nobel noruego, con sede en Oslo.

Machado aseguró este domingo que haber recibido el galardón «tiene un impacto muy importante tanto en los venezolanos como en el propio régimen», que se «da cuenta», añadió, de que el «mundo entero legitima» la lucha opositora mientras Maduro «está absolutamente aislado y tiene los días contados».

Desde 2024, Machado reclama lo que insiste fue la victoria del líder opositor Edmundo González Urrutia, actualmente exiliado en España, en las presidenciales del 28 julio de ese año.

Según ella y la mayor coalición opositora, Plataforma Unitaria Democrática, González Urrutia fue el ganador de esta contienda, pese a que el ente electoral, controlado por rectores afines al chavismo, proclamó mandatario reelecto a Maduro.

Petro luego del atentado contra dos venezolanos: “Toda la ciudadanía venezolana que quiera asilarse en Colombia es bien recibida”

Posted on: octubre 14th, 2025 by Yira Yoyotte

El presidente de la República de Colombia, Gustavo Petro, escribió en su cuenta de la red social X (antes Twitter), que  toda la ciudadanía venezolana que quiera asilarse en Colombia, independiente de sus ideas es bien recibida, como se ha demostrado en estos años”.

 

 

El mensaje del mandatario llega luego que la Defensoría del Pueblo del país neogranadino publicara en sus redes sociales un mensaje  rechazando el atentado ocurrido este lunes en el norte de Bogotá contra dos ciudadanos venezolanos, entre ellos, Yendri Velásquez, defensor de derechos humanos, activista LGBTIQ+ y solicitante de refugio en Colombia.

 

 

Lejos de rechazar el hecho y pedir una investigación exhaustiva el mandatario colombiano escribió al “repostear” el tuit de la Defensoría del Pueblo de su país lo siguiente: “Nadie puede decir que el gobierno los ha molestado cuáles quiera sean sus ideas. Se han expresado libremente y así continuará. La UNP ampliará la protección de los activistas de derechos humanos de cualquier país del mundo en Colombia. Sabemos que buscan los violentos en este caso. Sabemos de la reunión en Cúcuta de las mafias coordinadas. A quienes quieran la paz se les dará la mano, los demás serán enfrentados con contundencia”.

 

 

 

 

 

 

 

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