OpenAI sorprendió al anunciar la mayor ronda de financiación de la historia. La gigante de la inteligencia artificial recaudó 6,6 mil millones de dólares y se convierte una de las startups más valiosas del momento con una valoración de 157 mil millones de dólares.
Aunque recientemente se ha visto envuelta en la polémica y ha enfrentado una crisis interna que generó la renuncia de la mayoría de sus fundadores y principales ejecutivos, sus notables avances en inteligencia artificial generativa la ubican como una de las empresas más prometedoras del momento.
La compañía ganó reconocimiento global tras lanzar a finales de 2022 ChatGPT, plataforma que actualmente es utilizada por más de 250 millones de personas en todo el mundo.
Tras anunciar la nueva ronda de financiamiento, OpenAI dijo que continuará avanzando en su misión de garantizar que la inteligencia artificial general beneficie a toda la humanidad. «Los nuevos fondos nos permitirán redoblar nuestro liderazgo en la investigación de inteligencia artificial de vanguardia, aumentar la capacidad de cómputo y seguir creando herramientas que ayuden a las personas a resolver problemas difíciles», dice en el comunicado.
¿Qué pasará con OpenAI?
La inteligencia artificial general es un polémico campo de investigación teórico en el que se alcanzará una capacidad de inteligencia similar a la humana, capaz de realizar tareas complejas incluyendo el autoaprendizaje, es decir, podría realizar tareas para las que no ha sido entrenada.
Sobre esto, la opinión de los líderes está dividida. Uno de los grandes detractores de la visión actual de OpenAI es Elon Musk, uno de los fundadores. Asimismo, otras personalidades destacadas enfatizan en la importancia de la sociedad en el desarrollo de la IA.
«La próxima gran misión de las empresas será establecer el lugar de la inteligencia artificial en la sociedad, sus funciones y responsabilidades. Aún no veo que OpenAI vaya en esa dirección», dijo recientemente en una entrevista con el medio Observer Matan Libis, vicepresidente de producto de SQream, una empresa de procesamiento avanzado de datos.
«Tenemos que tener claros sus límites y dónde puede ayudar de verdad. A menos que identifiquemos los límites de la Inteligencia Artificial, nos enfrentaremos a crecientes preocupaciones sobre su integración en la vida cotidiana», concluyó.
La nueva ronda de financiación de OpenAI fue liderada por el fondo inversor Thrive Capital, y también hicieron parte compañías como Microsoft, Nvidia, SoftBank, Khosla Ventures, Altimeter Capital, Fidelity y MGX.
Según el WSJ, Microsoft invirtió un poco menos de $1 mil millones, mientras que Nvidia puso 100 millones de dólares y SoftBank 500 millones de dólares Los inversionistas podrán recuperar el dinero si en un plazo de dos años OpenAI no completa su trancisión de organización sin ánimo de lucro hacia una empresa con ánimo de lucro.
«Nuestro objetivo es hacer que la inteligencia avanzada sea un recurso ampliamente accesible», enfatizó OpenAI.
Habrá que esperar cómo se reorganiza OpenAI luego de un año marcado por las renuncias supuestamente impulsadas por los planes de la empresa.
En los últimos días la directora de tecnología, Mira Murati; el vicepresidente de investigación, Barret Zoph; y el director de investigación, Bob McGrew, anunciaron su salida de OpenAI, mientras que en mayo salieron Ilya Sutskever, cofundador y científico jefe de la compañía, que renunció junto a su mano derecha, Jan Leike, cuando dirigían un equipo que buscaba la forma de mantener controlada y alineada una futura súper inteligencia artificial.
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