El dirigente de Acción Democrática Williams Dávila admitió que la judicialización del partido y la falta de atención a las bases golpeó a la tolda.
Tras cumplirse 82 años de la fundación de AD, Dávila reflexionó sobre el trabajo de la organización en las últimas dos décadas.
“La tarjeta blanca en las elecciones regionales en Mérida sacó 32 mil votos. Con los sufragios que sacó el otro grupo, habría sido más que suficiente para repetir en la Gobernación”, expresó en una entrevista ofrecida a Vladimir Villegas en Unión Radio.
Otro aspecto que resaltó Dávila fue la “necesidad de democratizar” internamente al partido.
“No es ir en contra de alguien, sino porque es necesario y la gente quiere eso”, reflexionó.
El exdiputado también aprovechó para recomendar a los jóvenes militantes leer sobre historia política, economía o literatura y no enfocarse solamente en la parte digital.
“En el momento en el que les toque dar un discurso, ese es el momento clave para impulsarse y si ese joven no está preparado para eso, pierde la oportunidad”.
Recordó que en el pasado, AD tenía una identidad definida desde el punto de vista ideológico que lograba captar a la juventud.
“Eso se ha perdido, y a eso hay que volver ¿Por qué somos adecos? ¿Por qué luchamos contra Maduro? ¿Por qué llegó un Robin Hood y se fue llevando las bases de los partidos? Porque la descuidamos, porque nos aburguesamos los dirigentes y nos olvidamos de Juan Bimba”, reflexionó.
Pese a ello, Dávila destacó que la organización sigue existiendo y que están preparados para buscar la victoria en la primaria con Carlos Prosperi.
UR