Pekín (EFE).- Con cocinas distintas pero filosofías muy cercanas a la hora se sentarse a la mesa, España y China conjugan sus gastronomías estos días en Pekín para celebrar, sea con palillos o con tenedor y cuchillo, los 50 años de las relaciones entre los dos países.
Productos y platos españoles emblemáticos como el aceite de oliva, el jamón y la costilla ibéricos o el ajo negro pasarán en la próxima semana por el tamiz de las técnicas culinarias del país asiático en platos creados al alimón por el cocinero español Rodrigo de la Calle y Dadong, uno de los chef chinos más aclamados y ambos laureados con estrellas Michelín.
Se trata de una iniciativa impulsada por la Embajada de España y organizada por Turespaña dentro del cincuentenario de los lazos diplomáticos entre España y China y también del Año Dual de la Cultura del Turismo.
El cocinero Rodrigo de la Calle (d, en la imagen) y Dadong, uno de los chef chinos más aclamados, juntan sus cocinas en Pekín. EFE/ Álvaro Alfaro
Picoteo de ida y vuelta
De la Calle, un enamorado de la cocina china que lleva casi una década viajando a Pekín, destacó a EFE las similitudes de los dos países a la hora de sentarse a la mesa, “la manera de comer”.
“Lo que en España llamamos el picoteo, que nos juntamos muchos y ponemos un montón de platos al centro para compartir, es la esencia de comer en China. Todo el mundo come con la comida al centro y todo es para compartir”, explicó.
Con lo que une a los dos países en mente, los dos cocineros han creado un menú de fusión y vanguardia que se ofrecerá durante varios días en los afamados restaurantes de Dadong en la capital y que consta de ocho platos y un maridaje de vinos de cuatro denominaciones de origen españolas.
Entre ellos, el “zongzi” de jamón ibérico -un pequeño cono de arroz típico de la fiesta del Barco-Dragón que se celebra ahora en China-, la costilla ibérica al estilo chino con pimiento del piquillo, el pato laqueado con caviar de aceituna o la ensalada de atún con sopa de tomate que evoca los veranos en Andalucía.
Paella con mucho marisco
Y por supuesto la paella de mariscos, que según De la Calle es “el icono de la gastronomía española en China” junto al jamón ibérico, “nuestra tarjeta de presentación en el mundo”.
“En España para nosotros es un plato que al final se ha quedado para el turismo, pero es el icono de cualquier persona en China, piensan en gastronomía española y piensan en una paella y además tiene que ser de marisco y les gusta que tenga mucho marisco por encima, más que arroz, al revés que en España, que nos gusta mucho que tenga arroz y pocos tropezones”, comentó.
Y es que aunque chinos y españoles entiendan el disfrute en la mesa de la misma forma, también difieren a veces en gustos.
Según el chef, adalid con su “Revolución Verde” de la reinvención de las verduras en la alta cocina, el “gran hándicap” de los cocineros españoles aquí es que “el paladar chino no es capaz de asimilar los puntos de sal de nuestra cocina”, que les parece demasiado salada a pesar de su gusto por bases potentes como las salsas fermentadas o la soja.
Tampoco son admiradores de la acidez de los cítricos a pesar de que en su cocina “pueden soportar el vinagre a unos niveles muy altos”, ni del azúcar excesivo en los postres, que De la Calle reduce en sus recetas a la mitad cuando las elabora en China.
En China no hay rollitos de primavera
No así Dadong, la otra mitad del tándem creador del menú, quien señaló a EFE que durante su carrera ha absorbido muchas ideas de la gastronomía occidental, “pero sobre todo de la cocina española” y de nombres míticos como el de Ferran Adriá.
El cocinero español Rodrigo de la Calle (7i, en la imagen) y Dadong (5i, en la imagen), mezclan cocinas en Pekín. EFE/ Álvaro Alfaro
“Usamos el jamón ibérico para cocinar platos chinos, por ejemplo en pequeños trozos para preparar pescados chinos y también usamos mucho el aceite de oliva español por su intenso sabor”, subrayó.
Ambos cocineros confiaron, además, en que iniciativas como esta acerquen mutuamente al público el recetario “real” de sus países, ya que, según De la Calle, “luchar contra el estigma de los restaurantes chinos en occidente es muy complicado”.
“Un chino cuando ve poner rollitos de primavera con salsa agridulce se echa las manos a la cabeza”, ríe el chef español sobre un plato que en realidad no existe en China, al igual que el célebre arroz tres delicias, que en el país asiático es un plato de la región de Sichuan “hecho con pepino, raíz de loto y judías verdes”.
EFE