El crédito bancario permanece estancado. En mayo, la cartera aumentó 24,4% para ubicarse en 2.574,8 millones de bolívares. Esta expansión es apenas superior a la reportada en abril, que fue de 23,4%, según el Informe Bancario de la consultora Aristimuño Herrera & Asociados.
En términos interanuales, el monto total de créditos subió 205,6% al cierre de mayo; sin embargo, este crecimiento no es suficiente para financiar a la producción local ni al consumo. Según datos recientes, alrededor de 57% de la industria se mueve con recursos propios en Venezuela, por solo citar un ejemplo.
Expresada en moneda estadounidense, la cartera de crédito superó los 500 millones de dólares en mayo. En concreto se ubicó en 508,4 millones de dólares al tipo de cambio oficial, con la contribución de la controlada depreciación del tipo de cambio.
Sin duda, este dato es una mejora de 48,87% en comparación con el portafolio de 341,5 millones de diciembre de 2021, pero nada que ver con los 123.797 millones de dólares a la tasa oficial del BCV de mayo de 2014.
Los préstamos totales de mayo de 2022, expresados en divisas estadounidenses, representan apenas una fracción de 0,41% de la cartera reportada en mayo de 2014. La devaluación hizo estragos en el crédito, pero actualmente acompañan otros factores como el excesivo encaje legal, que sigue afectando la liquidez del sector bancario.
– Intermediación –
El indicador de intermediación financiera del sistema se ubicó en 16,69% en mayo, un incremento de 1,89 puntos con respecto al mes anterior, pero una contracción de 1,16 enteros frente al marcador del mismo mes del año pasado. Otro dato que muestra estancamiento.
En términos teóricos, la Banca prestó casi 17 bolívares por cada 100 que recibió en depósitos, una proporción que sigue siendo la menor de América Latina y que se ubica muy lejos de los promedios históricos de entre 50% y 60% que manejaba el sistema bancario venezolano hace 15 o 20 años.
Este indicador evidencia que la oferta de crédito es limitada y, además, costosa, porque la cartera está indexada al tipo de cambio oficial, por lo que el argumento que justificó el incremento del encaje legal no aplica. Ya no es posible obtener préstamos baratos para acudir al mercado cambiario.
No solo existe una oferta limitada por baja liquidez, sino que los bancos, en un entorno de estabilización del tipo de cambio, tampoco tienen estímulo financiero para ampliar los montos de financiamiento. El margen Financiero Bruto de la banca ( Ingresos Financieros – Gastos Financieros), disminuyó -55,8% en los últimos doce meses, al pasar de Bs. 232.941 millones en mayo 2021 a Bs. 102.868,1 millones al mismo mes del año en curso.
Esta situación, es uno de los factores que explica que los ingresos por cartera de crédito apenas representen 13,1% de los ingresos totales del sistema al cierre de mayo.
– Indicadores de calidad –
El indicador de morosidad de la cartera de crédito fue de 1,33%. Este el porcentaje de los préstamos totales que se encuentra inmovilizado o en litigio.
La morosidad cayó 0,06 puntos en comparación con el mes anterior y se contrajo 0,97% en relación con el indicador de mayo de 2021; sin embargo, hay una marcada diferencia entre el comportamiento de los 10 principales bancos, que concentran 91,2% del total, y el resto del sistema.
Mientras las entidades que integran el Top 10 reportan una morosidad consolidada de 0,59%, el resto del mercado muestra un marcador de 9,06%, muy por encima del resto del sistema.
La provisión del sistema para cubrir la mora, por otra parte, se ubicó en 355,83%, pero este indicador en los 10 primeros bancos por tamaño de la cartera de crédito asciende a 704,52%, lo que supone un nivel de calidad de cartera elevado que configura un riesgo muy bajo.
2001