La famosa cachetada que le dio el actor Will Smith al humorista Chris Rock en plena entrega de los Premios Oscar es sin duda una de las imágenes del año. Desde ese momento, el tema se transformó en noticia global y las derivaciones del caso continuaron semana tras semana. A partir de la famosa cachetada, así como la carrera de Smith entró en modo debacle, el show Ego Death de Rock empezó a agotar entradas.
La gira global de su espectáculo tuvo que agregar fechas gracias al aumento de la demanda y, según informó hace unas semanas The Mirror, eso le daría al comediante una ganancia de 2,5 millones de dólares.
En una de las funciones, hizo una broma al respecto: “Estoy bien, tengo un espectáculo completo y hablaré de esto si me pagan. La vida es bonita. He recuperado mi audición”.
Su espectáculo de stand up recaló hace unos días en Londres, como parte de un tour que realiza por Europa. De acuerdo con el diario Times, durante el espectáculo que presentó nada menos que en el Royal Albert Hall, no avanzó demasiado en relación con la cachetada, manteniéndose fiel a la promesa que hizo en su momento de que hablaría del asunto “en Netflix y cuando viese un gran cheque con su nombre en él”.
Midiendo sus movimientos, Chris Rock inició su actuación haciendo alusión al estado de sus oídos. “Si alguien me lo pregunta, ya he recuperado la audición”, en clara referencia al golpe que Smith le dio en una oreja. “Los que dicen que las palabras pueden hacer daño nunca han recibido un golpe en la cara”, completó de manera tan “gráfica” como sutil.
Durante el show en el Albert Hall, el cómico, que se caracteriza por hacer bromas sexistas e incluir en su repertorio chistes políticamente incorrectos, hizo alusiones al supuesto racismo de la casa real, un tema que se instaló con fuerza desde la famosa entrevista de Oprah Winfrey con Meghan Markle: “Me parece bien que quisieran saber cómo de oscuro iba a ser el bebé que iba a tener con Harry. Esa información también interesa a muchos negros”.
Luego se despachó a gusto contra el primer ministro británico, Boris Johnson, quien en pleno confinamiento por el covid asistió a una fiesta en el jardín de su despacho, en mayo de 2020. “Me hubiese encantado ir de fiesta con él durante el confinamiento. Eso sí, yo no le dejaría dirigir ni un McDonald’s”, apuntó en el tono irónico que lo caracteriza.
Por último, también se metió con el mediático juicio entre Johnny Depp y Amber Heard, que se reanudó hoy, recordando un hecho escatológico que trascendió a partir del proceso entre los actores. En abril de este año, el famoso actor de Hollywood aseguró que su exmujer había dejado “materia fecal humana” en su lado de la cama luego de una discusión entre ambos.
A partir de esa historia, Rock habló de las “nuevas reglas” en las relaciones, pero fue terminante contra la protagonista de Aquaman. “Créanle a todas las mujeres, créanle a todas, menos a Amber Heard. ¿En qué mierda anda ella? ¡Cagó en la cama de él!”, disparó indignado.
El mes próximo, la gira del comediante volverá a Estados Unidos. El 17 de noviembre recalará en Los Ángeles, en donde ya tiene previstas tres funciones. Será, justamente, en el Dolby Theatre, el mismo escenario de la famosa cachetada. Seguramente, como sucedió en Londres, las entradas estarán agotadas.
Fuente: Globovision