Stephen Curry vuelve a tener otra noche espectacular, especialmente en el último cuarto que anotó la mitad de sus puntos para darle la victoria a domicilio a los Golden State Warriors 89-104 ante los Cleveland Cavaliers.
Curry acabó el partido como el máximo anotador con 40 puntos, 4 rebotes, 6 asistencias y 2 robos de balón. Su compañero Draymond Green consiguió 14 rebotes, los mismos que el pívot de Cleveland, Ed Davis.
En los Cavs, el escolta Darius Garland fue el máximo anotador con 25 puntos mientras que el base del equipo, el español Ricky Rubio sumó 10 puntos, 5 asistencias y 2 robos de balón.
Antes del inicio del partido, Rubio recibió un premio de la NBA en «reconocimiento de sus continuos esfuerzos para mejorar la vidas de niños y familias, particularmente aquellos impactados por el cáncer». Es la quinta vez que la NBA entrega el premio a un jugador por su labor desde el fin de la temporada regular al inicio de la siguiente temporada.
La NBA reconoce de esta forma la labor en España y Estados Unidos de la Fundación Ricky Rubio para mejorar la experiencia hospitalaria de los pacientes de cáncer y sus familias. La madre de Rubio fue diagnosticada con cáncer de pulmón en 2012 y murió a causa de la enfermedad en 2016.
Rubio señaló a través de un comunicado que estaba honrado por recibir el premio y añadió que «hay muchos jugadores de la NBA que están trabajando en sus comunidades y soy afortunado de haber sido elegido».
VENTAJA PARA LOS WARRIORS
Los Warriors lo tenían todo a su favor. Llegaban a Cleveland como líderes de la Conferencia Oeste, con 12 victorias y sólo dos derrotas. Mientras, los Cavaliers eran los sextos de la Conferencia Este con nueve victorias y siete derrotas.
El equipo de San Francisco también había ganado los últimos ocho partidos de temporada regular contra los de Cleveland: desde diciembre de 2016 los Cavs no ganan a los Warriors.
Pero además, los Cavs sufrieron la baja de seis jugadores habituales en la alineación, entre ellos Collin Sexton, Evan Mobley, Jarrett Allen y Lauri Markkanen.
A pesar de las bajas, los Cavs plantearon desde el principio graves problemas para los de Curry. En los tres primeros minutos del partido, los Warriors fueron incapaces de anotar un solo punto, lo que permitió a los locales adelantarse 10-0 en el marcador.
Fue Curry el que inauguró el marcador para los Warriors con un triple. Los Cavs, con Rubio ordenando el juego, Darius Garland ejecutando las canastas y Ed Davis dominando bajo los aros, mantuvieron la presión lo que permitió aumentar la ventaja a 13 puntos, 22-9.
Pero con las rotaciones, los de Cleveland perdieron la concentración y los Warriors no perdonaron: castigaron a los locales con un parcial de 2-15 que empató el partido a 24-24 a falta de 1.15 minutos para el final del primer cuarto.
Una canasta de Rubio y una asistencia del español a Kevin Love, que anotó un triple, permitieron a los de Cleveland acabar los primeros puntos por delante, 29-27.
En el segundo cuarto, la dinámica fue similar, con ninguno de los dos equipos capaces de poner tierra por medio en el marcador. Los Warriors empezaron el segundo cuarto más entonados y consiguieron acumular una ventaja de cuatro puntos, 31-35.
Pero los Cavs reaccionaron y volvieron a tomar la delantera gracias a la actuación del veterano Davis que reboteaba y anotaba desde todas las posiciones.
CURRY DEJA SIN OPORTUNIDADES A LOS CAVS
Cuando llegó el descanso, los Cavs estaban tres puntos por delante, 54-51, con Garland como máximo anotador del partido con 18 puntos mientras que Davis era el máximo reboteador con 13.
Curry contaba con 15 puntos de los que 12 fueron fruto de cuatro triples de siete intentos mientras que su compañero Nemanja Bjelica contabilizaba 14 puntos. Por su parte Rubio sumaba cinco puntos y 3 asistencias.
A la vuelta del descanso, los Cavs apretaron el acelerador con un Love entonado y un mayor acierto anotador de Rubio. Love encestó en el tercer cuarto dos de tres triples intentados y totalizó 11 puntos. Por su parte Rubio hizo cinco puntos, con un triple y un tiro de dos.
Los de Cleveland anotaron un total de 27 puntos en el tercer cuarto, 10 puntos más que los Warriors, donde Curry sólo pudo anotar 5 puntos y Andrew Wiggins 6.
Con un 81-68 en el marcador para los Cavs se inició el último cuarto. Pero los 13 puntos de ventaja de los locales se disiparon rápidamente.
En menos de cuatro minutos, tres triples consecutivos de Curry y dos canastas de Damion Lee colocaron un empate, 81-81, en el marcador. La presión defensiva de los Warriors, una de las mejores de la NBA, vació a los Cavs que sólo pudieron anotar sus dos primeros puntos del último cuarto cuando quedaban 6.30 minutos para el final del partido.
Para entonces ya era tarde. Curry, que «sólo» había anotado 20 puntos en los tres primeros cuartos, soltó la muñeca y acabó con todas las esperanzas de los Cavs. El base de los Warriors anotó otros 20 puntos en el cuarto periodo.
Mientras, los de Cleveland se hundieron: el equipo de Ohio sólo hizo ocho puntos en los últimos 12 minutos del partido, lo que sentenció el marcador final a un 89-104.
Fuente: Meridiano
