La defensa de Freddy Guevara, diputado venezolano del Parlamento electo en 2015, insistió este jueves en que el opositor venezolano es víctima de una “detención arbitraria” y que los señalamientos en su contra “no tienen ningún tipo de asidero jurídico”.

Guevara fue detenido el pasado 12 de julio y señalado de terrorismo, asociación para delinquir y traición a la patria. El Gobierno acusa a Guevara y a otros miembros del partido Voluntad Popular de estar relacionados con grupos criminales y de planificar acciones contra la capital venezolana.

Omar Mora Tosta, abogado de Guevara, explicó en rueda de prensa que los señalamientos contra el dirigente opositor «se basan inicialmente» en una conversación registrada en un teléfono sin clave encontrado en un terreno baldío durante un operativo policial en la zona de La Vega, centro de recientes entrenamientos entre bandas criminales y cuerpos de seguridad al oeste de Caracas.

En la conversación se mencionan nombres como Gilber, Freddy y Emilio. De acuerdo al defensor, se habría establecido “a priori sin ningún tipo razón” que esas personas serían los diputados Freddy Guevara, Gilber Caro y el dirigente Emilio Graterón.

“En el Consejo Nacional Electoral -nada más- existen 57.041 Freddy, ¿cómo es posible que, si esto es así, ellos lleguen a esa conclusión sin haber investigado?”, indicó Mora Tosta.

El abogado ratificó que hasta el momento “no se le permite al diputado Guevara tener acceso a su equipo de defensa para preparar precisamente los argumentos de defensa que echen por tierra estas imputaciones absolutamente inverosímiles”.

Además, Mora Tosta expresó preocupación por el estado de salud de Guevara pues, según explicó, habría sufrido de COVID-19 y tiene una condición previa de arritmia cardiaca por la cual fue operado unos años atrás.

“Nos han dicho que le han hecho exámenes, cuyos resultados no nos han dado. Se nos ha dicho que nos van a entregar los resultados para tratar de conversar con los médicos que lo ven a él habitualmente, pero nada de eso se ha producido, ni tampoco han autorizado el traslado a su médico de confianza”, expuso.

Luego de los señalamientos por parte del Gobierno de Nicolás Maduro, el dirigente de Voluntad Popular, Emilio Graterón, fue recibido en la residencia de la Embajada de Chile en Venezuela en calidad de huésped. La cancillería venezolana aseguró en su momento que, con esta acción, el gobierno chile “se hace cómplice de las acciones violentas contra el pueblo venezolano”.

VOZ DE AMERICA

En los calabozos del Destacamento 121 de la Guardia Nacional Bolivariana de Barquisimeto, estado Lara, se suicidó el militar retirado Yesin Antonio Linarez, acusado de torturar al joven Hermis José Rivero Álvarez, hecho que quedó registrado en un video grabado con apoyo de la pareja del victimario.

La información la publicó la periodista local Karina Peraza, especializada en la fuente de sucesos, a través de su cuenta en Twitter. Señaló que aproximadamente a las 8:00 pm del jueves oficiales consiguieron sin vida a Linarez.

El detenido, de acuerdo con la versión de las autoridades, se ahorcó con una sábana en la celda donde estaba recluido.

“Se encontraba suspendido de una sábana atada a los barrotes del techo y al cuello”, dice la minuta militar.

A Linarez le imputaron los delitos de tortura, privación ilegítima de libertad, uso de niño para delinquir, apología al delito y agavillamiento. Estaba a la orden de la Fiscalía del Ministerio Público desde el 28 de julio.

Tarek William Saab, fiscal general del régimen de Nicolás Maduro, informó el miércoles la detención de Linarez y de su cómplice Luz Celeste Almao Carrera por privar de libertad al joven. El funcionario dijo que los detenidos torturaron a la víctima hasta casi ocasionarle la muerte por asfixia con una bolsa plástica.

Rivero Álvarez denunció el hecho formalmente ante el Ministerio Público de Lara. Narró que Linarez lo culpaba de robarle un reproductor de radio y otros artículos.

“Él me dice: ‘Tú eres un maldito ladrón, tú has ido preso’. Y la señora todavía estaba grabando. Yo le dije: ‘Le voy a hablar claro, con mi verdad, yo sí fui mala conducta, pero en mis viejos tiempos’. No entiendo por qué me están culpando de una cosa que yo no hice”, dijo Rivero a la prensa.

EL NACIONAL