(Bloomberg) — Cuatro petroleros cuyos cargamentos fueron incautados por Estados Unidos en el último mes se dirigían a Venezuela con gasolina cargada en Irán, según el ministro de Petróleo iraní, Biyán Namdar Zangané.
Sus comentarios son el primer reconocimiento de Teherán de que los barcos transportaban cargamentos desde la República Islámica cuando EE.UU. los confiscó. El presidente de Irán, Hasán Rohaní dijo el sábado que era una “mentira” que los petroleros fueran iraníes, aunque no comentó lo que contenían.
James Malloy, comandante de la Quinta Flota de EE.UU. con base en Bahréin, señaló el lunes que Washington utilizó embarcaciones contratadas para incautar el combustible iraní y transferirlo a otros barcos. Dos de los traslados tuvieron lugar en el golfo de Omán y los otros dos ocurrieron frente a la costa de Mozambique, indicó en una teleconferencia de prensa.
La incautación fue una medida sin precedentes de Washington, que afirmó que los barcos contenían 1,1 millones de barriles de gasolina y que podría desestabilizar los mercados mundiales de petróleo si Irán toma represalias. La Marina de EE.UU. está en contacto con la industria naviera comercial en medio de las amenazas iraníes observadas, dijo Malloy.
Irán tiene los medios para interrumpir el paso de petroleros internacionales que transitan por el estrecho de Ormuz, el cuello de botella más importante del mundo para los embarques de petróleo. Sin embargo, es probable que el impacto que podría tener una interferencia de ese tipo en los precios del petróleo sea limitado, dado que las medidas de confinamiento provocadas por la pandemia han afectado la demanda de energía.
“El combustible se cargó en Irán, pero ni los barcos ni los cargamentos pertenecían a Irán, y EE.UU. declaró la victoria en medio de esto”, dijo Zangané el lunes en una rueda de prensa realizada en Teherán. “El combustible era iraní, pero se había vendido a Venezuela y su pago ya se había realizado”.
Malloy trazó una clara distinción entre lo que describió como incautaciones no militares ordenadas por EE.UU. y el abordaje forzoso por parte de Irán de un petrolero más pequeño, el Wila, de bandera liberiana, el 12 de agosto en el golfo de Omán.
Molloy dijo que personal iraní golpeó a miembros de la tripulación del Wila y robó equipos. “No sabemos cuándo Irán podría lanzar una provocación, si van a hacer lo que hicieron la semana pasada, donde manifestaron su enojo apoderándose de un barco”.
Problemas de Venezuela
Si bien Irán intercepta regularmente los barcos que alega han ingresado a sus aguas o están contrabandeando combustible, el abordaje de la semana pasada evocó recuerdos de una serie de ataques a buques en 2019, donde incluso Gran Bretaña e Irán realizaron varias incautaciones de represalia.
Dos de los cuatro barcos con destino a Venezuela están registrados en la misma dirección que el Wila, en El Pireo, Grecia, según una base de datos de las Naciones Unidas. Los cuatro son administrados por el propietario del Wila o sus filiales, según la compañía de inteligencia marítima Lloyd’s List.
Irán ha estado exportando gasolina a Venezuela desafiando las sanciones de EE.UU. que pretenden obstaculizar los ingresos petroleros de ambas naciones. Venezuela tiene las mayores reservas de crudo del mundo, pero en los últimos años la producción se ha desplomado y sus refinerías han quedado en mal estado debido a la mala gestión del Gobierno del presidente Nicolás Maduro y las sanciones estadounidenses.
El Departamento de Justicia de EE.UU. dijo que los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC, por sus siglas en inglés), que EE.UU. califica como organización terrorista, estuvieron detrás de los envíos.
Nota Original:Tehran Says Ships Targeted by U.S. Were Holding Iranian Fuel (2)
©2020 Bloomberg L.P.
