El presidente de Consecomercio, Felipe Capozzolo, precisó que la población venezolana a estas altura de la pandemia por el coronavirus, se debate entre mantener la cuarentena o salir a la calle en busca de la alimentación de su familia.
El representante del sector comercial significó que la cuarentena se ha extendido, por lo que se deberían apostar a otras estrategias que permitan reactivar la economía y por esos ellos están trabajando en que se vuelva al trabajo, pero de manera segura y paulatinamente.
«La situación que estamos viviendo, es un gran dilema e impone una encrucijada muy difícil de resolver, por un lado tenemos que mantenernos en casa para poder contribuir a romper la cadena de contagios del virus, pero por el otro lado estamos prácticamente sin recursos, las empresas sin flujo de caja, sin ningún tipo de herramienta posible, para afrontar la realidad, porque la realidad es que los costos, los gastos avanzan y muchas empresas han sido consecuentes con sus trabajadores, pagando nóminas, pagando bonificaciones, pagando todas las obligaciones, también para cuidar a estos trabajadores y ya la gente se debate en salir a procurarse el pan o forzar la barra para poder subsistir».
Así lo afirmó en una entrevista concedida al programa Primera Página que se transmite por Globovisión en la que resaltó que algunos empresarios que venden a puertas cerradas, vía encargo, están siendo afectados por los funcionarios del Estado que pretenden impedir esta acción y que se hace necesaria ante la falta de liquidez de muchos empresarios.
Aseguró que la mortalidad del comercio solo se conocerá al final de la cuarentena, cuando puedan evaluar «cuántas santamarías abrieron y cuantas no», pero admitió que en este momento las condiciones para cerrar los negocios están dadas, debido a que los costos para no continuar son bastantes bajos, por lo que será difícil que las empresas al final de la cuarentena abran nuevamente, aunque no se desestimó la voluntad del pueblo luchador, que siguen pensando en que Venezuela es el país por el que hay que luchar.
Capozzolo propone que para que se le haga más fácil a los comerciantes retomar la actividad, se debe rebajar el encaje legal, para que las empresas tengan capital de trabajo para poder enfrentar los gastos y costos de la nómina y capital de trabajo para producir y cumplir con las obligaciones.
Reiteró que en estos momentos no debe predominar la diatriba o la confrontación, lo más útil sería la colaboración que pueda existir entre el sector público y el sector privado y todas las instancias nacionales para buscar soluciones con respecto a la economía.
Con respecto al control de precios, destacó que cualquier medida de esta índole es la vía rápida para que los productos desaparezcan y esto mencionó no es un secreto para nadie. «Desde que comienza la crisis la empresa venezolana desde la agricultura, la industria, el comercio, estabamos todos acoplados con una idea bien clara, en este momento de tanta dificultad para el pueblo venezolano, tiene que saber que estamos allí a su lado, hasta el sol de hoy, hemos procurado los productos y los recursos necesarios para que la oferta esté allí, disponible para todos los venezolanos».
Por ello, cuestionó el marco de control de precios, que a su juicio es un despropósito en contra de la empresa privada que se mantiene trabajando.
NAD
