El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, afirmó este miércoles que su país prevé reabrir su Embajada en Venezuela «cuando las condiciones sean adecuadas».

Pompeo adelantó en una teleconferencia que la semana pasada encargó a su equipo de preparar los planes para reestablecer la presencia diplomática en Venezuela para asegurarse de que «cuando llegue el día de de una transición» en el país suramericano, los venezolanos «sepan que que los estadounidenses estamos con ellos».

«Queremos volver a nuestra embajada (…) solo podremos hacerlo cuando las condiciones sean adecuadas», aseveró.

Hace un mes, Pompeo aseguró que su Gobierno planteaba la conformación de un Consejo de Estado o Gobierno de transición, donde no participarían ni Maduro ni Guaidó, que gobernaría hasta las elecciones legislativas que estaban previstas para finales de año.

El secretario de Estado ha ratificado la voluntad de Washington de seguir incrementando la presión contra la Administración de Maduro, a través de medidas coercitivas unilaterales y ha expresado, junto al presidente colombiano, Iván Duque, que trabajan juntos «para mejorar las condiciones de los venezolanos», supuestamente «obligados a huir» del Gobierno de Maduro. Estas últimas declaraciones han sido tildadas por Caracas como una «táctica de distracción», en medio de la crisis humanitaria por coronavirus en EE.UU.

El pasado 24 de enero, EE.UU. ordenó a parte de su personal diplomático salir de Venezuela por razones de seguridad. La decisión se produjo un día después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunciara la ruptura de relaciones diplomáticas y políticas con Washington y ordenara la salida del personal de la Embajada estadounidense tras la autoproclamación del diputado opositor Juan Guaidó como «presidente encargado» del país sudamericano, quien fue inmediatamente reconocido por Washington.

El 12 de marzo, Pompeo, pidió retirar a los diplomáticos que aún se encontraban en el país suramericano.

AFP

 Más de 10 protestas se han registrado en siete municipios del estado Monagas en la última semana, informó José Antonio Mendoza, diputado a la Asamblea Nacional. 

Indicó que las principales causas de estas protestas han sido la falta de combustible y de alimentos en la entidad. 

Las primeras manifestaciones, continuó, se originaron en el municipio Sotillo, donde hubo intento de saqueo de un galpón de alimentos de las cajas CLAP. 

En la zona también comenzaron las protestas por la falta de combustible, que se extendieron hacia Temblador, municipio Libertador; Punta de Mata, municipio Ezequiel Zamora; San Antonio, del municipio Acosta; y en el municipio Caripe, donde este miércoles los ciudadanos trancaron las calles por segundo día consecutivo. 

Mendoza señaló que el centro de Maturín y en La Toscana, del municipio Piar, de produjeron conatos de saqueos en los últimos días. 

«La crisis de combustible que ha generado el régimen se va a traducir en más hambruna para los venezolanos», manifestó el legislador. 

Resaltó que esta situación impedirá que los productores agropecuarios continúen produciendo los alimentos que requiere el país, lo que traerá como consecuencia desabastecimiento, escasez y «más hambre para los venezolanos». 

«Una burla»

El también secretario general de Primero Justicia Monagas calificó como una burla para los venezolanos el aumento del salario anunciado por el régimen de Nicolás Maduro. 

Resaltó que el incremento a 800.000 bolívares de ingreso integral representa menos de cinco dólares, con una tasa de cambio en el mercado paralelo de 176.038,96 bolívares. 

«No alcanza ni para un cartón de huevos que cuesta 850.000 bolívares en un mercado de Venezuela», subrayó. 

Para esta semana, mencionó, la harina de maíz se ubicó 185.000 bolívares; el arroz en 197.000 bolívares; la azucar en 185.000 bolívares; el café en 700.000 bolívares; y el aceite en 630.000 bolívares. 

Igualmente, el kilo de queso blanco incrementó a 680.000 bolívares y el kilo de carne de res a 840.000 bolívares. 

En total, indicó, para adquirir los ochos productos de la cesta básica alimentaria se requiere de 4.277.000 bolívares, lo que equivale a 8,4% más de la semana pasada, cuando se ubicaban en 3.080.000 bolívares. 

Rechazo

Mendoza rechazó la fiscalización y controles de precios adoptados por el régimen en medio de la cuarentena por el covid-19. 

A su juicio, con estas medidas, que «profundizan la crisis», lo que pretende es «ponerle la mano al inventario de productos». 

«Con controles y fiscalizaciones solo generan escasez y desabastecimiento que afecta al pueblo», señaló. 

El parlamentario insistió que para evitar una catástrofe al pueblo, debe instalarse un Gobierno de Emergencia Nacional, como propuso el presiente interino Juan Guaidó. 

«Urge su instalación para darle soluciones a la crisis del país», enfatizó.

Prensa AN

 
 El diputado por el circuito 2 del Oriente de Carabobo (Guacara, San Joaquín y Diego Ibarra), Armando López aseguró que el verdadero drama de los venezolanos durante este período de pandemia mundial y de confinamiento social es la escasez de gasolina.

“En un país productor de petróleo, con las mayores reservas petroleras del mundo, que los venezolanos sufran haciendo colas de varios días, pernoctando día y noche, para echar 20 litros de combustible por vehículo es una falta de respeto”.

La solución la tenemos –dijo el diputado de Un Nuevo Tiempo- en la conformación de un Gobierno de Emergencia Nacional, que se encargue de producir la gasolina necesaria para cubrir la demanda nacional y que sobre para poder exportar diversos productos derivados del petróleo.

Hay personas que tienen más de 10 días en la única estación de servicio de San Joaquín para surtir combustible. Este miércoles 29 de abril hay más de 600 carros varados a pesar de no tener una fecha que les asegura que podrán echar gasolina, según la señora Gloria Tovar, quien se encuentra en la E/S Tropical.

Escasez de alimentos

Por otra parte, el diputado a la Asamblea Nacional destacó que otro de los grandes dramas del venezolano en medio de la pandemia del coronavirus es la escasez de alimentos y la hiperinflación.

Venezuela es un país devastado – señaló- por una economía rentista, en el que la corrupción se apoderó de muchos medios de producción y de empresas privadas que las llevó a la quiebra.

“El venezolano en medio de la pandemia debe salir de sus hogares a tratar de sobrevivir, más del 80% de la población no tiene un empleo fijo, sino que trabajan el día a día, que les alcanza para comer”.

“Actualmente la hiperinflación se apoderó de los precios de los productos y ha mermado el poder adquisitivo del venezolano”.

Sin embargo, destacó que bajo los lineamientos del presidente Juan Guaidó, hay un Plan País, para restablecer la economía y enrumbar a la nación por las sendas de una economía productiva, “con el esfuerzo de todos lo vamos a lograr”.

Finalmente, el parlamentario Armando López enfatizó en la necesidad de no perder la calma y la fe, “que pronto se recuperara la Venezuela que todos queremos”.

Comunicaciones UNT Carabobo