El aceite de Argán es un producto cosmético y comestible procedente del extracto de las semillas de árbol de Argán, originario de Marruecos.

 

 

Desde hace cientos de años, las personas de la zona en la que se cultiva este aceite lo han utilizado para diferentes fines relacionados con el cuidado del cabello y la piel. De hecho, hoy en día la industria cosmética utiliza este aceite como ingrediente de sus productos.

 

 

Antes de nada, es necesario aclarar que cuando nos referimos al aceite de Argán para fines cosméticos o al comestible no hablamos del mismo producto. Mientras que el cosmético se obtiene a través del prensado en frío de la semilla cruda, el aceite para usos culinarios se obtiene al tostar las almendras de Argán. De esta forma, el color y sabor de este último son mucho más fuertes.

 

 

A continuación, procedemos a examinar este producto, sus propiedades y usos:

 

 

Aceite de Argán cosmético 

 

El aceite de Argán presenta numerosos usos cosméticos con múltiples beneficios para la piel y el cabello. Destacamos las siguientes:

 

 

1. Cabello. Una de las propiedades cosméticas más conocidas de este producto es su poder hidratante, protector y regenerador del cabello:

 

 

Da brillo y flexibilidad a la melena. Extiende unas gotas de producto de medios a puntos y deja reposar antes de lavar el cabello. No te excedas con la cantidad de producto, debido a que tu pelo podría engrasarse con mayor rapidez.

 

Hidrata y repara las puntas secas y abiertas. Aplica unas gotas de aceite de Argán sobre las yemas de los dedos y aplica en las puntas. Deja actuar durante media hora y procede a lavar el pelo. Puedes repetir este proceso una vez a la semana.

 

También puedes utilizarlo para eliminar la caspa. Aplica un poco de producto sobre el cuero cabelludo y deja actuar media hora antes de lavarlo.

 

 

2. Piel. Este aceite contiene altos niveles de vitamina E y ácidos grasos esenciales Omega 3, lo que lo convierten en un producto especialmente indicado para el cuidado de la piel.

 

 

Hidrata y nutre en profundidad. Puede emplearse este aceite en todo tipo de pieles para hidratarlas.

 

Efecto calmante. También podemos utilizarlo para calmar nuestra piel de posibles irritaciones o quemaduras solares.

 

Suaviza e hidrata las pieles secas o zonas más ásperas de la piel como los codos o los pies secos y agrietados.

 

Reduce los niveles de sebo en las personas con piel grasa. También reduce la inflamación del acné.

 

Mejora la elasticidad de la piel ayudando eficazmente a prevenir la formación de estrías o difuminarlas en caso de tenerlas.
Una o dos gotas de aceite en los labios por la noche te ayudarán a mantenerlos suaves, lisos e hidratados.

 

 

Alivia y previene el enquistamiento de vellos tras la depilación. También se utiliza para eliminar los restos de cera que hayan podido quedar adheridos a la piel después del depilado.

 

 

Exfoliante facial. Puedes emplear aceite de Argán para preparar tu propio exfoliante facial con efecto anti-envejecimiento. Tan sólo necesitas aceite de Argán y azúcar moreno. Mezcla ambos productos y aplica en la cara con movimientos circulares, retira con agua tibia y seca con ayuda de una toalla pequeña. Realizar este proceso con regularidad en torno a una vez por semana te ayudará a eliminar las células muertas y reducir las arrugas o signos de expresión.

 

3. Uñas. Aplica un par de gotas de producto en las uñas para fortalecerlas.

 

 

Aceite de argán en la cocina

 

El aceite de Argán es rico en ácidos grasos esenciales lo que le confiere propiedades saludables si lo incorporamos a nuestra dieta. Entre sus beneficios para la salud, destacan:

 

 

Esta indicado en dietas para la prevención de enfermedades cardiovasculares o tratamientos para reducir la hipertensión arterial debido a su alto contenido en ácidos grasos Omega 3.

 

Ayuda a reducir el colesterol malo.

 

Mejora el proceso digestivo.

 

Antioxidante.

 

Se confiere a este producto propiedades anticancerígenas.

 

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Todos en alguna ocasión nos hemos preguntado a qué edad es recomendable empezar a utilizar cremas antiarrugas. Sin embargo, no sólo influye la edad, sino que dependiendo del tipo de piel que tengamos debemos cuidarla de una forma u otra.

 

 

A continuación, te explicamos cuándo empezar a utilizar cremas antiarrugas, cuáles son más efectivas en cada caso y otros consejos para una piel tersa y suave.

 

¿Cuándo comenzar a usarlas?

 

El cuidado de la piel es una carrera de fondo. Los efectos de los productos que estamos utilizando ahora mismo comienzan a notarse a largo plazo. Así, la piel de los 40 es aquella que hemos cuidado a los 30.

 

 

Hay que empezar a cuidar la piel en la adolescencia. ¿Cómo? Con una limpieza diaria, una crema hidratante adecuada según nuestro tipo de piel y protección solar.

 

 

Los expertos recomiendan utilizar cremas antiedad a partir de los 30 años aproximadamente, aunque depende del tipo de piel. Si tienes una piel seca, probablemente debas comenzar a utilizar este tipo de cremas en torno a los 25 años. La piel seca favorece una aparición más temprana de las arrugas y primeros signos de la edad. Si, por el contrario, tu piel es grasa, tardarán más tiempo en aparecer.

 

 

¿Debo cambiar de crema antiarrugas con la edad?

 

En líneas generales, estos son los cuidados de la piel recomendados para cada edad:

 

 

25 años: A partir de los 25 años hay que empezar a realizar más hincapié en el cuidado de la piel. No con cremas antiarrugas, pero si con algunas preventivas. Es importante que se trate de productos hidratantes y nutritivos ricos en antioxidantes.

 

A partir de los 30: Como ya hemos comentado anteriormente, los 30 es la edad recomendada para comenzar a utilizar las primeras cremas antiarrugas destinadas a combatir las primeras líneas de expresión. Recuerda que el cuidado de la piel es un proceso progresivo con efectos a largo plazo. Hay diferentes tipos de cremas antiarrugas: para pieles grasas, secas… Debes elegir aquella que se adapte más a tu tipo de piel. Es importante que estas primeras cremas anti-edad sean ricas en Omega 6 y vitaminas C y E, además de anti radicales libres. De esta forma, conseguiremos luchar contra la pérdida progresiva de colágeno que se produce con el paso de los años.

 

45 años: En torno a los 45 la piel comienza a perder más firmeza y los tejidos fabrican cada vez menos colágeno. Por eso, se recomienda utilizar cremas que eviten la pérdida de firmeza.

 

 

Mayores de 55 años: La menopausia produce cambios hormonales que inciden en el aspecto de la piel. Así, esta se vuelve más seca propiciando la aparición de más arrugas. A partir de los 55, las cremas antiedad deben ser más nutritivas y propiciar una mayor regeneración celular para recuperar la elasticidad.

 

Los hombres tienden a tener una piel más gruesa que las mujeres y con más colágeno, por lo que las primeras arrugas aparecen más tarde. Así, se recomienda esperar hasta los 30 para comenzar con tratamientos contra las líneas de expresión y contorno de ojos.

 

 

No noto los efectos de las cremas antiedad

 

No existen los productos milagrosos y en el ámbito de la cosmética tampoco. Los efectos de las cremas son visibles a largo plazo. Por ello, debemos cuidar la piel desde edades tempranas y elegir productos adecuados de acuerdo a nuestro tipo de piel. De esta forma, la edad no es el único factor a tener en cuenta.

 

 

Las cremas antiedad comienzan a hacer efecto con la pérdida progresiva de colágeno y elasticidad. Si las utilizamos antes de tiempo, no estaremos dando a nuestra piel los productos que necesita y no lograremos ningún efecto visible. No por utilizar una crema antiedad a los 20 vamos a dejar de tener arrugas a los 50. En definitiva, debemos elegir las productos en función de las características y necesidades de cada piel.

 

 

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El aloe vera se ha utilizado desde hace más de tres mil años. La parte más utilizada de esta planta es el gel, el cual es usado como un producto dermatológico y es muy beneficioso para tu piel curando quemaduras y disminuyendo la aparición de arrugas en la piel, pero también es utilizado como suplemento alimenticio.

 

 

Como ves hay muchos usos del aloe vera, pero es principalmente conocido por sus beneficios para la piel. Solo basta con pasar la textura delgada del gel natural del aloe vera y aplicarla a tu piel, para entender por qué. Es tan calmante como refrescante, por lo que en la medicina alternativa o la Ayurveda se refiere, al aloe es una hierba milagrosa que puede usarse para tratar heridas, cortes menores, piel seca y quemaduras graves. Toma por ejemplo estas tres mascarillas naturales que puedes hacer en función de tu piel:

 

Aloe vera para pieles secas: toma un poco de aloe vera, una pizca de cúrcuma, una cucharadita de miel, una cucharadita de leche y unas gotas de agua de rosas. Mézclalo todo hasta obtener una pasta. Aplícalo y déjalo actuar durante unos 20 minutos aproximadamente.

 

 

Aloe vera scrub: toma media taza de gel fresco de aloe vera, una taza de azúcar y dos cucharadas de jugo de limón. El azúcar ayudará a exfoliar la piel muerta, el aloe vera limpiará la piel en profundidad y el limón ayudará a eliminar las cicatrices y la piel quemada por el sol. Revuelve los tres ingredientes juntos y utilízalos tanto en la cara como en el cuerpo. (Eso sí, ¡pilas con el sol!).

 

 

Aloe vera para pieles sensibles: toma un poco de gel de aloe vera, jugo de pepino, yogur y aceite de rosa y mezcla hasta obtener una pasta. Aplica y deja actuar durante unos 20 minutos, luego enjuaga.

 

 

Además de ser rica en vitaminas como la A, B12, C, E y muchos minerales, tiene muchos beneficios no solo para la piel, sino también sorprendentemente para tu salud:

 

 

Mejora la digestión

 

El aloe vera asegura una mejor absorción de nutrientes mientras elimina los elementos nocivos de forma natural. Por lo tanto, cura el síndrome del intestino irritable, previene el estreñimiento, y otras afecciones gastrointestinales que pueden afectarte. Y todas sabemos que una buena digestión se refleja en la salud general. Además de sus propiedades laxantes, el aloe vera tiene compuestos llamados polisacáridos que tienen la capacidad de curar úlceras. Así que si sufres de cualquiera de estas afecciones consume extracto de aloe vera durante al menos 3 a 4 semanas y seguramente notarás resultados positivos.

 

 

Aumenta tu sistema inmune

 

El aloe vera tiene propiedades desintoxicantes naturales que limpian efectivamente el sistema digestivo y el sistema circulatorio. Lo cual quiere decir que a medida que el nivel de absorción de nutrientes se acelera, mejora la circulación sanguínea, se mejora tu estado de salud. ¿Cómo? Muy sencillo: cuando la sangre es rica en oxígeno, automáticamente proporciona nutrientes dentro de las células de manera más competente. Estas células saludables aseguran la capacidad que tiene tu cuerpo para protegerse de las infecciones, fortaleciendo así tu sistema inmunológico. Y mientras neutraliza las bacterias dañinas tus propiedades rejuvenecedoras logran trabajar aún más, manteniéndote activa y fresca todo el día.

 

 

Alivia el dolor articular y muscular

 

 

Gracias a las propiedades antiinflamatorias del aloe vera, por medio de la aplicación tópica o incluso ingiriendola puedes reducir instantáneamente el dolor causado por cualquier tipo de inflamación en todo el cuerpo. De hecho, su uso ha demostrado resultados positivos para curar el dolor de la artritis.

 

 

Cura los dolores menstruales

 

Sorprendentemente, el extracto de aloe vera ha demostrado ser un excelente estimulante del útero por lo que comer aloe vera o beber su jugo es muy beneficioso para lidiar con los dolores menstruales.

 

Alivia las náuseas

 

Las náuseas pueden ocurrir debido a una serie de razones, ya sea por intoxicación de alimentos, un virus o incluso debido a tratamientos médicos. A menudo, los sentimientos de náusea se originan de trastornos en el estómago o en el tracto digestivo. El jugo de aloe vera es excelente para el estómago enfermo y te hace sentir mejor al brindar una sensación de calma en todo el cuerpo.

 

 

Reduce el nivel de azúcar en la sangre

 

Según un estudio sobre los efectos del aloe vera en pacientes diabéticos, publicado en Phytomedicine, sugiere que su consumo ayuda a disminuir los niveles de azúcar en la sangre.

 

 

Suaviza el reflujo ácido

 

La acidez estomacal, la gastritis y el malestar pueden ser aliviadas con un remedio natural como el aloe vera. Inicialmente, puedes probar consumiendo jugo de aloe vera, que generalmente funciona de manera efectiva e inicia el funcionamiento adecuado. Eso sí, no olvides que la alimentación en este tipo de males juega un papel primordial.

 

 

Reduce el colesterol

 

El gel de aloe vera, cuando se usa internamente, mejora automáticamente la calidad de la sangre y, por lo tanto, ayuda a equilibrar los otros componentes, como el colesterol y la glucosa.

 

 

Enfermedades de las encías

 

Las enfermedades dentales y de las encías también pueden curarse con el aloe vera. Puedes probar este remedio natural en casa; solo necesitas un poco de polvo de aloe vera y cepillar tus dientes normalmente. También puedes recurrir al jugo de aloe vera para mantener las encías saludables. Simplemente tienes que hacer gárgaras antes de tragar.

Conserva la comida

 

Una capa delgada de gel de aloe vera puede actuar como un conservante natural de los alimentos. En un experimento el conservante de aloe pudo mantener las uvas frescas durante más de 35 días. Además, un estudio de 2014 citado en Cambridge Core muestra que el extracto acuoso puro de aloe vera puede inhibir el crecimiento de ciertos microbios.

 

 

Fortalece el pelo

 

El aloe vera ha demostrado ser una excelente opción para promover el crecimiento del pelo de forma natural. Puedes aplicar su gel en todo el cuero cabelludo y el pelo para detener la pérdida del pelo, ya que tiene una enzima que es beneficiosa para estimular el crecimiento de este. Además mejora la circulación sanguínea y tiene propiedades antiinflamatorias que tratan efectivamente la alopecia androgenética o la calvicie de patrón masculino. Si lo usas regularmente puedes estar segura de contribuir a evitar la pérdida prematura de tu pelo.

 

 

Y por si fuera poco, el aloe vera también ayuda a retrasar el envejecimiento, atenuando las arrugas y rejuveneciendo la piel, actuando sobre ella para mantenerla fresca, flexible y radiante.

 

 

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Causas

 

• Predisposición genética: si tus padres o abuelos tienen este antecedente, es posible que puedas presentarlo también. Ser propenso a tener manchas en la piel o hiperpigmentación en ciertas áreas, puede incrementar la probabilidad de tener axilas oscuras.

 

• Acumulación de células muertas: es la causa más frecuente y la más fácil de tratar

 

• Depilación con cuchilla: incrementa la producción de melanina de la piel, que oscurece la piel y propicia el crecimiento del vello. La depilación vuelve el área muy sensible, mucho más si entra en contacto con el sol. Depílate con métodos más duraderos como cera o máquina, para aliviar la irritación de la piel.

 

• Desodorantes: los químicos y perfumes que componen los desodorantes pueden generar una reacción alérgica en algunas personas, generando manchas. Entre más perfumado sea el producto, más posibilidad hay de generar alergias. Sé fiel a tu piel, no a una marca.

 

• Sudor excesivo o mal lavado.

 

• Irritación: si además de manchas sientes ardor o dolor, puede deberse a una reacción alérgica o una infección bacterial, en este caso consulta a tu médico.

 

 

Remedios caseros

 

Procura no realizar estos tratamientos justo antes de la depilación. Los resultados comienzan a verse 3 o 4 semanas después de aplicar los remedios a diario. Estas recetas también son efectivas en codos, rodillas y entrepiernas manchadas u oscurecidas.

 

• Limón y bicarbonato: mezclar jugo de limón con una cucharadita de bicarbonato y agua oxigenada. Aplica sobre las axilas y deja actuar por 20 minutos antes de bañarte.

 

• El limón es el remedio natural más conocido y eficaz contra las axilas oscuras, puedes aplicarlo directamente con un una rodaja y dejarlo todo el día porque también es desodorante natural, pero si vas a salir lávalo y no salgas inmediatamente al sol porque te puedes manchar más. También puedes dejarlo actuar durante toda la noche.

 

• Yogurt: limpia el área con un algodón mojado en aceite de oliva. Mezcla 2 cucharadas de yogurt natural, 2 cucharadas de glicerina natural, y el jugo de un limón. Aplica sobre la axila y deja actuar durante 20 minutos. Esta mezcla te devolverá la suavidad de tu piel y la hará menos propensa a las manchas.

 

• Limón y glicerina: mezclar 3 gotas de limón, 3 gotas de glicerina, y 3 gotas de aceite de almendras. Aplica esta preparación todos los días antes del baño.

 

• Miel, avena y azúcar: exfolia tus axilas con esta mezcla una vez cada tres días.

 

 

Tener en cuenta todos los días

 

• Usar estropajo natural a diario

 

• Aplicar crema corporal sin fragancia en las axilas para mantener la piel humectada

 

• Utilizar desodorante libre de alcohol y fragancia

 

• Si vas a lucir una camisa sin mangas, aplica protector solar en tus axilas

 

• Toma bastante agua y consumir vitaminas provenientes de frutas.

 

 

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Para tratar el mal olor de las axilas existen varios métodos terapéuticos. El tratamiento debe ser escogido por el estilo de vida de la persona y la alimentación, porque los tratamientos no se ajustan a todas las personas. En algunos casos es importante considerar los factores genéticos.

 

 

Pasos para eliminar mal olor de las axilas

 

– Prepara una infusión con hojas de tomillo o romero y aplica en las axilas

 

– Mezcla vinagre con alcohol y aplica después del baño con un paño

 

 

– Mezclar una cucharada de bicarbonato con el líquido de un limón y aplicar después del baño

 

 

– Lavar las axilas al menos dos veces al día con jabón anti-bacteriano.

 

 

– Usar desodorante antitranspirantes para reducir el sudor de las axilas.

 

 

– Afeitar los vellos de las axilas para eliminar las bacterias y el sudor seco que se adhieren a ellos.

 

 

– Atención a la dieta (comer productos ricas en fibra) -> Frutas, verduras y granos enteros

 

 

– Tratar los problemas de la piel que puedan perpetuar el olor, como micosis.

 

 

– Eliminación definitiva de los vellos de las axilas.

 

 

En casos extremos:

 

– Uso de antibióticos tópicos en las axilas, como clindamicina o eritromicina.

 

 

– Liposucción para la eliminación de las glándulas apocrinas de la axila.

 

 

– Tratamiento a láser de las glándulas apocrinas.

 

 

Factores que contribuyen en el mal olor de las axilas

 

– El tipo y la cantidad de bacterias presentes en la piel.

 

 

– Exceso de sudor.

 

 

– Mala higiene personal.

 

 

– Obesidad

 

 

– Diabetes mellitus

 

 

– Fumar

 

 

– Micosis en las axilas.

 

 

– Consumo excesivo de algunos alimentos, tales como cebolla, el curry, ajo o pimienta.

 

 

– Consumo excesivo de alcohol.

 

 

– Antibióticos como la penicilina.

 

 

¿Cuál es la causa del mal olor de las axilas?

 

El sudor en las axilas es un líquido inodoro, producido por las glándulas sudoríparas llamadas ecrinas y apocrinas.

 

 

Las glándulas ecrinas son las más comunes, el 99% de estás glándulas está compuesto por agua y 1% de sales minerales como cloruro de sodio y urea. Su principal función de esta glándula es controlar la temperatura del cuerpo.

 

 

Las glándulas apocrinas están específicamente en las axilas, ingle, alrededor de los pezones y del ano. Éstas glándulas aparecen entre 8 y 14 años de edad y producen una especie de sudor grasoso, que no tiene ninguna función de controlar la temperatura del cuerpo, por tanto genera el mal olor.

 

 

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Para lucir un cutis sano, luminoso y sin imperfecciones necesitas conocer bien tu tipo de piel.

 

 

No todas las pieles requieren los mismos tratamientos y la prevención es importante para mantener a raya el paso del tiempo.

 

 

Si sabes cuáles son los puntos débiles de tu cutis, según tu tipo de piel, sabrás qué cuidados son los imprescindibles.

 

 

Potencia tu atractivo al máximo con una piel bien cuidada para que esté suave y se conserve joven y tersa.

 

De esta manera, podrás elegir los productos que más se adaptan a los problemas que tengas, pero no olvides que para óptimos resultados se requiere de disciplina y constancia.

 

 

Lo primero que tienes que saber es si tu tipo de piel es seca, grasa, normal o sensible. Cuando ya lo conozcas sigue los consejos que te sugerimos para mantenerla en las mejores condiciones.

 

 

Piel seca

 

La piel seca es la más propensa a las arrugas y manchas. Se caracteriza por ser tirante, rugosa y apagada.La piel seca es la más propensa a las arrugas y manchas. Se caracteriza por ser tirante, rugosa y apagada

 

El tratamiento para la piel seca debe ser altamente hidratante y nutritivo. Utiliza leche limpiadora, tónico y una crema hidratante.

 

 

Refuerza el contorno de ojos y labios con productos específicos. Estas zonas son las más afectadas en estas pieles.

 

 

También puedes recurrir a cremas que contengan glicerina, vaselina y aceite mineral, además del factor de protección solar.

 

 

Asimismo, utiliza tratamientos antioxidantes (para combatir los radicales libres) y aplica alrededor de los ojos algún producto con retinol.

 

 

Se recomienda el uso de limpiadores emolientes y exfoliarse 1 vez cada 15 días.

 

 

Aplica una mascarilla una vez por semana muy hidratante o un bálsamo para dotar a la piel de hidratación extra.

 

 

Una dieta equilibrada y beber 2 litros de agua al día también es beneficioso para este tipo de piel.

 

 

En cuanto al maquillaje, los cosméticos que utilices deben tener activos minerales, que no resecan.

 

Piel grasosa

 

Las pieles grasosas tienen tendencia a sufrir de acné y otras imperfecciones.

 

 

Este tipo de piel presenta una excesiva producción de sebo. Las causas se deben a factores genéticos, estrés, cambios hormonales, mala alimentación e, incluso, el clima.

 

 

La limpieza facial diaria y la exfoliación son vitales para su cuidado.

 

 

Rutinas diarias para lucir un cutis impecable

 

 

Selecciona productos libres de alcohol y evita el aceite mineral y vaselina, pues pueden obstruir los poros.

 

 

No olvides la crema humectante y el protector solar antes de salir de casa.

 

 

Todos los tipos de piel pueden tener acné, pero la piel grasosa es la más propensa a sufrir de este problema. El tratamiento básico contra el acné es limpiar, aplicar tónico y un producto para combatir los brotes.

 

 

Si tienes problemas graves de acné acude a un dermatólogo.

 

 

Al maquillarte escoge productos con texturas en polvo, mantendrás a raya los brillos

 

Piel mixta

 

La piel mixta es una combinación del tipo de piel normal-seca y grasa.

 

 

El sol, la contaminación o el tabaquismo son factores que inciden para que tu piel se arrugue

 

 

Este tipo de piel tiende a desarrollar impurezas en la zona T (frente, nariz y barbilla) y presenta un aspecto brillante.

 

 

La zona de las mejillas suele ser entre normal y seca. Por eso hay que tratar la sequedad de la línea seca y al mismo tiempo controlar la grasa de la zona que la posee.

 

 

Lávate la cara con agua tibia, evita el agua muy caliente o muy fría. Usa crema hidratante diariamente. Una vez a la semana aplícate una exfoliante y mascarilla en la zona T (frente, nariz y barbilla).

 

 

Piel normal

 

La piel normal es la más fácil de tratar, pero eso no significa que debes descuidarte.

 

 

La piel normal es la más fácil de tratar, pero eso no significa que debes descuidarte

 

 

Para conservar este tipo de piel es necesario utilizar productos que la hidraten y protejan.

 

 

Aplícate diariamente productos con protección solar, retinol y antioxidantes.

 

 

No olvides que la limpieza facial es esencial, así como las cremas que ayudan a restaurar la humedad del cutis.

 

 

¿Qué hacer cuando tienes un tipo de piel sensible?

 

Este tipo de piel se debe tratar con sumo cuidado.

 

 

La piel sensible muestra muchos síntomas: picores, irritación, rojeces y son muy frágiles.

 

 

La piel sensible muestra muchos síntomas: picores, irritación, rojeces y son muy frágiles

 

 

Existen varios tipos de piel sensibles. Para averiguar la tuya acude a un dermatólogo.

 

 

Elige cosméticos hipoalérgicos y libres de sustancias químicas e irritantes.

 

 

Hay líneas completísimas para pieles sensibles en las que el agua termal, la rosa mosqueta o la caléndula son excelentes aliados.

 

 

Siempre usa un limpiador facial suave, que contenga lípidos, un antioxidante y un protector solar SPF 30.

 

 

En la noche aplícate una crema con péptido para regenerar las células de la piel o retinol para reducir las arrugas.

 

 

En la noche aplícate una crema con péptido para regenerar las células de la piel o retinol para reducir las arrugas

 

 

Evita el estrés, el alcohol, ambientes con mucho calor o el picante, ya que propician la dilatación de los vasos sanguíneos.

 

 

Este tipo de piel reacciona de forma muy extrema a algunos cambios climáticos y productos. Es hiperactiva y se irrita muy fácilmente provocando hasta picores y alergias. Utiliza maquillaje hipoalergénico.

 

 

Luce una piel bonita a los 40

 

La llegada a la cuarta década provoca una crisis en la mayoría de las mujeres. Sin embargo, actualmente existen muchas formas para mantener la piel joven y fresca, durante más tiempo. Es muy importante que identifiques el tratamiento ideal.

 

 

Las necesidades que tu tipo de piel tiene a los 20, no son las mismas que las que tiene a los 40.

 

 

Las necesidades que tu tipo de piel tiene a los 20, no son las mismas que las que tiene a los 40

 

 

Lo primero es buscar un tratamiento antiarrugas que también de firmeza.

 

 

Las cremas antiarrugas nos ayudan a reemplazar los elementos naturales de nuestra piel, que se pierden con el tiempo.

 

 

Es indispensable el uso diario de cremas antiedad, las cuales combaten los radicales libres que ocasionan el envejecimiento prematuro.

 

 

Realizarse peelings que renuevan la piel forma parte del tratamiento para después de los 40.

 

 

El pro-retinol es un poderoso activo antiarrugas, conocido por ayudar a estimular la reconstrucción de la piel. Busca este activo en tu crema, ya que suele dar resultados rápidos.

 

 

El pro-retinol es un poderoso activo antiarrugas

 

 

El elasti-flex en cambio te ayudará a la firmeza multiplicando y reforzando las fibras de elastina de la piel. Esto da firmeza a tu rostro.

 

 

Siempre se debe usar protección solar FPS 50+ en la cara, manos, escote y cuello.

 

 

Con estas recomendaciones podrás lucir una piel sana y radiante.

 

 

EME de mujer