Obtener la cédula se ha convertido en un maratón desde finales del año pasado. Los usuarios denuncian que son remitidos desde oficinas locales hasta la sede principal, ubicada en Plaza Caracas, por lo que deben salir desde muy temprano de sus casas, aunque eso no garantiza que reciban atención pues el proceso puede tardar hasta 10 horas.

La poca existencia de material para imprimir y plastificar el documento de identidad, las fallas en el sistema y la escasez de personal son las causas que aducen los funcionarios ante las quejas de los usuarios del servicio.

“Llegué a las 5:00 am, me anoté en una lista, a las 8:00 am un funcionario nos dijo que atenderían hasta un número limitado de personas porque hay poco personal y el sistema está lento. El que llegue después de las 6:00 am pierde el viaje”, describió Adelaida Marín, quien ayer intentaba, por segunda vez, ser atendida en la oficina del Saime en Plaza Caracas para iniciar el trámite de renovación de su cédula que perdió en un robo.

Yaneth Chacón, residente del sector Parosca en Ocumare del Tuy, estado Miranda, fue remitida a la oficina principal desde los Valles del Tuy, debido a la falta de material.

“La cédula se me venció el año pasado y en el Saime de Ocumare me dijeron que viniera a la sede principal, que es la más cercana donde están cedulando, porque allá no hay material”, contó mientras hacía la cola en la que ya acumulaba más de 8 horas de espera en la dependencia del Saime de Plaza Caracas, lugar donde se realizan los trámites de cedulación y datos filiatorios.

Junto a ellas, alrededor de 80 personas aguardaban para entrar. En total, atienden hasta a un centenar por día. “Yo vengo de La Vega, porque en la sede del IND no hay material desde noviembre”, aseguró Germán Suárez.

La mayoría de las oficinas se mantienen operativas solo para trámites de pasaporte. Es el caso de IFE Charallave, IFE Cúa, La Trinidad, La Urbina, Ocumare del Tuy, Propatria, San José, Cotiza, Nuevo Circo, San Bernardino, Santa Mónica, Coche, Santa Rosalía e IND en El Paraíso.

No obstante, las deficiencias del servicio no se circunscriben solo a la región capital. Denuncias similares ocurren en estados como Aragua, Carabobo y Lara. Ayer casi 200 personas trancaron la avenida Lara de Barquisimeto, para exigir la reanudación de los operativos de cedulación.

Las limitaciones en la atención y la lentitud del proceso por interrupciones del sistema ocasionan caos y largas colas en los despachos en los que sí hay material, como el ubicado en Los Ruices. “Desde las 8:00 am solo han pasado 40 personas, al parecer porque el sistema se cayó. Son casi las 2:00 pm y el proceso está parado debido a que el personal se fue a almorzar. Nos dijeron que solo atenderán a los que entren hasta las 4:00 pm”, relató Mónica Benavides, proveniente de Caucagüita, quien aguardaba para ser atendida junto a una veintena de personas desde las 5:00 am.

Los puntos móviles desaparecieron progresivamente desde 2015 y los operativos de cedulación para escolares, que se realizaban los sábados, están suspendidos desde mediados de 2016.

En el Instituto Venezolano de Puericultura Pastor Oropeza, ubicado en la parroquia Sucre,  reunieron ayer al personal para informarles que había 13 casos de sarampión confirmados y que había sospechas de contagio en la parroquia El Recreo, aunque no se mencionaron casos concretos. Pese a la cercanía de la parroquia 23 de Enero, de esta tampoco se tenían reportes de personas afectadas.

Desde hace tres semanas el sarampión se expande en Caracas, pero el Ministerio de Salud no ha admitido públicamente la llegada de la enfermedad a la ciudad y solo está vacunando casa por casa en la parroquia Sucre, como medida de bloqueo.

La única información oficial sobre el problema epidemiológico que no se veía en el país desde 2002, data del 6 de enero cuando el ministro Luís López anunció en su cuenta de Twitter que empezarían un despliegue casa a casa con una jornada de vacunación para 10.000 niños y 10.000 adultos en la parroquia Sucre de Caracas. Sin embargo, no ha sido así.

En un recorrido por los distritos sanitarios se constató que no hay vacunas en el Distrito Sanitario 3, ubicado en la avenida San Martín, porque todas sus dosis se trasladaron a Catia, mientras que en el hospital Pediátrico Elías Toro, en donde se han atendido siete casos de sarampión desde diciembre, solo se está vacunando al personal médico.

En Salud Chacao y en el Materno Infantil del Este, ubicado en Petare, se informó que aún hay dosis de trivalente, pero no hay una campaña extraordinaria por la epidemia.

La Red Defendamos la Epidemiología cuestiona que el cerco epidemiológico se esté haciendo solo en Catia y no en todo el área metropolitana de Caracas para detener la expansión de la epidemia.

José Félix Oletta,  miembro de la Red y ex ministro de Salud, alertó que si hay movilización de dosis de vacunas de un distrito sanitario a otro es porque no hay suficientes para inmunizar  a la población expuesta. “Esta es una ciudad grande con gran movilidad y se les olvida que hay niños desplazándose de un lado a otro con sus padres para buscar comida. Es fácil la transmisión de la enfermedad. Esta epidemia seguirá adelante con mucho ímpetu y lo que me preocupa es la garantía de la cantidad adecuada de vacunas para poder bloquear esto”, dijo.

Adolescentes afectados. El contagio de sarampión también ha dejado en evidencia que la cobertura de la vacuna en el segundo refuerzo, que debe aplicársele al niño a los 5 años de edad, no ha sido aplicada. Dos de los pacientes atendidos en el pediátrico Elías Toro son adolescentes de 12 y 13 años de edad, que no tuvieron la segunda inmunización para completar el esquema de vacunación.

La OPS ubicó a Venezuela en el puesto 37 de 40 países en el ranking de eficiencia en cobertura de vacunas de sarampión y rubeola en 2016. Venezuela solo superó a Bolivia, Surinam y Haití en el conteo  de eficiencia de la región con una cobertura que solo alcanzó 53% en todo el país. En aplicación de la primera dosis de estas vacunas al primer año de edad, Venezuela ocupó el puesto 37 de 44 países con una cobertura de 88%. Superó en este rango a Bermudas, Ecuador, Guatemala, Trinidad y Tobago, República Dominicana, Curazao y Haití.