Para lograrlo, la nutricionista Rocío Runca nos brinda cinco tips fáciles de poner en práctica y que representarán un gran cambio. Acá van.

1. ¿Cómo endulzar? Es un buen primer paso. Sustituí el azúcar blanca y edulcorantes por azúcar mascabo, stevia, miel, pasas de uva o dátiles hidratados en agua. Son alimentos completos que brindan dulzor y nutrientes.

2. Comer más frutas. La recomiendación es ingerir cinco por día, en el desayuno, merienda o colaciones. ¿Cómo lograrlo? Una clave es tenerlas siempre a la vista. Puede ser en una frutera en la mesa o la cocina. No solo quedan divinas como decoración, al verlas recordás consumirlas.

3. Dejar de lados las gaseosas y jugos artificiales. Contienen una gran cantidad de azúcar y aditivos. Se pueden reemplazar por limonadas, aguas saborizadas caseras, jugos de frutas y licuados. El agua de pepino, por ejemplo, es muy fácil de preparar y resulta muy refrescante. Cómo hacerla: colocar en una jarra de vidrio rodajas de pepino, menta, agua, algún endulzante natural (esto es optativo) y hielo. Dejar macerar dos horas para que se liberen los sabores y ya está lista para consumir. ¡Lleva una botellita en el bolso para ir tomando durante el día!

4. Utilizá harina integral, en lugar de la blanca. Los granos integrales aportan más fibras, vitaminas, minerales y ¡dan saciedad!

5. Incorporá en todas tus comidas vegetales frescos de estación. Un plato con muchos colores, vitaminas y minerales te dará más energía, estimulará el tránsito intestinal y brindará saciedad por más tiempo. Las ensaladas, sopas, gazpachos, salteados o variedades al horno o vapor cumplen este requisito.

También conviene tener en cuenta que una alimentación más saludable requiere de un cambio en el lugar de compra de los alimentos. En dietéticas, ferias, verdulerías, mercados orgánicos pueden encontrarse mejor calidad de productos y con menor manipulación de la industria. El consejo es consumir alimentos lo más parecidos a lo que sale de la tierra. ¡Cuanto mejor comas, mejor te sentirás!

Fuente: derf

Puedes embarazarte si:

1. Abres el condón con los dientes

Esto es super básico: con la prisa, abrir con los dientes podría romper el condón por accidente. Así que mejor tómense su tiempo.

2. No le dejas espacio en la punta al colocarlo
Esto podría causar que el esperma se salga por los lados, así pongan en práctica las clases de reproducción sexual de la secundaria y colóquenlo adecuadamente.

3. Usas un lubricante a base de aceite con un condón

Esta combinación simplemente no funciona, porque estos lubricantes pueden degradar el látex y crear agujeros microscópicos en el preservativo, lo que aumenta las posibilidades de que te embaraces.

4. Cuando jugueteas en una piscina o tina

Esta es remotamente probable, pero no imposible, porque siempre que hay semen cerca de tu vulva, un esperma podría colarse y así terminarías embarazada.

5. Usas métodos anticonceptivos

Incluso si los usas puntualmente, por lo regular, los métodos anticonceptivos tienen un ligero margen de error, por ejemplo, las pastillas son 99% eficaces.

6. Si ya estás embarazada

¡Sí, esto existe! Se llama superfetación y se da cuando estás embarazada y continúas ovulando. La mayoría de los casos ocurren en personas con tratamientos hormonales, estimulación ovulatoria, síndrome de hiperestimulación o fertilización asistida.

7. Tomaste la pastilla del día siguiente
Las pastillas de emergencia disminuyen la probabilidad de un embarazo, pero no pueden evitarlo por completo. Si tomas la píldora dentro de un intervalo de 24 horas, es aproximadamente 95% efectiva y se vuelve menos efectiva mientras más esperas.

8. Estás menstruando
El esperma vive dentro de ti hasta cinco días: si tienes sexo en los últimos días de tu sangrado y ovulas temprano, podrías concebir un bebé.

9. Él tiene una vasectomía

Las vasectomías no surten efecto de inmediato, por lo que el urólogo recomienda realizar un análisis de semen de seguimiento un par de meses después, para ver si está completamente limpio. Además, es posible que las áreas cortadas vuelvan a juntarse.

10. Tú tienes las trompas ligadas
Al igual que la vasectomía, no es 100% efectiva.

Fuente: Actitud Feme