El canciller de Guatemala Carlos Raúl Morales, argumentó en las últimas horas que en este 47 encuentro de representantes de países del sistema interamericano, no será posible negociar un acuerdo sobre la crisis en Venezuela.
En el tercer y último día de la Asamblea General de la OEA, Morales dijo además que el diálogo «es cuestión de tiempo» y no debe ser una camisa de fuerza para llegar a una solución concertada en el país latinoamericano, pero mostró su preocupación sobre la violación de los Derechos Humanos hacia los ciudadanos.
«Lo que tenemos que hacer es evitar que esto se agrave», precisó.
Por su parte la canciller ecuatoriana María Fernanda Espinosa, manifestó a la VOA que se abstuvo de votar en la Asamblea sobre el caso de Venezuela porque desconocía los cambios a la resolución.
Última Jornada
La cuadragésima séptima Asamblea General de la Organización de Estados Americanos concluye el miércoles, sin que se haya logrado acuerdo sobre la crisis en Venezuela.
Entre los temas de la última jornada de la Asamblea General figuran Derechos Humanos y democracia, seguridad multidimencional y otros.
Primera Sesión Plenaria
Los gobiernos de todas las Américas criticaron al liderazgo socialista de Venezuela el martes, por la forma en que maneja la crisis política y económica, lo que llevó a la ministra de Relaciones Exteriores de esa nación, Delcy Rodríguez a calificar a los críticos como “perros falderos del imperialismo”.
Estados Unidos, Brasil y otros 10 miembros de la Organización de Estados Americanos, de 34 naciones, emitieron una carta en la que acusan a Venezuela de socavar la democracia, no alimentar a su pueblo y violar los derechos humanos.
“Considerando la interrupción del proceso democrático en la República Bolivariana de Venezuela, creemos que debe haber una solución negociada que incluya a todas las partes venezolanas para beneficio del pueblo de esa nación”, dice la carta emitida en la Asamblea General de la OEA en Cancún, México.
La misiva pide la liberación de los prisioneros políticos, respeto por los derechos humanos, un cronograma para elecciones, un “canal humanitario” para el envío de alimentos y medicinas, y la creación de un grupo o mecanismo para ayudar un “efectivo diálogo entre los venezolanos”.
Las 12 naciones también pidieron al presidente venezolano, Nicolás Maduro, que abandone una votación prevista para el 30 de julio para una asamblea con poderes para redactar de nuevo la Constitución del país. Críticos de Maduro dicen que la medida es un complot para aferrarse al poder.
La canciller Rodríguez, respondió criticando los antecedentes de derechos en México y destacando la pobreza, la violencia y la inmigración en Honduras y otras naciones.
Rodríguez dijo que la planeada asamblea constituyente en su país era la única forma de superar la actual crisis pacíficamente.
“¿Quieren la guerra. Eso es lo que quieren para Venezuela? dijo Rodríguez, quien acusó al secretario general de la OEA, Luis Almagro, de tratar de causar una guerra civil en Venezuela.
El martes, los diplomáticos de Estados Unidos y Venezuela se enfrentaron por la crisis venezolana en la primera sesión plenaria de la 47ª Asamblea General de la OEA, en el segundo día del encuentro que se realiza en el balneario de Cancún, México.
El subsecretario de Estado de EE.UU., John J. Sullivan exhortó a adoptar una resolución aunque sea modesta “para ayudar a facilitar una solución de la crisis en Venezuela, es lo menos que podemos hacer”, dijo, y presionó por la propuesta que por iniciativa de México se ha impulsado en el encuentro, la cual propone crear un “grupo de contacto” que acompañe un diálogo en Venezuela.
Dijo que Estados Unidos y sus aliados ambicionan la riqueza petrolera de su país y sostuvo que en Venezuela “no hay crisis humanitaria, no hay presos políticos, hay violentos que cometieron crímenes graves”.
La respuesta de Sullivan fueron tres palabras: “Distracciones, distorsiones e irrelevancias”. Lo que sucede en Venezuela es aparente para todos, dijo y a sus colegas en la reunión, les alentó a ver esta oportunidad como un momento de desafío para demostrar la relevancia de la OEA.
«Esto no es intervenir en Venezuela, es tomar un paso modesto que ha sido propuesto bajo el liderazgo del Ministro de RR.EE. de México, dar un paso modesto para formar un grupo que facilitaría una resolución del serio problema que todos reconocemos que hay en Venezuela. Si no podemos darlo, limitaremos seriamente nuestra capacidad en el futuro para seguir adelante colectivamente como una organización», señaló el diplomático estadounidense.
Un grupo de 20 países de la OEA liderado por México y en el que se cuentan Estados Unidos, Canadá y Brasil, tres de las naciones más poderosas del hemisferio, negocia un proyecto de resolución sobre la crisis de Venezuela para aprobarlo en la Asamblea General, tras no lograr acuerdo ayer en una reunión de cancilleres.
Esas naciones, tratan de convencer al menos a tres países más para que se unan a la resolución. El reglamento de la Asamblea solo requiere 18 votos, pero el grupo quiere mostrar que el apoyo de dos tercios de los 34 Estados representados en el encuentro.
El proyecto que apoya Estados Unidos, insta al presidente Nicolás Maduro a reconsiderar su convocatoria a una Asamblea Constituyente, a garantizar el respeto a los derechos humanos y a entablar un diálogo con la oposición facilitado por un grupo de países.
Antes de retirarse de la sala indicando que esa era su última intervención en la OEA, Delcy Rodríguez hizo una ardiente defensa de su país y la situación que vive Venezuela.
Otros países antes de EE.UU. también sintieron la ira de la Canciller, que respondió indignada a las preocupaciones y deseos de ayudar a buscar una solución negociada en Venezuela.
Países como Perú, Canadá, Colombia, Honduras, Chile y otros instaron al régimen de Maduro a suspender el llamado a la Constituyente, a liberar a los presos políticos, a cesar las detenciones arbitrarias y iniciar un canal humanitario que permita el ingreso de medicinas y alimentos a la población.
A lo largo de la sesión Rodríguez respondió pidiendo respeto para su país y expresando que Venezuela «no permitirá intervenciones». El representante de Costa Rica fue objeto de una de las más fuertes réplicas de la Canciller venezolana, quien lo llamó «analfabeta político».
El canciller Manuel González Sánz, en conversación con la VOA respondió mesuradamente, indicando que no lo toma de forma personal sino como una respuesta a todo lo que se ha dicho en la Asamblea sobre la situación que vive Venezuela. Vea aquí la entrevista.
Proyecto de Resolución
México negocia un proyecto de resolución sobre la crisis de Venezuela para aprobarlo en la 47 Asamblea General de Cancún, tras no lograr acuerdo ayer en una reunión de cancilleres.
Según el reglamento de la Asamblea, solo necesitarían 18 votos pero quieren mostrar que tienen los apoyos que requería la reunión de cancilleres, dos tercios de los 34 Estados representados en ese encuentro.
La jornada de este martes está supuesta a contar con discusiones sobre pobreza, desarrollo integral, seguridad cibernética y el liderazgo de las mujeres.
Otro tema es el índice de pobreza multidimensional como herramienta de política para no dejar a nadie atrás, organizado por el Gobierno de México.
La ciberseguridad y la construcción de confianza para una comunidad digital segura y transparente también ocuparán a los delegados a la Asamblea General del organismo regional.
Un panel sobre oportunidades y desafíos para el liderazgo de las mujeres en las Américas, concluirá la actividad del segundo día de la Asamblea General de la OEA.
Esta mañana, antes de iniciar el debate del segundo día de sesiones, el embajador de Colombia, Andrés González Díaz, conversó con la Voz de América sobre Venezuela y otros temas de relevancia en su país y la región.
Primer día
El lunes, algunos países del organismo querían emitir una resolución sobre la crisis en Venezuela, pero mientras un grupo cancilleres pedía una prórroga, otro prefirió cerrar la sesión, dijo el ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, Carlos Morales, quien presidió la reunión.
«Yo no quisiera que nuestro hemisferio siguiera partiéndose más. De conformidad con lo que ustedes han expresado, tenemos que buscar soluciones, continuar el diálogo y la única forma de poder continuar este diálogo es manteniendo abierta esta sesión», agregó Morales.
Los cancilleres de 11 países, Argentina, Brasil, Canadá, Colombia, Chile, Estados Unidos, Honduras, Guatemala, México, Paraguay y Perú expresaron su decepción ante la falta de consenso sobre la crisis venezolana.
Al respecto, el canciller mexicano, Luis Videgaray, dijo más tarde en una conferencia de prensa que «todos los escenarios están abiertos, vamos a evaluar todas las opciones y vamos a actuar en consecuencia».
Más temprano, el secretario general del organismo, Luis Almagro, dijo junto con el canciller mexicano que Venezuela tiene una crisis constitucional y que necesita un calendario electoral, respetar al Congreso, un poder judicial independiente y liberar presos políticos.
Venezuela ha tenido fuertes fricciones tanto con Almagro como con Videgaray y anunció su retiro del organismo aunque la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, sí participó en la asamblea pero rechazó cualquier decisión que fuera tomada por la OEA.
VOA Noticias
Por Confirmado Massiel Bravo
