La doctora Claudia Vázquez,  jefa de infectología del Hospital Juárez, en México, se refirió a los mitos del contagio del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), que degenera en el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida), y aseguró que es “casi imposible” contraer la enfermedad al momento de hacerse un tatuaje.

Durante esta semana en donde se celebró el día de la lucha mundial contra el Sida, la especialista aclaró que siempre y cuando se emplee una aguja nueva no existe el menos riesgo de contagio.

“Con los tatuajes solo puede haber infecciones por reacciones en la piel, pero si la aguja es nueva, no hay ningún riesgo”.

 
Asimismo, explicó que también son falsos los riesgos por tratamientos odontológicos o transfusiones de sangre, aseguró que, por un lado, el dentista esteriliza los instrumentos y, por el otro, a todo donador de sangre se le practica una serie de exámenes para descartar cualquier enfermedad.

En ese sentido, llamó a la no discriminación de los afectados y recordó que tomar en el mismo vaso, usar el mismo baño, compartir jabón, cubiertos o recibir un beso de un paciente infectado tampoco supone algún tipo de peligro.

“Lo que más duele a los pacientes es el rechazo social, no es lo mismo tener cáncer y que todo mundo siente tristeza por eso, a tener VIH y que todo el mundo te rechace”.

 
Respecto a las personas propensas, explicó que cualquier persona que ha tenido relaciones sexuales sin protección, tiene posibilidades de contraer el virus. Recomendó que si se existe alguna sospecha tras un acto sexual se debe acudir 14 días después para detectar si la carga viral esta presente en la sangre.

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Erróneamente no se suele prestar demasiada atención, pero lo cierto es que el suelo pélvico es una de las zonas más importantes del cuerpo y hay que ejercitarlo. Hay que prestar atención sobre todo si padecen de incontinencia urinaria, están embarazadas o entran en la menopausia: “Los ejercicios de los músculos del suelo pélvico son obligatorios si desean mantener una vida sexual placentera y sin incomodidades causadas por la falta de firmeza de esta zona”, tal y como confirman en Diario Femenino.

 
Los expertos lo definen como “un conjunto de músculos y ligamentos que cierran la cavidad abdominal en su parte inferior. Su función es sostener los órganos pélvicos (vejiga y uretra, útero y vagina; y recto) en la posición adecuada porque de ello depende su normal funcionamiento”.

 
Así, lo primero que se debe hacer es identificar el estado de los músculos:

 
1- Acomódense con los muslos, nalgas y abdomen relajado.

 
2- Como práctica, al orinar traten de detener la orina en la mitad y luego suéltenlo de nuevo. Háganlo no más de una vez por semana. Si no son capaces de aguantarlo, hablen con su doctor.

Ejercicios:

 
1- Aprieten y contraigan la parte de la vagina, el ano y la uretra, a la vez. Como si intentasen succionar algo hacia adentro de ustedes. Mantengan la contracción y cuenten hasta cinco hasta soltar y relajar.

 
2- Entre contracción y contracción, descansen 10 segundos.

 
3- Repitan este ciclo un máximo de 8 o 10 contracciones y después hagan de 5 a 10 contracciones rápidas.

 
4- Deben repetir estos ejercicios 4 o 5 veces diarias.

Además, ¿sabían que el orgasmo es uno de los mejores ejercicios para el suelo pélvico? Y es que tal y como confirman los expertos, “la tensión del músculo pubocoxígeo que se produce en esa misma fase, sin haber llegado aún al orgasmo, hace de entrenamiento de este músculo. El fortalecimiento de este músculo producirá orgasmos más intensos con contracciones más rápidas e intensas de la zona pélvica. Durante un orgasmo intenso se producen de diez a quince contracciones por segundo, involuntarias y rítmicas, de los músculos del suelo pélvico, la vagina, el útero y el esfínter anal”.

Cualquier duda al respecto consulten con su médico, él es la persona más adecuada para explicarles el funcionamiento y la importancia del suelo pélvico.

 
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La disfunción eréctil es hasta 2,8 veces más común entre los varones que padecen periodontitis crónica

La periodontitis o la «enfermedad de las encías –comúnmente conocida como «piorrea»–, es una patología fundamentalmente caracterizada por la inflamación y sangrado de las encías. Una enfermedad que, más allá de causar la destrucción de la masa ósea que sustenta las piezas dentales y, por tanto, provocar la pérdida de los dientes, se asocia a un mayor riesgo de enfermedades potencialmente mortales como las cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.

Y es que mantener una buena salud bucodental es clave para disfrutar de una buena salud general. Y de forma más particular, de una buena salud sexual. De hecho, un estudio llevado a cabo por investigadores de El Primer Hospital Afiliado de la Universidad Médica de Cantón (China) y comunicado por el portal abc.es, muestra que los varones con periodontitis tienen un riesgo mayor de padecer disfunción eréctil, esto es, la incapacidad de lograr o mantener una erección para tener una relación sexual satisfactoria.

Como explica Zhigang Zhao, director de esta investigación publicada en la revista «International Journal of Impotence Research», «quizás sea demasiado pronto para sugerir que los varones con disfunción eréctil deben someterse a una revisión de sus dientes y encías. Y asimismo, que los varones que padecen periodontitis crónica se preocupen por su función sexual. Sin embargo, podría ser beneficioso que los pacientes con periodontitis crónica fueran informados acerca de esta asociación con la disfunción erécti».

¿Y qué se puede hacer para recuperar la función sexual? Pues simplemente, tratar los problemas de las encías. Y es que como muestran los resultados de uno de los estudios «revisados», el tratamiento de la periodontitis mejora los síntomas de la disfunción eréctil.

Como destaca Zhigang Zhao, «el tratamiento de la periodontitis crónica puede controlar o eliminar la inflamación y, por ende, reducir el riesgo de disfunción eréctil».

Sea como fuere, las evidencias disponibles sobre la asociación entre la periodontitis y la disfunción eréctil son muy escasas –los únicos trabajos en los que se ha evaluado esta relación son los cinco recogidos en el metanálisis–, por lo que deben requerirse más investigaciones a este respecto.

Como concluyen los autores, «en nuestra opinión, el conocimiento del mecanismo biológico de la disfunción eréctil en los pacientes con periodontitis es todavía muy pobre».

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