De la profunda tristeza que sintió por la muerte de su madre dice que nació su pasión por ser activista en la prevención de enfermedades de transmisión sexual.
Sentado frente a la biblioteca de la Universidad de la Florida Central (UCF), donde cursa tercer año, Abdon José Mariano Orrostieta recuerda con detalle el 17 de septiembre de 2010 cuando su mamá, de origen mexicano, murió cuatro días después de cumplir 40 años, a causa de cáncer cervical.
“Mi mamá contrajo el virus del papiloma humano [VPH] y por falta de educación no entendió que tenía que ir a un médico. La infección progresó y se le convirtió en un cáncer que avanzó demasiado y se nos murió”, expresó el estudiante de 23 años, el segundo de tres hermanos.
Orrostieta, quien nació en Fort Lauderdale en el seno de una familia musulmana, se mudó en 2015 a Orlando para continuar con sus estudios en ciencias de la salud. Es beneficiario por segundo año, al igual que otros estudiantes, del programa de becas Pedro Zamora Young Leaders, que promueve la organización National AIDS Memorial, dirigido a jóvenes que han demostrado liderazgo en la comunidad en la lucha contra el virus de inmonudeficiencia humana (VIH) y el sida.
El jueves 1 de diciembre es el Día Mundial del Sida, fecha establecida por la Organización Mundial de la Salud con el objetivo de generar solidaridad internacional para combatir la enfermedad.
Ese día Orrostieta tiene planes de viajar al sur de Florida para participar en actividades de Latinos Salud, una organización sin fines de lucro de la que es miembro, que provee pruebas de VIH gratuitas e información sobre enfermedades de transmisión sexual.
El joven, que actualmente reside en Orlando, sueña con convertirse en médico especialista en enfermedades infecciosas, así como cursar una maestría en salud pública. Destacó que gracias a la beca, de $5,000 por año académico, puede costearse las clases y los libros, y lo más importante, honrar la memoria de su madre.
Guillermo Chacón, presidente de la Comisión Latina Sobre el Sida, dijo vía telefónica desde Washington, D.C., que para combatir la epidemia es primordial que se involucren más jóvenes, para que se conviertan en embajadores de la prevención.
“Tenemos que hacer un mejor trabajo a nivel de organizaciones y de departamentos de salud porque vamos a llegar a este 1 de diciembre [Día Mundial del Sida] profundamente preocupados, pero llenos de esperanza porque tenemos todas las herramientas para derrotar el sida”, dijo Chacón.
Los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades (CDC) estiman que más de 1.2 millones de personas en EEUU están infectadas con el VIH y solo una de cada ocho de ellas lo sabe.
También calculan que en 2014 — las cifras más recientes disponibles — unas 44,073 personas fueron diagnosticadas en el país con infección y que el número de nuevos casos se redujo en un 19 por ciento entre e2005 y 2014.
En la comunidad gay latina, en ese mismo periodo de tiempo, los casos de nuevas infecciones aumentaron en un 24 por ciento.
Con respecto a los hispanos, los CDC indican que en 2014 esta comunidad estuvo “desproporcionadamente” afectada por el VIH. “Los hispanos/latinos son cerca del 17 por ciento de la población estadounidense, pero representan un estimado del 23 por ciento (10,201) de los diagnósticos de VIH”.
Para Chacón estas estadísticas son el reflejo de una situación alarmante. “El estimado global que tenemos es que en el país hay alrededor de 250,000 latinos que viven con el VIH o sida”, dijo el salvadoreño, quien explicó que los hispanos son el tercer segmento de la población estadounidense más afectado por esta epidemia después de los afroamericanos y los blancos no hispanos.
Pero un dato que Chacón calificó como aun más preocupante, es que los hispanos están identificados por los CDC como el grupo que se hace la prueba del VIH demasiado tarde.
“Cuando una persona que tiene el virus [de VIH] no ha recibido tratamiento pues va a desarrollar sida, que es la etapa superior de la infección. Por eso es fundamental que nuestra población comprenda que hacerse la prueba es importantísimo”, señaló el residente en Nueva York, quien se encontraba en la capital del país reuniéndose con autoridades de los CDC.
De acuerdo con Chacón, pueden ser varias las razones que contribuyen a que muchos hispanos se demoran en hacerse la prueba VIH, entre ellas: “muchas de estas personas tienen hasta dos y tres trabajos en la semana; pocas organizaciones y departamentos de salud en ciudades y condados ofrecen las pruebas de detección en horarios más flexibles como los fines de semana; cuentan con poco acceso a los servicios de salud y en algunos lugares no hay recursos en español”.
Proteja su vida
El hacerse la prueba del VIH tarde es algo que también destacó Orrostieta como una desventaja común en los hispanos.
El estudiante contó que cuando participa en jornadas de Latinos Salud, en las que reparten condones y ofrecen pruebas de detección de VIH, se da cuenta del desconocimiento que existe alrededor del tema, a pesar de los avances disponibles para la prevención.
“No saben, por ejemplo, de las pastillas con las que se puede evitar el contagio”, dijo el universitario, refiriéndose a PrEP, una estrategia de prevención del VIH en las que los individuos sin el virus toman el medicamento a diario para reducir su riesgo de contraer la infección.
Cuando Orrostieta comenzó a estudiar el año pasado en UCF, se convirtió en voluntario del Health Awareness and Prevention Society, una organización de estudiantes de esta universidad que promueve dentro y fuera del campus las ventajas de llevar una vida saludable y la prevención de enfermedades.
Pero entre sus objetivos está el poder fomentar un grupo enfocado a ayudar a hispanos frente al riesgo de ser contagiados con el VIH en la Florida Central.
“Somos una comunidad que todavía no platicamos en nuestras familias de las enfermedades de transmisión sexual como deberíamos. Nos enteramos de estos temas por los amigos o en la escuela y eso debe de cambiar”, expresó Orrostieta, quien dice que es común encontrar personas que creen que el sida “es una enfermedad de cierto tipo de gente”.
Agregó que la realidad con la que se encuentra cada vez que participa en actividades de prevención le recuerdan a su madre, lo que lo motivan a querer salvar el mayor número de vidas posibles.
Orlando Sentinel