¿Alguna vez has fingido un orgamos? ¿Te has dado cuenta de lo fácil que es? Y también triste, porque los orgasmos jamás deberían tener que fingirse.

De acuerdo con una investigación realizada por el Archives of Sexual Behavior, existen cuatro razones principales por las que una mujer se ve forzada a fingir ese momento. Y según investigadores del Departamento de Psicología de las universidades Temple y Kenyon College, las feminas son un poco egoistas al hacerle creer al hombre que está disfrutando, cuando no es así.

1. Engaño altruista:
Lo hacen para no herir los sentimientos de su pareja o hacerlo sentir mal respecto a la sexualidad. Ay.

2. Miedo e inseguridad:
Su objetivo es reducir las emociones negativas relacionadas con el encuentro sexual.

3. Elevar la propia excitación:
Esta es una razón un poco soberbia ya que pueden sentir más placer durante el sexo. ¿Será que si es egoísmo?

4. Terminar pronto el encuentro sexual:
Fingen para finalizar el encuentro sexual y realizar otras actividades. Ups.

No obstante, los científicos han dicho que aparentar el orgamos no está relacionado con la pareja, sino que es más una herramienta para mejorar esos encuentros eróticos.

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Un video publicado en el canal de YouTube, Blue Seat Studios, al que le aplaudimos por la simpleza con que explica el asunto, aborda de manera muy simple la diferencia entre alguien que quiere tener sexo contigo y alguien que no.

Con la analogía de una taza de té, el clip menciona que cuando alguien te visita y tú le ofreces algo de tomar, si te dicen “sí”, está bien, les preparas el té. Sin embargo, si te dicen “no lo sé, tal vez”, preparas el té, pero no lo obligas a tomarlo”, puede que esa persona después se

tome sola el té, sin necesidad de que tú se lo ofrezcas a cada minuto.

Por otra parte, si te dijo que quería el té, pero mientras lo preparabas se desmayó, te olvidas del té y te aseguras que esté bien, no lo obligas a tomarse el té. Además, si en algún momento ese persona te dijo que sí quería el té, pero después que no, entonces no la obligas a beberlo diciéndole “pero ayer querías té”, porque está en su derecho de cambiar de opinión.

¿Entendieron? Aquí el video completo:

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“¿Cómo es un pene atractivo?”, así se llama el estudio científico que analizó las preferencias de las mujeres cuando de penes se trata y que sugiere que para ellas es más que tamaño y grosor.

El estudio publicado en The Journal of Sexual Medicine, es parte de un proyecto que se enfoca en hombres que se sometieron a cirugías correctivas por hipospadias, es decir, tener el orificio de la uretra localizado en cualquier otro lugar que no sea la punta del pene.

A los investigadores les interesaba saber que aspectos del pene eran importantes para las mujeres y compararlos con aquellos que consideraban los hombres que se habían sometido a este procedimiento correctivo.

De 105 entrevistadas que puntuaron entre un rango de 8 aspectos del uno al cinco, donde uno era sin importancia y cinco, muy importante, las mujeres coincidieron en que la apariencia general del pene es mucho más atractiva, que, por ejemplo, la posición y forma del meato urinario en la apariencia estética del pene, que quedaron en el último lugar.

Los aspectos considerados incluyeron: largo, grosor y posición, así como forma del meato urinario, además de tamaño de los testículos, piel que recubre el escroto, el vello púbico y la apariencia cosmética general del miembro masculino.

De hecho, el tamaño del miembro viril ocupa el sexto lugar de los 8 aspectos, el grosor el tercero y el vello púbico el segundo, sin embargo, es cierto que el estudio fue conducido en un grupo poblacional muy pequeño.

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De acuerdo con David Barrios, experto en sexología clínica, el deseo es una ansiedad de carácter erótico; un estado anímico que permite la excitación y acumulación de sensaciones agradables, pero ¿estas sensaciones cambian de acuerdo al género?

Aunque miles de mujeres digan que no, que ellas casi nunca piensan en sexo, la realidad es que el deseo sexual femenino es tan fuerte y voraz como el de los hombres. La única diferencia entre hombres y feminas redica, según Daniel Bergner, columnista del The New York Times, en que ellos son más libres de externarlo. Por eso algunas personas se espantan cuando escuchan a las chicas hablar de sexo.

Sin embargo, aquí te mostramos algunas verdades del deseo intenso en las mujeres:

1. ¿Se termina?
El deseo sexual de las mujeres se mantiene invariable con el paso de los años, e incluso aumenta, lo único que pierden más rápido es el interés en sus parejas, algo que confundimos con la “falta de libido”, explica Kimberly Russell, investigadora en biología evolutiva, en el informe “Evolución y comportamiento de los sexos”.

2. No importa el género, la visión del sexo es suficiente:
De acuerdo a un estudio realizado por la profesora Meredith Chiver, de la Universidad de Queens, en Canadá, independiente de su orientación sexual, las mujeres suelen excitarse al observar imagines del coito; no importando que sea hombre con hombre, mujer y hombre o mujer con mujer.

3. Sensación que se confunde con amor:
Barrios señala que existe una confusión entre enamoramiento y deseo entre las mujeres. En ambos casos los síntomas son muy parecidos: aumenta la temperatura, se incrementa el ritmo cardíaco y existe la sensación de mariposas en el estómago.

4. ¡Arriba la cafeína!
Expertos de la Universidad de Southwestern aseguran que consumir cuatro tazas de café al día aumentan el deseo sexual en las mujeres.

5. ¿El deseo no es igual en hombres o mujeres?
Russell indica que la libido femenina es más exigente que la de los hombres, quienes pueden mantener el deseo sexual hacia sus parejas durante mucho más tiempo. De esta manera se pone en duda la supuesta naturaleza monogámica que rodean a la mujer. El deseo sexual, independientemente de la edad que se tenga, es similar para ambos sexos.

6. En días más fértiles hay más deseo:
Expuesto en Archives Sexual Behavior, una investigación realizada por la Universidad de Leethebridge, reveló que las mujeres en sus días más fértiles tienen más fantasías y por consiguiente su deseo sexual se incrementa.

7. Yoga:
Científicos de la Escuela Médica de Harvard han comprobado que la repetición de las posturas favoritas durante al menos doce semanas consigue aumentar el deseo.

8. Chocolate:
De acuerdo con un estudio publicado en la revista The Journal of Sexual Medicine, las mujeres que toman al menos una pastilla de chocolate negro al día experimentan mayor deseo sexual y tienen relaciones sexuales más placenteras.

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Para los que aseguran de manera imperativa que los hombres piensan más en sexo que las mujeres, sepan que no hay manera de afirmar algo así. Puede que los varones lleven una vida sexual más activa que las feminas, pero eso no significa que ellas no piensen mucho en sexo o que no les guste igual que a ellos.

La app “Kindara” realizó una encuesta en la que cuestionó a las mujeres sobre asuntos de su sexualidad, como a qué hora del día sentían más ganas de tener relaciones, qué tan despierto tienen el deseo sexual y qué tan importante es para ellas la conexión emocional.

Los resultados revelaron que el 53 por ciento de las mujeres quisieran tener más sexo que lo que tienen en su vida actual, además, más de tres cuartas partes de las mujeres que participaron en el estudio afirmaron que desearían tener sexo más de tres veces a la semana.

Por otra parte, se descubrió que el 48 por ciento de ellas experimenta un orgamos por encuentro, pero amarían sentir muchos más.

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Es común escuchar diariamente a personas que hablan sobre la sexualidad de la mujer con tal certeza que parece son unos expertos, sin embargo, el Doctor Aaron Carroll, en su libro “Dont swallow your gum!: Myths, half-truths, and outright lies about your body and health” (“No te tragues el chicle: Mitos, verdades a medias y mentiras sobre tu cuerpo y salud“), desmitifica algunos mitos de la mujer y el sexo que hoy en día todavía tienen una gran resonancia en la sociedad.

1. Un médico puede saber si una mujer es virgen:

Esto no es cierto. De acuerdo con la doctora Rachel Vreeman, de la Univerrsidad de Indiana, esto es una falacia, pues es imposible discernir si el himen ha sido perforado o no mediante un examen médico:

“Algunos creen que el himen funciona como un sello de la vagina. Al menos hasta que se pierde la virginidad. Pero no es así. En los casos en que esto ocurre, los periodos se acumulan dentro del cuerpo y pueden derivar en serias complicaciones médicas”.

2. Tomar antibióticos puede hacer que los anticonceptivos fallen:

Otra de las leyendas es la que afirma que tomar un antibiótico puede hacer que las píldoras anticonceptivas fallen. Según Carrol, las píldoras fallan en uno por ciento de los casos y ese rango no se modifica al ingerir medicamentos. Únicamente hay una excepción, la rifampicina, una medicina contra la tuberculosis que hace que disminuyan las hormonas que protegen contra el embarazo.

3. La menopausia hace que disminuya el deseo sexual:

Siempre se ha afirmado que la edad es una pesada carga a la hora de tener relaciones sexuales. Sin embargo, hace 21 años que el sociólogo Edward Laumann demostró que la realidad es distinta.

Una investigación que realizó en la Universidad de Harvard, reveló que la mitad de las mujeres que entrevistaron con 50 años hacían el amor varias veces al mes. Esto, “a pesar de que los cambios hormonales pueden influir a la hora de quitarles las ganas a algunas mujeres, no hay una relación directa entre la menopausia y la falta de deseo sexual“, dijo Vreeman.

4. Las mujeres no pueden quedarse embarazadas si tienen la menstruación:

En palabras de Carrol, en determinadas ocasiones es posible que una mujer se quede embarazada mientras tiene la menstruación. Todo se debe a que, cuando el esperma entra en el cuerpo femenino, a veces puede esperar hasta una semana para unirse con un óvulo. Así pues, la ovulación que sucede antes o después del periodo puede dar como resultado un bebé.

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