El presidente Enrique Peña Nieto dio el ‘Grito’ de Independencia mexicana frente a miles de personas, la mayoría de ellas fueron ‘invitadas’, mientras en las calles una multitudinaria manifestación pidió la renuncia del mandatario, que pasa por el momento más bajo de su presidencia.
«Vivan los héroes que nos dieron patria», proclamó Peña Nieto en un evento oficial realizado en la Plaza de la Constitución de la Ciudad de México, conocida como el Zócalo, en un acto protocolar más breve que en años anteriores, que apenas duró cinco minutos.
La festividad de este año se vio marcada por una masiva manifestación de ciudadanos indignados convocada en redes sociales contra la gestión de Peña Nieto, con el hashtag » #RenunciaYa”, que inició su simbólico recorrido bajo ‘La Victoria Alada’, monumento conocido como el Ángel de la Independencia.
Los padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos hace casi dos años, encabezaron la marcha que fue definida en las redes sociales como apartidista.
Durante el recorrido, Felipe de la Cruz, vocero de los familiares, condenó el nombramiento de Peña Nieto a Tomás Zerón, quien encabezó por dos años la investigación del caso sin dar resultados, y acaba de ser nombrado secretario del Consejo de Seguridad Nacional. «No vamos a descansar hasta ver tras las rejas a Tomás Zerón», aseveró.
Las protestas se dan en medio del nivel más bajo de aprobación de la gestión presidencial de Peña Nieto, desde que asumió el cargo en 2012, según un reciente sondeo del Grupo Reforma, que reveló que el 74% de los mexicanos reprueban la gestión del mandatario.
«No hay nada que celebrar. Claro que hoy recordaremos a los héroes que nos dieron patria, pero a quien no reconocemos es a Enrique Peña Nieto. A él lo queremos fuera», dijo Ignacio del Valle, activista en contra de la construcción de un nuevo aeropuerto en Atenco, México.
Entre los manifestantes, había maestros, funcionarios y ciudadanos, que en sus reclamos al gobierno incluyeron la situación económica del país, la violencia y escándalos como la reciente reunión de Peña Nieto con el candidato presidencial estadounidense Donald Trump, después de sus ataques a los migrantes mexicanos y su intención de reforzar la frontera común con un gran muro.
También hicieron referencia a la muerte de ocho personas y más de un centenar de heridos en junio pasado Nochixtlán, estado de Oaxaca, durante un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad en el marco de una protesta de maestros.
«Yo soy maestro, subdirector de una escuela secundaria», dijo a Univision Noticias Ismael Padilla González, participante de la movilización.
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«Mi vestimenta -continuó- representa una imagen de un México partido, herido y sangrante por culpa de nuestro propio gobierno».
A la movilización también acudieron trabajadores petroleros, quienes acusaron al mandatario de haber entregado la firma Petróleos Mexicanos, PEMEX, a empresas trasnacionales, a través de la reforma energética.
Alejandro Corona, integrante de la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros, acusó al presidente de «haber provocado deliberadamente» desempleos.
Ante el paso de la marcha, el gobierno de la capital mexicana desplegó a decenas de miembros del agrupamiento de granaderos, para evitar confrontaciones y daños en inmuebles.
Si bien en su mayor parte transcurrió de forma pacífica, terminó con una escaramuza entre marchistas y la policía antimotines, que bloqueó el paso a los manifestantes hacia el Zócalo.
En ese punto, algunos manifestantes comenzaron a retirarse, mientras otros plantearon ingresar poco a poco, mediante la llamada ‘operación hormiga’, entrando en pequeños grupos dispersos.
«Acarreados», «dan vergüenza», gritaban los manifestantes a los buses que se abrían paso para participar en la ceremonia oficial del Zócalo, procedentes en su mayoría del céntrico Estado de México, del que fue gobernador Peña antes de asumir la presidencia, y que siendo un bastión del gubernamental Partido Revolucionario Institucional.
Mientras, en el Zócalo miles de personas movilizadas por líderes seccionales del PRI, se concentraban en las primeras filas para responder al ‘Grito’ del presidente Peña, el cuarto desde que asumió la presidencia en 2012 para un mandato de seis años.
«Yo vengo a ver al señor presidente, lo venimos a apoyar», dijo a Univision Noticias Saúl Hernández, que fue traído desde la sureña entidad mexicana de Chiapas.
Desde Lerma, en el Estado de México, se desplazó Noé García Lechuga quien señaló que acudió por «una invitación que nos hizo el presidente», en un recorrido que inició a las 10 de la mañana según contó a Univision Noticias.
Acompañado de su esposa, Angélica Rivera, Peña Nieto apareció a las 23:00 hora local en el balcón central del Palacio Nacional, portando la bandera nacional. Tras lanzar vivas a los héroes de la independencia mexicana, repitió tres veces el grito de «¡Viva México!», coreado por decenas de miles de personas congregadas en la plaza.
La ceremonia, que repite cada año, evoca la arenga lanzada la madrugada del 16 de septiembre de 1810 por el cura Miguel Hidalgo, quien llamó a los mexicanos a sublevarse contra la autoridad virreinal de la Nueva España. La independencia fue consumada en 1821.
Fuente: Univision