El pueblo de Amazonas marchó la mañana de este jueves en demanda tanto de la incorporación de los diputados que fueron elegidos a la Asamblea Nacional el 6 de diciembre, como de la excarcelación de dos dirigentes indígenas presos por expresar sus ideas contrarias al régimen de Nicolás Maduro.
Con la participación de voceros de la Unidad Democrática, encabezados por el gobernador Liborio Guarulla; la diputada Mauligmer Baloa; y los propios legisladores impugnados – Nirma Guarulla, Julio Ygarza y Romel Guzamana -, los manifestantes, principalmente habitantes del eje carretero norte, se concentraron en la comunidad de Ojo de Agua para transitar 12 kilómetros hasta la localidad aborigen de Pavoni, en la zona fronteriza con Bolívar.
“Esta caminata pacífica, que aglutinó a más de 3 mil personas, es por la reivindicación de los derechos de los amazonenses consagrados en la Constitución de Venezuela y en la Ley Orgánica de Pueblos y Comunidades Indígenas, ante los constantes atropellos que se presentan en la entidad”, manifestó el titular del Ejecutivo regional, quien informó que la actividad masiva contó con el concurso de diferentes organizaciones étnicas tales como COIBA, OPUHC, OPICA, OPIJKA, UCIUSPA y RAJIA.
“Exigimos la incorporación de los diputados nacionales al Parlamento. Por más de 90 días ellos se encuentran apartados de las decisiones que se toman en el seno del Palacio Federal Legislativo”, exigió el mandatario regional, destacando la presencia en la nutrida actividad de los pueblos piaroa, jivi, piapoco, curripaco y sáliva.
Guarulla anunció que en agenda se tiene prevista la próxima “Gran Caminata por Venezuela”. “Llegaremos hasta Miraflores para demandar lo que nos corresponde por la Carta Magna y las leyes”, enfatizó.
Presos por pensar distinto
Por su parte, la diputada Baloa, de la bancada mayoritaria acreditada ante el órgano unicameral, informó que se trata de la tercera movilización de su tipo que se lleva a cabo en Amazonas. “Además del caso de los diputados, hoy la consigna es por la liberación de los primeros indígenas ‘presos políticos de esta revolución: Humberto Yosuino, del pueblo Curripaco; y Javier Infante, del pueblo Uhothüja”.
“Yosuino fue sacado bajo engaño de su vivienda, en Picatonal, por funcionarios del Sebin el pasado 29 de diciembre, y trasladado a Caracas, al Helicoide, sin que sus familiares lo pudieran visitar. Luego, el 15 de marzo de este año, lo condujeron a Puerto Ayacucho para la audiencia preliminar de su caso, resultando esta diferida”, afirmó, precisando que suma 95 días en confinamiento.
En lo que respecta a Infante – quien se desempeñara como viceministro de Caños, Ríos y Raudales del Ministerio del Poder Popular de Pueblos y Comunidades Indígenas, y que desde 2015 integra el equipo de la Unidad Democrática en el municipio Atures – se conoció que se halla recluido en la sede de la policía política en Amazonas.
“El 30 de marzo se cumplió la audiencia preliminar. Cabe destacar que Infante fue víctima de coacción, maltrato y tortura por parte de quienes lo detuvieron, con el fin de que grabara un audio acusándose a sí mismo de cometer delitos”, indicó la legisladora, quien comentó que hasta el Consejo Piaroa de Ancianos se pronunció en apoyo al arrestado.
“Testigos declararon a favor de Infante, pero, por insistencia de la fiscalía – cuyo representante fue reemplazado en último momento -, se solicitó el juicio con privativa de libertad y así se decidió”, dijo.
En la jornada se activaron por el respeto a las garantías de los diputados, de los presos políticos y de los amazonenses, en general, los pobladores de los asentamientos de Limón de Parhueña, Mata Seca, Monte Rey, Jardín de Dios, Villanueva, Kalibirrenae, Monte Sinaí, Puente Topocho, Planeta, Puerto Lucera, Bambú Lucera, La Frontera, Betania de Topocho y Albarical.
NP