El deterioro cognitivo no comienza con la acumulación de placas de beta-amiloide en el cerebro, sino con la pérdida de conexiones cerebrales
El alzhéimer es una enfermedad neurodegenerativa, es decir, causada por la destrucción de las neuronas cerebrales. Y esta destrucción, como han mostrado numerosas investigaciones, se produce por la acumulación en el cerebro de placas de beta-amiloide, altamente tóxicas para las neuronas. Sin embargo, el deterioro de la función cognitiva comienza antes de que se acumulen estas placas. Y es que un estudio llevado a cabo por investigadores del Hospital Infantil de Boston (EE.UU.) muestra cómo la pérdida de conexiones cerebrales –esto es, las consabidas ‘sinapsis’ neuronales– es anterior a la deposición de las placas de beta-amiloide. La buena noticia es que esta pérdida de sinapsis puede ser prevenida, lo que ayudaría a preservar la función cognitiva en las fases iniciales de la enfermedad.
Como explica Beth Stevens, directora de esta investigación publicada en la revista «Science», «la pérdida de las sinapsis cerebrales se encuentra fuertemente correlacionada con el deterioro cognitivo. Nuestro objetivo es desandar el camino hasta el mismo inicio de la enfermedad y ver cómo se inicia esta pérdida de las sinapsis».
Y este nuevo enfoque, ¿qué beneficios tendría para los pacientes? Pues como indican los autores, «la mayoría de los nuevos fármacos en desarrollo tienen por objetivo eliminar las placas de beta-amiloide o reducir la inflamación en el cerebro. Sin embargo, nuestros resultados sugieren que la enfermedad de Alzheimer puede ser tratada de forma mucho más precoz, antes de que estos cambios patológicos tengan lugar».
Anterior a las placas
La nueva investigación se apoya en los hallazgos alcanzados por los mismos investigadores tras analizar del desarrollo cerebral en la infancia. Y es que como muestran los resultados previos, el cerebro en desarrollo cuenta con un mecanismo con el que elimina las sinapsis o conexiones neuronales innecesarias. El problema es que, cuando envejecemos, este mecanismo se activa indebidamente y sigue eliminando las conexiones cerebrales. Todo ello a pesar de que estas sinapsis resulten del todo necesarias. En consecuencia, el bloqueo de este mecanismo podría minimizar, e incluso evitar, la pérdida de las sinapsis. O así se ha visto, cuando menos, en modelos animales –ratones.
Como apunta Beth Stevens, «el conocimiento en profundidad del proceso de desarrollo normal del cerebro nos ha proporcionado una visión novedosa sobre cómo proteger las sinapsis en el alzhéimer y, potencialmente, en muchas otras enfermedades. Y es que la pérdida de las sinapsis también es común en la demencia frontotemporal, la enfermedad de Huntington, la esquizofrenia y el glaucoma, entre otras».
El alzhéimer puede ser tratado antes de la acumulación de placas de beta-amiloide en el cerebroBeth Stevens
Concretamente, el estudio, llevado a cabo con modelos animales –ratones– de enfermedad de Alzheimer, muestra que la pérdida de sinapsis requiere de la activación de una proteína denominada ‘C1q’, responsable de ‘etiquetar’ estas sinapsis para su eliminación por las células del sistema inmune presentes en el cerebro –las microglías.
‘Defender’ las sinapsis
Es más; los niveles de C1q son más elevados cuando aún no hay señales de acumulación de placas de beta-amiloide en el cerebro, lo que indica que el deterioro de la función cognitiva asociado al alzhéimer se inicia antes de la deposición de estas placas. Sea como fuere, la pérdida de sinapsis requiere de la participación no solo de C1q y las microglías, sino también de los oligómeros de beta-amiloide, altamente tóxicos para las neuronas y que finalmente se unirán formando las consabidas placas.
Como refiere Soyon Hong, co-autora del estudio, «ya sabíamos que las microglías y los factores de complemento estaban implicados en el alzhéimer, pero siempre se había pensado que jugaban un papel secundario con respecto a la neuroinflamación causada por las placas. Sin embargo, nuestro estudio ofrece una nueva visión y demuestra que las microglías y el complemento están implicadas en una etapa mucho más temprana del alzhéimer, cuando las sinapsis son todavía vulnerables pero pueden ser potencialmente protegidas».
De hecho, el estudio muestra que el bloqueo de C1q con un fármaco experimental denominado ‘ANX-005’ evita la pérdida de las sinapsis. Tal es así que, como indican los autores, «el ‘ANX-005’ tiene el potencial para ser utilizado algún día para proteger frente a la pérdida de sinapsis en una amplia variedad de enfermedades neurodegenerativas».
En este contexto, debe tenerse que la pérdida de las sinapsis en el alzhéimer tiene lugar en las primeras fases de la enfermedad. Es decir, prevenir esta pérdida cuando la enfermedad ya ha progresado podría no tener ningún efecto. Como concluye Soyon Hong, «necesitamos identificar marcadores para la pérdida de las sinapsis. Y es que como ocurre en el cáncer, si tratamos a un paciente cuando el alzhéimer ya se encuentra en una fase avanzada puede que ya sea demasiado tarde».
Fuente: ABC.es