Los Tigres de Aragua no dieron prenda a los Navegantes del Magallanes y lograron cuatro triunfos seguidos en la final para adjudicarse su décima corona en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional
Los Tigres de Aragua rugieron con vehemencia anoche en el José Bernardo Pérez de Valencia, para imponerse con pizarra de 8 por 2 a los Navegantes del Magallanes en el sexto juego de la gran final, y proclamarse así por décima ocasión en la historia como campeones de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional.
Rompiendo la tendencia localista que prevaleció en los cinco primeros juegos, y alcanzando su cuarto triunfo en fila, que los iguala con los Leones del Caracas (1994-1995) como los únicos equipos en remontar una final tras perder los juegos uno y dos, los felinos consiguieron levantar el cetro de la LVBP, por primera vez desde la 2011-2012 cuando vencieron a los Tiburones de La Guaira.
La tropa aragüeña inició desde temprano su jornada definitiva rumbo al campeonato, el tercero logrado en cuatro finales frente a Magallanes, con par de carreras en el primer episodio, gracias al tercer cuadrangular en la serie de Alfredo Marte, que se fue por el jardín central y remolcó a Carlos Sánchez, ante los envíos del abridor turco, el mexicano Édgar González.
Seguidamente en el comienzo del segundo, Teodoro Martínez amplió la ventaja felina, con sencillo al centro que remolcó desde tercera a Hernán Pérez.
Magallanes descontó en el cierre del quinto capítulo, cuando atacó al abridor aragüeño Marcus Wolden, que se retiró tras completar 4.1 innings, dejando par de hombres en circulación al relevista Wilfredo Ledezma, que le otorgó boleto a Abel Nieves para llenar las almohadillas, antes de ser sustituido por Édgar Ibarra.
Ibarra golpeó a Álex Romero, con lo que le permitió anotar a Mario Lissón la primera de los locales. Sin embargo, la amenaza turca quedaría allí, ya que el zurdo Ibarra logró ponchar a Ezequiel Carrera, antes de dejar la lomita para el derecho Tony Peña Jr., que dominó con línea al campocorto a Adonis García, que vio cómo su batazo fue decapitado en gran forma por el joven Juniel Querecuto, lanzándose hacia su mano derecha y tomándola de bote pronto.
En el sexto, los Navegantes volvieron a amenazar, pero solo pudieron hacer otra más, gracias al imparable de José «Goyito» Martínez, que remolcó a Frank Díaz. A los carabobeños una vez más les faltó el batazo oportuno, ya que de manera colectiva con hombres en posición anotadora se fueron de 8-1, dejando ocho corredores en las bases.
Sentencia
Una situación contraria a la de los Tigres que en el comienzo del séptimo terminó de encaminar el triunfo, con jonrones sucesivos: primero de Carlos Sánchez, con Querecuto en circulación, y luego en solitario de Alfredo Marte.
Para Sánchez fue su segundo estacazo de la final, con el que llegó además a ocho producidas. Mientras que para Marte, fue su segundo de la noche, con el que igualó a Miguel Cabrera (dos veces), Lasting Milledge y René Reyes como los únicos toleteros de Tigres con múltiples jonrones en un duelo de finales. Para el dominicano ese también fue su cuarto bambinazo de la serie, y que le permitió empatar la cifra récord de la LVBP en series por el campeonato, junto a Antonio Armas, Álex Cabrera, Robert Pérez, René Reyes y Robinson Chirinos.
«Me siento muy contento de ganar este campeonato, y agradecido con los Tigres por darme la oportunidad de jugar aquí», dijo Marte. «Eso es parte de mi trabajo (jonrones), para eso me trajeron y bueno gracias a Dios salieron los batazos en el momento necesario».
Marte, que además logró nueve impulsadas en la serie y bateó para .346, terminó como el Más Valioso de la final, la décima disputada por los bengalíes en el siglo 21, y en la que por primera vez logran coronarse bajo el mando de un mánager criollo, el zuliano Eduardo Pérez, quien celebró en su único partido dirigido, tras haber estado suspendido en los cinco primeros juegos.
«Me siento muy bien, fue un sacrifico lo que pasamos todo el año, con altos y bajos. Todo nos salió bien y ahora es momento de celebrar», expresó el citojense, que llevó a los Tigres a levantar su séptima corona desde la 2003-2004. «Recibí muchas críticas todo el año, pero sabía que tenía un gran equipo aquí y por eso escogí venir a dirigir. Este es un equipo tremendo y aquí estamos campeones de Venezuela».
Del lado de Magallanes, que por segundo año consecutivo vio a su rival consagrarse en su casa, también destacó otro zuliano: Álex Romero, quien se fue de 4-2, con doble e impulsada, para establecer un nuevo récord de imparables como refuerzo en postemporada, con 80.
Los Tigres son el tercer equipo de la pelota invernal en inscribir su nombre en la Serie del Caribe, tras los Venados de Mazatlán (México) y los Leones del Escogido (Rep. Dominicana).
Sólo dos equipos han logrado el título de la LVBP ganando cuatro juegos seguidos después de perder los dos primeros encuentros de la final: Tigres de Aragua (2015-16) y Leones del Caracas (1994-95).
Ángel Paúl Pereira
apereira@laverdad.com