El presidente de la Comisión de Política Exterior, Luis Florido, informó que están haciendo una investigación cualitativa de los funcionarios y del trabajo de la Cancillería
El nuevo presidente de la Comisión de Política Exterior de la Asamblea Nacional, Luis Florido, no perdió tiempo. Una vez juramentado en el cargo ordenó la revisión de los principales acuerdos internacionales de cooperación que contrajo el gobierno en los últimos años.
El dirigente opositor de Voluntad Popular también anunció que examinarán la formación del servicio exterior venezolano, por considerar que ha sido un “ente encargado de responder a los intereses políticos de la llamada revolución bolivariana”.
El diputado considera que el gobierno ha hecho “proselitismo internacional” y ha fortalecido muchas de las organizaciones políticas de izquierda en el mundo como es el caso de Podemos, en España, un asunto que será investigado y si hallan hechos irregulares emprenderán acciones.
—¿Cómo funcionará ahora la Comisión de Política Exterior?=
—El servicio exterior venezolano solo responde a intereses políticos de la llamada “revolución bolivariana” y nuestros venezolanos en el exterior están abandonados a su suerte, así como las embajadas y los consulados. Por eso, haremos una diplomacia legislativa de Estado para tener una relación con los demás países, que nos permita proteger nuestros intereses. El proyecto es hacer una lucha frontal para defender el tema universal de los derechos humanos en Venezuela, afectados por la corrupción que permitió, por años, que la mayoría de nuestros capitales se fueran a otros países y cuentas en el exterior. Para ello se establecerán puentes con las otras comisiones de la Asamblea como la de Contraloría, Finanzas, Seguridad y Defensa y Política Interior.
—¿La Ley de Política Exterior será uno de los principales temas que tratarán? ¿Qué supondrá esta revisión?
—Desde la comisión vamos a examinar toda la formación del servicio exterior venezolano, teniendo en cuenta que Venezuela se ha ido “desinstitucionalizando”. Nos llamó la atención que un miembro del servicio exterior en una embajada tiene como profesión la recreación de niños; es decir, es una persona sin ningún tipo de experiencia en política internacional. Tenemos que ir por una Ley de Servicio Exterior que profesionalice a nuestra gente y que las capacite. Tenemos que interpelar a la canciller (Delcy Rodríguez) y sus funcionarios para verificar el estatus de nuestro servicio exterior. Estamos haciendo una investigación cualitativa de los funcionarios que tenemos. Además, analizaremos lo que sucede con los estudiantes y pensionados en el exterior e interpelaremos al Cencoex.
—¿Cuáles serán los principales acuerdos de cooperación que revisarán?
—Se van a revisar todos los tratados y acuerdos contraídos con China, Rusia, Irán y otros países, con el fin de meterle la lupa, profundizar y ver cuál es el alcance de cada uno. El presidente Hugo Chávez recibió este país con una deuda exterior de al menos 25 millardos de dólares y ahora el país debe casi 120 millardos de dólares. Tal vez más porque las cifras reales nunca son publicadas. Profundizaremos la integración con países fronterizos como Colombia y Brasil. Este último es el principal punto de nuestra próxima gira de consulta. Sin embargo, lo primordial será el tema de Guyana.
—Qué acciones emprenderán con Guyana?
—El Esequibo no puede seguir siendo visto como algo lejano, por lo que hay que ratificar la vigencia del Acuerdo de Ginebra. El 17 de febrero se cumplen 50 años del acuerdo, una oportunidad propicia para retomar la validez de la moción y comenzar una lucha y un ejercicio de soberanía con más profundidad. Nos tocará hacer interpelaciones a ministros y oficiales de la Fuerza Armada Nacional para retomar la figura del buen oficiante, que no se puede desconocer de un plumazo y menos por una acción irresponsable del Ejecutivo. Es importante debatir este tema con Brasil, el Reino Unido y con Guyana en su debido momento. En definitiva, lo que todos tenemos que respetar son los acuerdos que suscribimos como República y que en todo caso son parte fundamental para el ejercicio pleno de la soberanía.
—¿Investigarán los presuntos vínculos de Venezuela con ETA y los pagos que se hicieron al partido Podemos, de España, a través de una televisora de Irán?
—Investigaremos toda la cooperación internacional que hubo y de hallar hechos irregulares procederíamos a tomar otro tipo de medidas. El gobierno ha hecho proselitismo internacional y ha fortalecido muchas de las organizaciones políticas de izquierda en el mundo. En el caso de Podemos revisaremos todo, en especial las vinculaciones con ETA, Hamas y todas las organizaciones calificadas de terroristas.
—¿También evaluarán la participación del país en algunos organismos regionales?
—Los acuerdos como el Alba le han generado un alto costo al país y queremos ver qué pasó con el dinero de los venezolanos en Petrocaribe. Entiendo la solidaridad que debe existir con nuestros vecinos, pero el regalo que se ha hecho de los recursos es otra cosa. Cuando se cobró el acuerdo de cooperación de República Dominicana, que ascendía a 4 millardos de dólares, se le hizo un descuento para poder obtener efectivo por un problema de caja que tenía el Ejecutivo nacional y se recibió alrededor de la mitad del monto estipulado. Fue un gran negocio para República Dominicana, pero generó un daño importante a la economía venezolana. Estos acuerdos no pueden ser un punto en el que Venezuela sea el gran repartidor sin recibir nada a cambio. Las relaciones internacionales se rigen por intereses no por posiciones políticas y hay que rescatar eso que se perdió. Durante años Venezuela le dedicó gran atención a Petrocaribe y al final la declaración conjunta que dieron todas las naciones miembros sobre el Esequibo fue en solidaridad con Guyana y no con nuestro país. Por más que el Estado las ayudó económicamente, desde el punto de vista político las naciones del Caribe se cansaron de unas relaciones meramente ideológicas.
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