La empresa anunció la expansión internacional y lanza su servicio en 131 nuevos países, excepto en China, el mayor mercado del mundo.
A la caza del (nuevo) hábito de consumo de contenidos audiovisuales. Con paciencia y ejerciendo un gran poderío, Netflix se ha convertido en una imparable cadena de televisión global. La firma americana de distribución de películas y series por «streaming» se ha puesto en marcha en 131 nuevos países, excepto en China, donde existen restricciones de acceso a internet impuestas por el gobierno.
Para contrarrestar la ligera desaceleración de su crecimiento en el mercado americano, la firma ha desembarcado en India, Nigeria, Rusia o Arabia Saudí, entre algunos de los países escogidos para esta nueva expansión internacional. En total, ya está presente en 190 países, lo que implica que en prácticamente todo el mundo se puede acceder a su contenido.
Tampoco estará disponible en Crimea, Corea del Norte y Siria, dadas las relaciones con el gobierno norteamericano. La compañía, sin embargo, está explorando las opciones para proporcionar su servicio en China, el país más poblado del mundo. Como principal reto para esta temporada, se aspira a llegar a la cifra de 200 países. En octubre llegó a España, después de un año de intensos rumores. De momento, ya soporta 17 idiomas.
Pese a todo, durante su intervención en la feria de electrónica Consumer Electronic Show (CES), que se celebra en Las Vegas, su consejero delegado Reed Hastings aseguró que la empresa se está «moviendo tan rápidamente» como puede para «tener disponibilidad global de todo el contenido». A día de hoy, en efecto, este es uno de los principales inconvenientes de la plataforma. Sin embargo, los catálogos completos no estarán disponibles de forma inmediata para algunos suscriptores de Netflix -unos sesenta millones según los últimos datos-. Algunas de las más populares como «Daredevil» y «Narcos», sí, no así todas las temporadas de «House of Cars», distribuídas por ejemplo en España por su competidor, Wuaki, propiedad de Rakuten.
La trayectoria ha sido impecable y asombrosa. Hace casi dos décadas comenzó a rodar la marca como un videoclub tradicional, pero anticipándose al resto de competidores y dando un paso importante comenzaron a distribuir vídeo online hasta consolidarse en el entorno «streaming», que gracias a la extensión de la banda ancha y la ampliación de velocidades por internet se augura como el futuro de la televisión. Desde el 2007, año del lanzamiento del servicio de «streaming», este no ha parado de expandirse: primero a Canadá, luego a Iberoamérica, Europa, Australia, Nueva Zelanda y a Japón.
«Con la ayuda de internet, estamos dando a los consumidores la libertad de ver contenidos cuando quieran»Reed Hastings
«Estamos asistiendo al nacimiento de una nueva cadena global de TV por internet», añadió durante su discurso Hastings. «Con este lanzamiento, los consumidores de todo el mundo, desde Singapur a San Petersburgo, de San Francisco a Sao Paulo,podrán ver las mismas películas y series de televisión simultáneamente. Se acabaron las esperas. Con la ayuda de internet, estamos dando a los consumidores la libertad de ver contenidos cuando quieran, donde quieran y con el dispositivo que quieran».
Por una tarifa mensual, los suscriptores de todo el mundo podrán disfrutar de series originales tales como «Daredevil», «Jessica Jones», «Narcos», «Sense8», «Grace and Frankie» o «Marco Polo», así como de su catálogo de películas y series de TV. En el 2016, la empresa tiene previsto lanzar 31 series originales nuevas y reposiciones, más de 20 largometrajes y documentales, un gran surtido de especiales de monólogos de humor y 30 series originales infantiles. Y todos ellos disponibles al mismo tiempo para todos sus suscriptores.
Fuente: Reuters
