Algunas chicas cuando comparten íntimamente con su pareja (independientemente si se conocen de hace mucho, si tienen poco tiempo y la relación está en período de construcción o si se trata de un encuentro recreativo), pueden tener una serie de pensamientos intrusivos al momento de la relación sexual capaces de impedir (o alterar al menos) el disfrute, mermando las ganas de practicar posiciones sexuales, o incluso ejecutando algunas que poco se parezca a sus características personales por querer dar la impresión de ser una experimentada amante.

Algunos fantasmas que aparecen en la cama.

No ser lo suficientemente “bella”. Los estereotipos de belleza no siempre les gustan a todas las personas, si no entras en ciertos patrones, no significa que no seas atractiva o que no te deseen. Si tu pareja está contigo en ese momento es porque se siente a gusto y muy probablemente ni note las “imperfecciones” que tanto te agobian. Concéntrate en las partes del cuerpo que se pueden destacar más que otras. En esos momentos conviene “sentir y no pensar” y entregarse al disfrute.

Temor a no satisfacer sexualmente a la pareja. Muchas aun piensan que son responsables del placer de la otra persona y que para lograrlo deben realizar posiciones acrobáticas, adoptar actitudes de mujer fatal u otras ideas equivocadas de lo que significa ser buena amante. Esto podría darle paso a la culpa o a la ansiedad. Mejor comunicarse abiertamente con la pareja sobre los deseos, necesidades, fantasías sexuales y permitir que busque su propio placer teniéndote como cómplice.

No sentir orgasmos. Tiene que ver con lo anterior: Si existe una preocupación excesiva por el placer de la pareja, difícilmente se logrará placer individual. Socialmente, las mujeres tenemos rol de cuidadoras y constantemente estamos preocupadas por el otro, por su bienestar, por su felicidad.. y hasta por su satisfacción, olvidando y hasta anulando el propio deseo. En el sexo, conviene ser a ratos un poco egoísta y buscar las formas de obtener orgasmos. Claro está, compartiendo con la pareja también.

No tener el control. Tu pareja puede ser tan creativx como quiera y puede tocar, acariciar, besar y hasta oler zonas que te sorprendan. Si lo que hace es de tu agrado, disfruta, descontrólate, ¡no pasa nada!. Si te resulta incómodo, recuerda que tienes derecho a interrumpir y a decir que no.

Miedo a la infidelidad. Sospechar que tu pareja tiene otra relación o que fantasea con otra persona y llevar esos pensamientos a la cama, seguro te impedirá ser libre. Una vez más el tema de la comunicación es vital para resolver conflictos y disfrutar sin perturbaciones. También evaluar si continuar en la relación o no.

Fortalecer la autoestima sexual, estar orgullosa del propio cuerpo, concientizar que la capacidad erótica es infinita y que tienes derecho a disfrutar del sexo sin culpas, son claves para alejar estos fantasmas de tu cama.

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La verdad es que los hombres no tienen una muy buena reputación que digamos; que todos son infieles, rara vez demuestran su cariño, dejan de amar después de cierto tiempo y le tienen miedo al compromiso

Pero la verdad es que, cuando encuentran la persona adecuada, son capaces de amar con locura y hacer lo que sea para tener una vida con ella. Hoy te mostramos algunas señales que indican que él nunca dejará de amarte:

• Está comprometido: Estar ahí en los buenos momentos es fácil. Es en los problemas y momentos difíciles cuando tienes que estar al pendiente de su ausencia o, en su caso, de su compromiso contigo y la relación. Los verdaderos hombres no huyen de la verdadera pelea, así que pon mucha atención cuando las cosas se ponen difíciles.

• No evita los problemas: Como mencionamos anteriormente, un verdadero hombre no huye de una pelea, guarda sus sentimiento y explota en el mero momento. Si algo le molesta, te lo dirá de manera respetuosa y sin lastimarte.

• Pone atención a los detalles: Si vivió sólo, posiblemente no estaba al tanto de lo sucia que estaba su habitación o de los bichos que vivían en su cocina. Pero cuando lo visitabas, se ponía a limpiar ¡como loco! Es más, hasta tenía tu yogurt favorito en la nevera. Son ese tipo de detalles los que realmente te mantendrán a su lado y está dispuesto a llevarlos a cabo.

• Es listo y sabio: La verdadera medida de su intelecto no son sus conocimientos, sino su sabiduría. Puede ver las cosas desde otro punto de vista, darte buenos consejos y ponerse en tus zapatos. Con base en su experiencia, sabrá ser un buen hombre para ti.

• Quiere que te sientas bien contigo misma: Él piensa que eres hermosa, ¿por qué tú no te ves así? La verdad es que él no lo entiende y, aunque no podría nunca entenderlo por completo, tratará de que tu perspectiva sobre ti misma cambien.

• Se ríe de tus errores: Sabe que todos cometemos errores, y es capaz de no darle tanta importancia a los tuyos. Si hiciste algo que lo lastimó, pensará que no lo hiciste adrede. Aunque le duela, no te guardará rencor, no como las mujeres sabemos hacerlo.

• Hace de tus problemas los suyos: Si algo te molesta, también le molesta a él. Será el primero en tratar de buscarle una solución a tus problemas, no tanto porque dude que puedas hacerlo por tu cuenta, sino porque no te quiere ver infeliz ni preocupada.

• Se toma muy en serio sus problemas: Por otra parte, si él es el que termina lastimándote, sabe que metió la pata muy pero muy mal. La culpa estará ahí por semanas y, si verdaderamente es un buen hombre, se tragará su orgullo para disculparse.

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Esta práctica sexual permite compartir y estrechar, aún más, los lazos con la pareja

El Slow sex, traducido al español es sexo lento e invita a alargar el tiempo erótico, disfrutar del erotismo y compartir en pareja. Todos buen amante sabe que es más importante el camino recorrido que llegar a la meta, porque estos pasos previos garantizan el placer.

Hay parejas que expresan su insatisfacción y hasta rabia por las relaciones sexuales a las carreras o el llamado “rapidito”, para evitar estos disgustos las parejas actualmente optan por practicar el sexo lento, que puede durar entre 20 y 40 minutos. En este tiempo se incluye los juegos previos, la estimulación previa y el coito.

Mantener el control del ritmo en los juegos y la penetración es la clave para que el sexo lento se convierta en una experiencia placentera. Probar distintos juegos y posturas, siempre a un ritmo lento o moderado, debe ser la proridad.

Acompañado de una buena respiración podrán alargar el tiempo de placer y lograr un Slow sex cargado de sexualidad y placer.

Las claves del Slow sex sex según Walter Ghedin, médico psiquiatra y sexólogo:

• Mantener al sexo como una prioridad.

 
• Sexo no es genitalidad. El cuerpo tiene otras zonas erógenas preparadas para brindar placer.

 
• El encuentro sexual comienza fuera de la cama: pensamientos, fantasías, deseos, etc.

 
• Crear condiciones adecuadas que potencian las ganas: salidas, insinuaciones, llamados cariñosos o hot durante el día.

 
• Cuanto más nos alejemos de la penetración como meta mejor será la interacción con el otro y con las propias sensaciones.

Los juegos que puedes incluir en esta práctica pueden ir desde lo más simple como una cena romántica o una copa de vino, hasta caricias con plumas, juegos eróticos con velas o con cubos de hielo. Todas estas técnicas entran dentro de la práctica de sexo lento y garantizan ambos se conozcan mejor y lleguen al clímax más fácilmente.

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Para nosotras, la masturbación es algo que sólo mejora con la práctica… igual que el sexo

Dado que el placer comienza en el cerebro, no nos sorprende que necesites un poco de “ayuda” para empezar a tocarte. Muchas recurren al porno para iniciar, pero otras ni siquiera saben por dónde empezar. Si no puedes concentrarte lo suficiente, ponte unos audífonos para bloquear los sonidos del exterior o busca música erótica para excitarte. Si eres principiante y todavía no sabes qué te causa tanto placer, ¡experimenta!

Te traemos las formas de cómo excitarte (con o sin pareja):

• Usa tu imaginación: Las mujeres que fantasean durante el sexo, tienen más posibilidades de llegar al orgasmo, con o sin una pareja. Piensa en los momentos más excitantes de tu vida sexual o imagina uno desde cero para tener un escenario en mente. Piensa en el Chris Hemsworth, de la época medieval, en un oasis, ustedes dos solos, poca ropa, una mirada erótica, ya sabes lo que sigue.

• Crea el ambiente: Prende velas aromáticas, pon tu playlist favorito y tómate una ducha caliente. Desliza tus manos sobre tu cuerpo lentamente y no temas en saborear el momento. Te sorprenderá saber cómo los cambios sensoriales pueden incrementar tu excitación. Cuando salgas del baño, pon un poco de lubricante sobre tus senos y tócate sin vergüenza; tu cuerpo estará listo para disfrutar del momento.

• Usa lubricante: Toda mujer debe tener un lubricante de agua en su recámara ¡sin excepción! No solamente es bueno para tener sexo, también incrementará las sensaciones de la estimulación manual (o la de un juguete sexual). Además, te ayudará a acelerar el proceso y puedes llegar a tener orgasmos múltiples.

• Aprovecha la tecnología: Con tecnología nos referimos a notas de voz, fotos, vídeos y más. Mándale mensajes eróticos a tu pareja, háganse una llamada erótica o, si se atreven: ¡una videollamada! La clave está en experimentar y, por supuesto, aprovechar la tecnología cuidadosamente.

• Practica: Si ya te hartaste de la estimulación del clítoris, puedes buscar tu punto G. El punto es que nunca te aburras de conocer más de tu placer y sigas experimentando con técnicas, ritmos, juguetes, accesorios y más.

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No a todos les gusta tener relaciones sexuales con la luz encendida, pero es una oportunidad para explorarse y ver los gestos de cada uno

No se trata de encender cada lámpara de la casa u hotel, pero tener sexo con tu pareja y que la puedas ver es un punto que logrará mayor excitación, ambos podrán interpretar gestos y posturas que determinarán el nivel de placer que cada uno tiene.

De acuerdo con un estudio del área de disfunciones sexuales de la división de urología y ginecología del Hospital Durand, Argentina, uno de los problemas más comunes es que las mujeres no logran llegar al orgasmo y está determinado que si lo han conseguido con masturbación el problema es con los nexos hacia su pareja.

“Es muy frecuente ver mujeres que pierden todo el erotismo cuando tienen que practicar sexo oral o cuando tienen que mostrarse desnudas con la luz prendida”, afirma Adolfo Casabe, urólogo y miembro de la investigación.

Hoy te traemos los consejos para tener sexo a plena luz de Debby Herbenick, psicóloga de la Indiana University y autora de “Sex Made Easy”:

1.- El cuerpo: No creas en estereotipos. Tu pareja de seguro te ha visto sin ropa más de una vez y sabe cómo eres. No tienes por qué estar cohibida, no hagas comparaciones con los cuerpos de las modelos o actrices, no existen los cuerpos prefectos. Seguramente tu pareja te dirá que le gusta hacer el amor con la luz prendida, porque los hombres son muy visuales y es la forma de alcanzar altos niveles de excitación.

2.- Concentración: Herbenick asegura que la mente es el órgano sexual más grande. Concentrarse en la pareja, sus gestos, movimientos y caricias garantizan que llegarán al clímax de forma sencilla y placentera.

3.- Ambiente: el lograr un ambiente lleno de erotismo es importante. Si el encender la luz no es lo que más te gusta prueba con velas, de seguro te sentirás más cómoda. Prepara la habitación con velas aromáticas y crea un ambiente idóneo para el encuentro íntimo.

4.- Lencería: El tener la ropa interior adecuada puede ayudarte a ganar confianza. Puedes escoger entre varios modelos, pero el encaje es una buena opción que resulta sexy y reduce algunos centímetros, lo que te ayudará a esconder lo que deseas y que te genera tanta ansiedad.
Atrévete a tener sexo a plena luz y recuerda que tu pareja está contigo porque le gustas tal cual eres ¡Adiós a los complejos!

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No importa si estás sexualmente activa o eres virgen, nunca es muy temprano (ni muy tarde) de aprender un poco más sobre el sexo

Por suerte, el sitio americano “Your Tango”, ha creado una lista de todas las cosas que los hombres desearían que tú supieras sobre esta excitante y placentera actividad.

• Haz tu parte: Sabemos que ellos lo disfrutan más, pero es importante que tú también hagas algo por tu placer. En primera porque no puedes esperar a que él se encargue de tu orgasmo, y en segunda porque el sexo es trabajo de dos.

• Toma el control: ¿Quién dice que el hombre debe tomar las riendas de la cama? De hecho, es más sexy cuando la mujer toma el control y no le pide permiso a nadie. Una chica que no le tiene miedo a su propio placer y está segura de sí misma, es lo más sensual del mundo.

• No es súper necesario que te depiles: No importa si hay un poco de vello ahí abajo, a muchos hombres ni siquiera les importa. Claro, hay sus excepciones, pero en la mayoría de los casos, ellos están más interesados en el sexo, que en tu cuerpo.

• Comunícate: Así como nosotras no somos adivinas, ellos no leen la mente, así que, ¿cómo planeas que sepa que está haciendo mal las cosas? ¡Díselo! Así sabrán lo que quieres, cómo lo quieres y cuándo dártelo.

• También les gusta el juego previo: No eres la única a la que le gusta ser seducida. Aunque no lo parezca, ellos también le ven su encanto al juego previo. Los besos, las caricias, toqueteos ¡les encanta!

• No esperes a que él inicie: Todos saben que nosotras tenemos problemas con llegar al orgasmo y disfrutar del sexo, es por eso que sería más sexy que, por primera vez, seas tú la que inicie el acto. No nos referimos a tumbarlo en la cama y hacerle el amor, sino a besarlo, tocarlo sensualmente y decirle lo que quieres.

• No siempre querrá sexo: Los hombres también son humanos y, aunque creamos que es imposible, habrán ocasiones en las que no estará de humor para tener sexo. Cual sea la razón, es completamente normal. Sí, suena raro, pero suele pasar.

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