“El nivel de popularidad del presidente Maduro ha caído. Después de su punto máximo, tras el Dakazo, cuando tenía 56 % de popularidad, ésta es hoy de 30 puntos menos, y el descenso es atribuido a la percepción de crisis económica. 84, 3 % de la población coincide en que el país está mal o muy mal. No todos necesariamente creen que el Gobierno es el gran culpable de la crisis, no es verdad que todos crean que Maduro es el culpable, pero lo que sí es verdad es que la mayoría siente que no la resuelve, y eso afecta su conducción, y por supuesto es una variable delicada para el Gobierno en términos electorales”.
Así lo señala Luis Vicente León, presidente de Datanalisis, quien estima que ante esta caída en la popularidad del régimen, la oposición debe incentivar a la población a sufragar, especialmente, a aquella aún no convencida de la idea de acudir a las urnas de votación.
El voto castigo: necesario, pero no suficiente
“El voto castigo siempre es muy importante, por supuesto, para cualquier oposición. El voto castigo es un beneficio al que mucha gente en la oposición en cualquier parte del mundo encuentra, demostrando la incapacidad del Gobierno para capitalizar el descontento de la población. Pero no es suficiente. Hay varios elementos que son muy importantes entender: el primero, la oposición, sin duda, hoy como concepto general es mayoría. ¿A qué me refiero como concepto general? Me refiero a que la mayoría de la población está dispuesta a votar por la oposición o por una oposición al Gobierno”, destaca León.
“Pero eso no se traduce con una conexión necesariamente con un líder particular, con un partido particular o con la oposición. Se traduce en un concepto abstracto: ‘yo quisiera votar por un cambio’. Eso es lo que te dice la mayoría. Yo quisiera un cambio, quisiera votar por ese cambio. Ahora, esa búsqueda de cambio, tiene algunos pedazos de castigo: que voten por cualquier persona, propuesta, partido o lista solo para castigar al gobierno que rechazan. Sin embargo, esos grupos no son mayoría”, sostiene el presidente de Datanalisis.
La elección se gana convenciendo a los independientes
“La elección se tiene que ganar convenciendo a independientes, que están descontentos con el Gobierno y que tiene una segunda opción que es el real competidor de la oposición: la abstención, porque la abstención es la alternativa de los independientes”, destaca León.
“A diferencia de las elecciones con Chávez, Chávez era el adversario claro en los independientes, porque los independientes podían ser convencidos por Chávez. Es difícil imaginarse al presidente Maduro convenciendo a los independientes. Primero, porque no tiene el carisma de Chávez, y segundo porque está en el medio de una crisis muy severa y lo usual en la política es que a los gobiernos en crisis severa no les sea fácil la conexión con los independientes”, argumenta el analista.
La abstención se combate con propuestas de cambio
Para el presidente de la firma encuestadora, la abstención se contrarresta con propuestas, con una historia nueva, contada desde la oposición: “Tu riesgo no es que vayan a votar por Maduro o por el PSUV, tu riesgo es que no voten. Y el voto castigo no es suficientemente motivante para los independientes votar, necesitan algo más”.
“¿Y qué es ese algo más? Necesitan, sin duda, una propuesta, generar sueños, esperanzas concretas, liderazgos que los conecten, ofertas que los enamoren, que los hagan soñar que es posible cambiar en positivo. Y eso requiere contar una historia y la historia tienes que contarla tú si quieres conectar con esa masa”, señala Luis Vicente León.
Como en dominó: partida ganada no se tranca
El presidente de Datanalisis estima que el Gobierno ha tratado de tentar a la oposición a salir del camino electoral, provocándola con medidas como las inhabilitaciones a los dirigentes. La recomendación del analista para el sector opositor, es que éste se mantenerse en el camino de las urnas de votación, emulando casos como el de Suráfrica, cuando, en condiciones parciales desfavorables, se impuso Nelson Mandela en las elecciones presidenciales de 1994, gracias a una mayoría aplastante de votos.
“¿Qué tiene que hacer la oposición frente a las inhabilitaciones actuales? Las personas inhabilitadas tienen todo el derecho a defenderse, tienen todo el derecho a acusar la violación a su derecho, a denunciar la violación a la democracia, porque tienen razón”, señala.
“En cuanto a la estrategia, salir del juego electoral, sería un error. Porque es exactamente lo que el Gobierno quiere que tú hagas. Esta es la primera elección, donde podrías tener una opción concreta, con 17 puntos arriba en el peor escenario. No puedes trancar un juego que tú estás ganando, incluso si esas condiciones electorales son evidentemente sesgadas”, destaca el presidente de Datanalisis.
“El tema aquí es aprender de la experiencia de Suráfrica, que fue a elecciones en condiciones desventajosas, pero porque era una mayoría contundente jamás echó para atrás. Las pasadas elecciones de los municipios San Diego y San Cristóbal, ¿qué era?, ¿legal?, ¿que hubieran metido presos a esos alcaldes? No, era obviamente una manipulación política. Pero tú fuiste a una elección y ganaste. Entonces, ¿qué ganas impidiendo, dividiendo, fracturando, manipulando a tus propios grupos? Eso es perder lo único que puedes ganar, que son los votos. El Gobierno tiene las armas, el poder, las instituciones, el control de medios, los militares, él tiene todo. Lo que no tiene son votos suficientes para ganar. Entonces, ¿dónde vas a dar la batalla?, ¿en dónde él es fuerte?, ¿o en dónde eres fuerte tú? Protesta, denuncia, pero en paralelo vota, ten los candidatos, inscribe tus litas, porque la batalla más importante se va a dar en las máquinas de votación”, concluye León.
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