Los edulcorantes bajos en calorías o sin calorías pueden jugar un papel destacado en la prevención del sobrepeso y su consumo no está relacionado con la aparición de enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes o enfermedades respiratorias crónicas (enfermedades no transmisibles), según recientes estudios publicados en la revista ‘Nutrición hospitalaria’ y en ‘Obesity’.
El consumo de edulcorantes hipocalóricos o sin calorías pueden contribuir en la prevención del sobrepeso, según revela el estudio «Edulcorantes bajos en o sin calorías: mitos y realidades» (Riobó, P.; Sierra, R.; Soldo, J.) recientemente publicado en la revista ‘Nutrición Hospitalaria’. Según explica una de las autoras del informe, la Dra. Pilar Riobó, del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, los alimentos o bebidas donde el azúcar ha sido sustituido por edulcorantes bajos o sin calorías pueden ayudar a mantener un peso saludable y también a reducirlo, aunque aclara que debe cumplirse una máxima para ello: «Siempre y cuando quien los consume tenga un estilo de vida saludable, realice alguna actividad física y, lo más importante, no tome un exceso de calorías o calorías adicionales como compensación».
Un adulto puede prevenir el aumento de peso reduciendo 100 kilocalorías en su ingesta diaria, según la evidencia científica. En este sentido, la experta asegura que los edulcorantes pueden ser una buena herramienta para conseguir esa meta pero solo si después no se intenta compensar ese consumo menor de calorías con un consumo extra. «Esta compensanción se puede producir porque el organismo espera la ingesta de más calorías o porque simplemente piensa que puede consumir sin ningún efecto negativo alimentos o bebidas ricos en azúcar dado que anteriormente consumió alimentos con edulcorantes hipocalóricos o sin calorías», revela Riobó.
La contribución de los edulcorantes en el control del peso también fue objeto de estudio del artículo ‘The Effects of Water and Non-Nutritive Sweetened Beverages on Weight During a 12-week Weight Loss Treatment Program’, publicado en la revista ‘Obesity’ (Peter, JC; Wyatt, HR. y Foster, GD.). En esta investigación se hizo una comparación entre las bebidas con edulcorantes y el agua como apoyo en un programa de pérdida de peso. El estudio indicó que, tras 12 semanas de análisis, la reducción de peso fue mayor en el grupo que consumía bebidas con edulcorantes bajos o sin calorías. Asimismo, reveló que en este grupo también se consiguió reducir la sensación subjetiva de hambre relacionada con la ansiedad.
La Dra. Riobó aclara también con el estudio cuestiones relacionadas con recientes polémicas en torno al efecto de los edulcorantes en el organismo asegurando que los que actualmente hay en el mercado son seguros y no existe relación epidemiológica con la aparición de efermedades no transmisibles (cardiovasculares, cáncer, enfermedades respiratorias crónicas y la diabetes). «Los edulcorantes bajos o sin calorías se llevan utilizando de forma segura desde hace más de un siglo y están sujetos a estrictos controles», asegura.
Fuente: Mujer Hoy