Archive for septiembre 29th, 2014

Ministra de Salud confirma que hay 2 mil casos de chikungunya

Posted on: septiembre 29th, 2014 by Laura Espinoza No Comments

La ministra de Salud, Nancy Pérez, informó -este domingo- que en el país hay 2 mil casos de fiebre chikungunya diagnosticados, aunque -según dijo- la expansión epidemiológica permite pensar que en realidad son muchos más. En cuanto al dengue, señaló que hay acumulados 40 mil casos.

 

Tales declaraciones las ofreció durante el lanzamiento del Plan Nacional contra el dengue y la fiebre chikungunya, en el que aseveró que para enfrentar ambos virus y, por órdenes del presidente Nicolás Maduro, van a reforzar el papel del Estado en todos sus niveles (nacional, regional y municipal) para abordar en primer lugar las zonas donde hay más casos.

 

“Hay 950.000 casos de dengue en toda América y 715.000 casos de chikungunya”, aseguró la titular de la cartera de salud, quien con respecto al Plan que inició ayer señaló que “hoy tenemos 120 municipios que hoy se van a abordar con 230 parroquias que también están ya desplegadas en el trabajo en todo el territorio nacional, pero hoy comenzamos con los municipios y localidades priorizadas”, detalló Pérez desde la parroquia El Valle en Caracas.

 

Aseveró que esta primera fase del plan se extenderá hasta el 26 de octubre y llamó a la población a eliminar los criaderos de mosquitos. Explicó que hasta diciembre esperan visitar al menos 180.000 hogares para efectuar labores de fumigación, abatización y concienciación para acabar con los criaderos de zancudos.

 

De igual forma, la Ministra pidió a los ciudadanos que no se automediquen y que, en caso de presentar algún síntoma febril, acudan a los Cetros de Diagnóstico Integral. (Con información de El Nacional)

 

Notitarde

Hasta en Bs. 20 venden una pastilla de Acetaminofén

Posted on: septiembre 29th, 2014 by Laura Espinoza No Comments

Hasta 20 bolívares puede costar una tableta de Acetaminofén o Ibuprofeno en los buhoneros que están ubicados frente al área de Emergencia del Hospital “Dr. Ángel Larralde”, en el municipio Naguanagua.

 

El precio de cada gragea varía dependiendo de la cantidad de miligramos y si se trata de una marca comercial o genérica. “Hay Brugesic (cuyo principio activo es Ibuprofeno) de 400 (miligramos) a 10 bolívares y el de 600 (miligramos) cuesta 20. El Tachipirín también vale 20 bolívares y el Acetaminofén normal o Atamel en 10”, le responde una vendedora informal a un cliente que se acerca a preguntar por las medicinas.

 

Con lo que cuesta una pastilla detallada de estos medicamentos en un tarantín improvisado, se pueden comprar entre dos y cuatro cajas, de 10 tabletas cada una, en cualquier farmacia del territorio nacional. “La cajita no pasa de 5 bolívares, pero tiene tiempo que no llega”, informó la regente de una reconocida cadena de farmacias del país.

 

Sin embargo, ante la escasez de analgésicos y antipiréticos que se presenta en estos días, algunos usuarios se han visto en la necesidad de pagar un elevado sobreprecio por estos productos para aliviar los síntomas de virus como dengue y fiebre chikungunya que han afectado a un gran número de la población venezolana.

 

En estos kioscos también se pueden encontrar recolectores de orina y heces, agujas para tomar vías intravenosas, toallas sanitarias y otros artículos de higiene personal que siguen desaparecidos de los anaqueles a pesar de los nuevos precios establecidos por la Superintendencia de Precios Justos (Sundde).

 

Imagen referencial

Ysamar S. Galíndez C

Con información de Notitarde

No se consigue medicamentos contra dengue y la chikungunya

Posted on: septiembre 29th, 2014 by Laura Espinoza No Comments

Angustia y desesperanza se refleja en el rostro de los pacientes con posibles fiebres chikungunya o dengue, cuando llegan a los centros de salud y se dan cuenta que hay un considerable número de personas afectadas por la misma enfermedad, por lo que no pueden ser atendidos con la premura que esperan.

 

Para quienes tienen una fiebre a millón y dolores en la mayoría de las articulaciones, les resulta cuesta arriba tener que esperar más de una hora para ser atendidos, pero no les queda otra opción que aceptarlo.

 

La situación no es distinta en centros médicos privados como en la red pública ambulatoria, porque los casos de posible chikungunya abundan en distintas zonas del estado. Las recomendaciones médicas son las mismas, acetaminofén, reposo, vitaminas y mucho líquido, con el agravante de que algunos de estos medicamentos no se consiguen en las farmacias.

 

BEATRIZ ROJAS/Z.D.A.M

 

El Carabobeño

Los niños también sufren las consecuencias de la escasez

Posted on: septiembre 29th, 2014 by Laura Espinoza No Comments

Al preguntar en cualquier establecimiento comercial o farmacias de Valencia por: Jarabe para la tos, medicamentos para la fiebre, antialérgicos, compotas, leche con prebióticos y vitaminas; se escuchan dos palabras que a muchos les doblega el ánimo: “No Hay”.

 

Las toallitas húmedas, pañales y productos de higiene personal para bebés también forman parte del repertorio que escasea. Abuelitas, padres y madres día a día recorren más de cinco establecimientos en busca de estos productos para sus hijos.

 

Algunos no pueden hacerlo durante la semana por el horario de trabajo, mientras que otros hacen largas colas por más de dos horas para adquirir algunos de estos rubros cuando llegan a algún comercio. Otros padres por necesidad prefieren pagar el triple de lo que cuesta el producto a los revendedores que colocan sus tarantines en las aceras del centro de Valencia.

 

Los remedios para la tos a base de sábila y jengibre son los únicos que se encuentran en los anaqueles de las farmacias, pero ninguno específica que sea pediátrico.

 

La leche con Prebio Uno, también está ausente en los supermercados. A falta de este componente para la preparación de los tradicionales teteros, algunas madres optan por usar leche líquida descremada que es la única que se consigue en algunos comercios y panaderías.

 

Como un viacrucis considera la situación Yelitza Montero, quien asegura haber recorrido más de 10 locales con la esperanza de conseguir los productos y alimentos para su bebé de 11 meses, sin obtener respuesta positiva.

 

 Leer información completa en El Carabobeño

Editorial del Tal Cual: Diálogo, ¿para qué?

Posted on: septiembre 29th, 2014 by Laura Espinoza No Comments

C uando uno trata de encontrar respuestas para esta pregunta se topa con grandes y solemnes palabras como reconciliación nacional, paz duradera, recomposición institucional, refacción de la economía y despegue del desarrollo… Qué más se puede pedir.

 

Hasta el santo padre que vive en Roma clama por la entente. Y el presidente Obama. Y el nuevo presidente de Unasur, el del pesado pasado. Entre otros representantes de espíritus y poderes. Nosotros mismos, en el pasado, hemos abogado por algún tipo de acercamiento.

 

A estas alturas a cada rato uno encuentra gestos (Simonovis, por ejemplo) o explícitas y múltiples declaraciones de las dos partes que invocan ese encuentro, o mutuos reproches por haberse roto aquel primer acercamiento. Nadie lo da por muerto sino por estar refrigerado.

 

Ahora bien, ya que es tema a la orden del día, al menos larvadamente, uno, opositor, debería preguntarse seriamente para qué sirve ese dialogo, cómo se engulle. Y si esas grandes palabras a las que hemos aludido no son precisamente demasiado grandes, es decir, abstractas, ideales, papales, platónicas.

 

Y lo que puede suceder de darse este sería más terrenal, confuso y poco transparente.

 

O definitivamente maloliente y pérfido.

 

Nosotros nos reduciremos aquí a dos preguntas que nos parecen claves. Una primera, algo tosca pero que obliga a darle respuesta: ¿Si estos eventuales compañeros de mesa, a punta de corrupción majestuosa, ineptitud comprobada cotidiana y reiterada y evidentes locuras ideológicas han devastado literalmente este país, al que ya no le queda hueso sano, ahora nosotros, tanto tiempo humillados y ofendidos, vamos a ayudar a cargar la cruz de la derrota y el escarnio y hasta bajar al sepulcro? En principio habría que negarse, tildar el asunto de masoquismo. No obstante aquí podría objetarse, con palabras sonoras, no dejar hundir el país, evitar eventuales derramamientos de sangre, alcanzar un nivel de relativa normalidad económica y, también, de decencia institucional y democrática como para ganar el poder en algún momento en un país más aliviadito y menos enguerrillado, que ya no sería el barranco de Chávez donde todos nos hundiríamos. Supongamos esa segunda opción para introducir la segunda pregunta, ¿será posible esa recuperación de un mejor tiempo, aunque sea incipiente, para hacer una política más racional con esos caballeros que tenemos enfrente? A pesar de algunos signos, que los hay, es tal el peso de la estructura mental chavista que es muy razonable dudar. Son demasiados los malos hábitos adquiridos por estos: los del atropello y el abuso; de profanación de la democracia, la Constitución y sus instituciones fundamentales; de temor al castigo por los pecados mortales cometidos y que se siguen cometiendo; de opereta revolucionaria; de cubanos carroñeros; de pantomimas ideológicas que a uno le cuesta creer que algo así como un poco de lucidez y sensatez podría habitar esos cerebros.

 

Basta ver al heredero. Basta ver la actitud irresponsable ante la crisis. Basta oír la interminable habladera de paja revolucionarista cada vez más grotesca por irreal. Basta ver cómo crece sin mesura ni recato la represión brutal o el ahogamiento de la libre expresión.

 

No queremos dar una respuesta definitiva. No la tenemos seguramente. Pero esas son cuestiones que hay que dilucidar para ver si seguimos ese camino u otro más empinado.

 

Fernando Rodríguez

 Editorial del Tal Cual