El «profeta de la América», Reinaldo Dos Santos, explica en su blog personal que el caso de Venezuela «es digno de estudio» y escribió que le parece «patético» cómo voces del Gobierno «mienten descaradamente» con «magnicidios», “planes desestabilizadores y múltiples teorías de conspiración.
Afirma que el «poderío del desastre» ha convertido a Venezuela en una nación de escasez y corrupción a pesar de ser uno de los países más ricos del mundo. Igualmente, sostiene que lejos de promover el bienestar y progreso integral y social, transforman a Venezuela en un país de “sapos”.
«Es el escenario sombrío donde el ser humano le pierde la fe a su propia especie, a sus semejantes; donde nadie confía ya en nadie. Donde todos serán vistos como enemigos porque cabe la posibilidad que sean delatores», escribe.
Dos Santos plantea que estos personajes protagónicos del poder «parecen desconocer la historia o caen en la incredulidad de pensar que ésta no los alcanzará, cuando en realidad a lo largo del tiempo se ha demostrado que este tipo de situaciones, inevitablemente, ha alcanzado a todos los dictadores».
«La tiranía sanguinaria, abusiva y asesina de estudiantes de Venezuela, se desmoronará como lo hicieron todas (Gadaffi, Hitler, Pinochet, Mussolini y más atrás) (…) Al destino de Nicolás Maduro sólo le quedan dos caminos posibles. Caer de forma violenta en manos de uno de los suyos. O fríos y solitarios días en una celda del tribunal internacional de la Haya. Julio/Agosto llegarán como el inicio del fin de una larga pesadilla, traerán consigo la esperanza. El despertar de un pueblo oprimido y la libertad de Leopoldo López se ven cada día más cerca. Unificación y hermandad se harán necesarias para levantar a un pueblo de entre los escombros. Las piedras que hoy fueron arrojadas en las calles, mañana serán usadas para la construcción de la fortaleza de un pueblo. La piedra del camino, la resistente piedra, la piedra que da pelea, será también la misma piedra libertaria», dice el profeta en su blog que compartió con sus seguidores.
Por El Diario de Caracas