Este primero de mayo se llevó a cabo el «Gran Encuentro Nacional de los Venezolanos y Luso-Venezolanos en Fátima», Santuario de la patrona de Portugal, donde se congregaron un poco más de un centenar de personas provenientes de diferentes regiones de este país europeo, como Espinho, Aveiro, Caldas da Rainha, Leiria, Lisboa, entre otras.
Citando el pensamiento del Libertador, Simón Bolívar: «No importa donde se nace, ni donde se muere; sino donde se lucha», Manuel Rodrigues Da Corte, uno de los organizadores de la jornada, expuso que son muchos los que, aunque no están en su patria, quieren contribuir de alguna manera en la lucha de los estudiantes y de quienes quieren devolverle la libertad a Venezuela.
«Cumplimos con los objetivos planteados, no porque compareció un número considerable de personas, sino porque vimos aquí lo que realmente cuenta: la fe y el amor que tenemos por Venezuela», expresó este «ciudadano del mundo», tal como se autodenominó, pues nació en el país suramericano, vive en Portugal y trabaja en España.
«Estoy aquí por mi país, no podemos dejar que los estudiantes, que son quienes a través de sus protestas pacíficas, luchan por la libertad, bajen los brazos», acotó al indicar que es por esa razón que pidieron «a nuestra señora de Fátima» fuerza para ellos, así como para los presos políticos y todos aquellos que sufren por la inseguridad, el desabastecimiento, la corrupción, la crisis económica y social, entre otras.
La jornada se inició con el rezo del «Santo Rosario» a los pies de la Estatua del Papa Juan Pablo II, y posteriormente, a las cuatro y media de la tarde se celebró la Santa Misa. «La gente estaba muy emocionada», indicó Víctor Ibañez, otro de los organizadores del encuentro. Durante la celebración, fue entregado al sacerdote que la presidía, un cuadro de la Virgen de Coromoto y un rosario, cuyas cuentas eran de los colores de la Bandera Nacional.
Algunas de las personas que se encontraban en el lugar se unieron a las plegarias de los venezolanos. «Nos acompañaron ocho brasileros», añadió Ibañez.
«Creo que aquí (Portugal) no sabemos bien lo que está pasando en Venezuela», expresó el fotógrafo del Diario de Aveiro, Ricardo Carvalhal, al agregar que la información está siendo «muy filtrada». Este reportero gráfico vivió poco tiempo en el país caribeño, pero aún tiene familia allá.
Muchos de los asistentes se trasladaron hasta el Santuario, en el municipio de Ourém, en autobús, y en el trayecto compartieron diversos platos y bebidas propios de Venezuela como chicha, empanadas, bolitas de queso, pan de jamón, yuca, entre otras.
Con información de Elisabeth De Ornelas
Foto (Cortesía Ricardo Carvalhal)
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