A juicio del presidente de Fedecámaras, Jorge Roig, en Venezuela se viven tres agendas diferentes, y es preciso que los estudiantes se sumen al diálogo, ya que no hay conflictos que puedan arreglarse sin conversaciones de por medio.

Así lo aseguró ayer en la sede de la Cámara de Industriales de Barquisimeto, donde conversó sobre la situación económica, política y social por la cual atraviesa el país.

Roig ofreció su opinión sobre la ofensiva económica planteada por el Gobierno y destacó que el término empleado debe ser «incentivo”.

«Desde hace dos meses estamos trabajando en una mesa técnica en Miraflores. Hemos tenido algunos logros, como un sistema alternativo de divisas para las empresas, aunque el Sicad II aún se encuentre en una fase incipiente, con detalles por reconocer”, dijo el presidente de Fedecámaras.

Destacó un avance en las conversaciones al reconocer el Gobierno la necesidad de pagar el 30% de la deuda de divisas con los proveedores internacionales.

En el encuentro, Roig afirmó además que la Ley de Costos y Precios Justos atenta contra el empresario. «Hicimos una demanda ante el Tribunal Supremo de Justicia, porque además consideramos que afecta al consumidor. Esta Ley es uno de los puntos que no pudimos acordar con el Gobierno y por eso acudimos al TSJ como único camino constitucional”.

Sobre las conversaciones con el Gobierno, el presidente de Fedecámaras también destacó que la mesa de diálogo permitió reconocer estructuras de costos retenidas hace tres años. No se trata entonces de un incremento, sino de un reconocimiento en los gastos de producción, que se encuentran por encima del precio final de productos vendidos a pérdida.

Caída de la industria

Jorge Roig afirmó que en el país hace falta incentivo local y que en Venezuela hay 4.300 empresas menos en los últimos diez años.

Es por ello que el incentivo se ha vuelto un reto en el país.

Tales declaraciones fueron dadas en ocasión de la instalación del programa de desarrollo Aprendiendo a emprender, que busca la creación de pequeñas y medianas empresas.

Son 36 participantes en el programa que inició en Lara para luego extenderse al resto del país.

En visita a EL IMPULSO

En horas de la tarde de este lunes, Jorge Roig realizó una visita institucional a EL IMPULSO, donde conversó con el arquitecto Juan Manuel Carmona, director de esta casa editorial.

Tras estrechar sus manos, Roig expresó sus palabras de solidaridad con la empresa cuya circulación se encuentra amenazada por la escasez de papel prensa.

«Es necesaria una presión masiva de los medios de comunicación. La situación de los periódicos tiene que ser un punto de discusión en la agenda empresarial y política del país”, enfatizó el presidente de Fedecámaras, quien estuvo acompañado de Alberto Gámez, presidente de Fedecámaras-Lara.

La situación tiene en expectativa a los ciudadanos quienes, a juicio de Roig, esperan que se reconozca la realidad financiera del país.

«La tragedia es una herencia del fallecido presidente Chávez y es necesario revertir el entuerto, porque el diálogo ha avanzado en materia económica, pero no en el ámbito político ni social”, contó Roig, quien se confesó como un «pesimista esperanzado” y convencido de que es necesario sentarse a corregir y dialogar. Sin embargo, precisó que la mesa de diálogo no ha dado el resultado suficiente, por lo cual infiere que «no habrá mejora económica”.

Destacó que tras las reuniones con el Estado, Fedecámaras fue tomada en cuenta para la consulta sobre el incremento salarial, y recordó que los trabajadores esperan un aumento general, aunque no sea el plan específico del Gobierno. A las esperanzas de los ciudadanos se suma la necesidad de solucionar el déficit de medicinas y alimentos.

Asamblea anual

Jorge Roig aprovechó la ocasión para invitar a EL IMPULSO a la Asamblea Anual de Fedecámaras, que se instalará el próximo 27 de junio en el Hotel Las Brisas de Paraguaná.

Aunque el presidente Nicolás Maduro está invitado a la instalación, no está confirmada su presencia. Se espera además una ponencia de Lorenzo Mendoza.

El Impulso

Alba Arráez

Tres mesas económicas se inauguraron este jueves. El ministro Rafael Ramírez, vicepresidente del área económica, encabezó la de Maturín; el vicepresidente ejecutivo Jorge Arreaza la de Zulia, y el ministro de Industria, José Cabello, la de Aragua.

Ramírez amplió la información acerca de que el Fonden y el Fondo Chino dispondrán de una cantidad -aún no definida- para la inversión en el sector privado. Aclaró que el Gobierno buscará vías alternas a los mecanismos habituales de asignación de divisas, como Cencoex. “Así como hacemos con los grandes proyectos estructurales, tendremos un fondo para que, a través de nuestra banca pública, se puedan establecer préstamos en divisas para apuntalar la parte productiva”, anunció.

También habrá un fondo en bolívares. “Se trata de organizar mejor las carteras de la banca y utilizar un fondo especial para el sector privado y soportar la ofensiva económica”.

El ministro agregó que “las metas serán priorizar el incremento de la producción nacional, el abastecimiento y el control de la inflación”.

Dijo que una de las metas es fomentar la exportación de productos no petroleros. “Seguiremos importando, pero en forma más armonizada con la producción nacional (…)”.

Ramírez puso énfasis en que “los planes de explotación y desarrollo de Pdvsa están en proceso, pero la meta está también en potenciar la producción de otros rubros, tanto para el consumo interno como para exportar. El país consume $36.000 millones y desde hace años el sector privado no trae divisas al país (…). La exportación es un reto”, destacó.

Últimas Noticias

Fabiana Culshaw 

El presidente de Fedeindustria, Miguel Pérez Abad, dijo que en la actualidad en el país existe un modelo rentista socialista y que los industriales apuestan es a un modelo productivo socialista.

Sostuvo que la manera de lograrlo es con la inclusión de todas las fuerzas productivas del país. «Lo que Carlos Marx planteó como la Rebelión de las fuerzas productivas, es el pueblo participando en el hecho productivo. Hay que incorporar a las empresas de capital privado con una nueva visión, que trascienda el aspecto puntual del enriquecimiento individual por un sistema de prosperidad».

«Las empresas son fundamentales para abastecer al país de cosas útiles y tienen una responsabilidad social más allá de lo que conocemos como dar aportes a escuelas o a un equipo deportivo, no, se trata de producir más y mejor, estar en armonía del ambiente con amplia participación de los trabajadores en la dirección y diseño de la política que promueve la empresa», sostuvo Abad en entrevista con Globovisión.

Insistió en que no se puede construir un modelo de prosperidad con el grueso de un sector del país excluido de la riqueza nacional. La Ley Orgánico de los Trabajadores no debe ser un instrumento para cargar a las empresas.

Sobre el diálogo económico indicó que el Gobierno en este momento está dando «un mensaje contundente» y que es responsabilidad de los empresarios tomar los encuentros con el Gobierno como un espacio para poder debatir «los elementos que obstaculizan» la producción en el país: «estamos hablando de la burocracia, de las operaciones en los puertos, asignaciones de divisas más quirúrgicas y que vayan a los sectores de la producción fundamentalmente».

Para Pérez Abad se deben asumir para corregir las fallas estructurales en la economía nacional, como por ejemplo que los puertos estén más para importar que para exportar. «Desde ese reconocimiento podemos construir las soluciones, las exportaciones para Venezuela como para cualquier país son fundamentales, hay que aumentar las capacidades de colocar productos en los mercados internacionales».

«En la comisión presidencial del Mercosur lo que hemos planteado es que entre el 5 y el 10% de lo que producen las empresas sean colocados en este mercado para ir entrenando», acotó el presidente de Fedeindustrias.

Considera que el Sicad II es un estímulo para los exportadores. «Habíamos identificados con los exportadores del país es que la tasa de cambio que se utilizaba no hacía competitivos los productos nacionales, así que este es el primer estímulo».

Dijo que en el diálogo también se está abordando la carencia de materias primas e insumos para la producción y luego la exportación.

Se mostró a favor del ajuste de precios que se está llevando a cabo entre empresarios y Gobierno. «Hay que ir armonizando la economía nacional, había que sincerar la tasa de cambio, a nadie le gusta que los precios varíen pero el ajuste de precios es por consenso. El país tendrá año y medio de ajustes pero estamos seguros que el restablecimiento del equilibrio macro y microeconómico redundará en beneficios para el país, la preservación del empleo y las inversiones».

El Universal

En etapa crítica han entrado las empresas que fabrican y comercializan equipos, repuestos e insumos, incluyendo gases refrigerantes, así como aquellas que proveen servicios de mantenimiento de la cadena del frío al no contar con insumos y partes, tanto nacionales como importados; lo cual podría impactar la conservación de alimentos y medicinas, así como el funcionamiento de clínicas y hospitales.

El alerta lo formula la Cámara Venezolana de Ventilación, Aire Acondicionado, Refrigeración y Afines (Venacor). Señalan que las salas quirúrgicas y los medicamentos que requieren refrigeración se están viendo afectados al no contar con equipos y repuestos que les proveen las empresas del sector, señala nota emanada de la Cámara.

Para normalizar la situación, Venacor propone a Cencoex: 1. Cancelación de la deuda pendiente. 2. Agilización de los Códigos de Reembolso para las operaciones Aladi que están aprobadas por la banca nacional. 3. Fluidez en la aprobación de Certificados de No Producción (CNP). 4. Además de mantener al sector en Cadivi, convocarlo a las subastas del Sicad 1. 5. Establecimiento de una Mesa Técnica de la Cadena de Frío.

El Impulso

Juan B. Salas