Ochenta policías y bomberos de Nueva York retirados fueron acusados este martes de fraude masivo a la seguridad social, tras fingir incapacidad por sufrir traumas como consecuencia del ataque a las Torres Gemelas el 11-S, según hizo público el fiscal del distrito de Manhattan, Cyrus R. Vance Jr.
Durante años, los acusados hicieron falsos reclamos de discapacidad mental que costaron cientos de millones de dólares a los contribuyentes federales, informó una nota de la Fiscalía del condado de Nueva York.
Los acusados supuestamente recibieron entre 30.000 y 50.000 dólares al año bajo el pretexto de que estaban completamente incapacitados por trastornos psiquiátricos graves, como estrés postraumático, ansiedad o depresión causadas por sus labores en los atentados contra el World Trade Center del 11 de septiembre de 2001.
Sin embargo, desde sus cuentas de Facebook, y otras páginas webs, los policías y bomberos enseñaban fotografías en las que paseaban en jet ski, pescaban en Costa Rica, montaban a horcajadas en una motocicleta o mostraban sus trabajos de pilotos de helicóptero o instructores de artes marciales.
El comisionado del Departamento de Policía de Nueva York, William J. Bratton, explicó que los policías retirados que han sido acusados en este caso «deshonraron» a las personas que verdaderamente padecieron el 11-S al «explotar» su implicación en este «trágico día» para su «beneficio personal».
La formulación de cargos afirma que los organizadores de esta trama dirigieron a cientos de solicitantes al Seguro de Incapacidad de la Seguridad Social mintiendo sobre sus condiciones psiquiátricas y fingiendo ciertos síntomas con el propósito de obtener beneficios a los que no tenían derecho.
Según los fiscales, los funcionarios fueron entrenados para aparecer despeinados y desorientados en las entrevistas en las que los médicos evaluaron las solicitudes de discapacidad mental y su incapacidad para trabajar.
Vance Jr. acusó a 106 personas, de las cuales 4 están señaladas de ejecutar el plan.
En el grupo que organizó el fraude se incluye a una abogada de 83 años que trabajó como agente del FBI y fiscal, un consultor de pensiones de 89 años y un empleado público de 61 años que representa a los detectives de la Policía en el sindicato, según aparece en la carta bajo libertad de fianza.
Decenas de acusados, entre los que se incluye a 72 oficiales retirados y 8 bomberos, fueron detenidos esta madrugada para ser procesados hoy mismo en la Corte Suprema del Estado de Manhattan frente al juez Daniel Fitzgerald.
Los cuatro organizadores fueron acusados por hurto de mayor cuantía en primer y segundo grado y por intento de hurto mayor en segundo grado.
El resto de los acusados, 102 personas que recibieron dinero gracias al seguro de discapacidad de la Seguridad Social, tienen cargos de segundo grado por hurto mayor y de segundo grado por intento de hurto mayor.
La investigación sigue en curso y se espera que sean acusadas más personas a lo largo que se descubra información.
Además, algunos de los casos se remontan a actividades fraudulentas previas al 11-S. La carta de fianza de 11 páginas registra irregularidades desde 1988 y estima que los jubilados recibieron indemnizaciones por discapacidad fraudulenta de entre 50.000 y 500.000 dólares.
Fuente: Globovisión